El planeta tiene un problema. Mejor dicho, seis
La Asamblea de ONU Medio Ambiente, que se celebra estos d¨ªas en Nairobi, analiza los principales retos para la Tierra a trav¨¦s del informe 'Frontiers 2017'
Algunos son problemas que vienen de muy atr¨¢s a los que no se les ha hecho suficiente caso. Otros se mantienen en el tiempo y las nuevas tecnolog¨ªas vislumbran soluciones alternativas. Tambi¨¦n hay retos que acaban de surgir, vinculados a los m¨¢s recientes descubrimientos cient¨ªficos. Sea cual sea su origen, ya no hay tiempo para mirar a otro lado. La Asamblea de ONU Medio Ambiente, que se celebra estos d¨ªas en Nairobi (Kenia) y que cerrar¨¢ sus puertas ma?ana, pone a debate los seis principales desaf¨ªos para el planeta, recogidos en el informe Frontiers 2017, que se lanza este martes. Se trata de resistencia a los antimicrobianos, nanomateriales, protecci¨®n de las ¨¢reas marinas, tormentas de arena y polvo, acceso universal a la energ¨ªa limpia y migraciones clim¨¢ticas.
Resistencia a los antimicrobianos
La Organizaci¨®n Mundial de la Salud ya lo hab¨ªa alertado: a medida que se desarrolla la resistencia a los antimicrobianos, unas simples infecciones bacterianas, que antes pod¨ªan tratarse de manera simple, podr¨ªan llevar a la muerte en el futuro. Actualmente, cada a?o alrededor del mundo 700.000 personas fallecen debido a que los f¨¢rmacos antimicrobianos resultan menos efectivos. El medio ambiente es clave para detener esta tendencia.
El consumo de antibi¨®ticos por parte de las personas se ha disparado en un 36% desde el comienzo del nuevo milenio. Estas sustancias tambi¨¦n son cada vez m¨¢s empleadas en la crianza de ganado y se estima que este uso aumentar¨¢ en un 67% en 2030. El tratamiento de residuos no es suficiente para eliminar estas sustancias del agua y pueden ser absorbidas por las plantas. La gesti¨®n de los desechos s¨®lidos urbanos, el r¨¢pido incremento de la poblaci¨®n y la creciente urbanizaci¨®n sugieren que la exposici¨®n del hombre a las bacterias y a los genes de resistencia antibi¨®tica a trav¨¦s del agua que bebemos, de los alimentos que consumimos o simplemente por contacto con el medioambiente seguir¨¢ aumentando. El informe Frontiers 2017 aboga por una mayor regulaci¨®n en esta materia y por fomentar el compromiso del conjunto de la poblaci¨®n.
Nanomateriales
Son ampliamente usados en la industria alimentaria, cosm¨¦tica, productos de higiene, desinfectantes, ropa o dispositivos electr¨®nicos. Pero, a nanoescala, las propiedades de un material pueden cambiar de manera decisiva y, en consecuencia, su manera de interaccionar con el entorno. Para aprovechar a pleno su potencial, sostiene el informe, hay que determinar el impacto que generan en el medioambiente y en la salud.
Algunos materiales en su versi¨®n nano son objeto de estudio por un posible v¨ªnculo con inflamaciones pulmonares, la alteraci¨®n de la funci¨®n de determinados ¨®rganos o del sistema inmunitario, da?os a la piel y a los ojos. El marco de regulaci¨®n no es capaz de seguir el paso de la r¨¢pida expansi¨®n de este sector de mercado (estimada en un 18% anual y que llegar¨¢ hasta los 174.000 millones de d¨®lares en 2025).
Protecci¨®n de las ¨¢reas marinas
Sobrexplotaci¨®n de la pesca y otras actividades extractivas, desarrollo costero, contaminaci¨®n, turismo y cambio clim¨¢tico son algunas de las principales amenazas para la protecci¨®n de las ¨¢reas marinas. El informe advierte de que estamos consumiendo los recursos del mar m¨¢s r¨¢pido de lo que los ecosistemas pueden regenerarlos.
Un 14,4% de ¨¢reas costeras y mar¨ªtimas bajo la jurisdicci¨®n de un pa¨ªs se han declarado como zonas protegidas, rebasando el objetivo del 10% fijado para 2020
Un 14,4% de ¨¢reas costeras y mar¨ªtimas bajo la jurisdicci¨®n de un pa¨ªs ya se han declarado como zonas protegidas, rebasando el objetivo del 10% fijado para 2020. Sin embargo, la realidad es m¨¢s compleja. Distintos estudios demuestran que el ¨¦nfasis tiene que estar tanto en la cantidad de agua bajo protecci¨®n como en la calidad de la atenci¨®n, en t¨¦rminos, por ejemplo, de contribuir a la conservaci¨®n de la biodiversidad como de compartir de manera equitativa costes y beneficios. Para ONU Medio Ambiente una estrategia que pueda definirse efectiva tiene que ser inclusiva y basarse en el compromiso de la sociedad en su conjunto en reducir su huella en el ecosistema.
Tormentas de arena y polvo
La inhalaci¨®n de polvo puede generar o empeorar asma, bronquitis, infecciones de los ojos, irritaci¨®n de la piel. En algunas zonas del Sahel incluso se relaciona con brotes de meningitis. Cuando la exposici¨®n se convierte en cr¨®nica, contribuye a muertes prematuras por enfermedades respiratorias y cardiovasculares o c¨¢ncer de pulmones. Al mismo tiempo, estos fen¨®menos son causa de enfermedades y muerte de ganado, destrucci¨®n de cosechas, da?os a infraestructuras, erosi¨®n del suelo, contaminaci¨®n de ecosistemas o desertificaci¨®n. Las p¨¦rdidas econ¨®micas relacionadas con una tormenta pueden alcanzar centenares de millones de d¨®lares.
Las soluciones propuestas en Frontiers 2017 a corto y medio plazo se basan en estrategias de protecci¨®n, acompa?adas por sistemas de alerta temprana y de reducci¨®n de riesgos. A largo plazo, el camino pasa por un uso sostenible de tierra y agua.
Acceso universal a la energ¨ªa limpia
Alrededor de 1.100 millones de personas en el mundo carecen de acceso a energ¨ªa, a los que hay que sumar otros 1.000 millones que disponen de redes de electricidad inestables. Pese a que en los ¨²ltimos a?os se han registrado avances en pa¨ªses como India y Nigeria, las estimaciones apuntan a que no se podr¨¢ alcanzar el acceso universal en 2030, cuando 780 millones de personas seguir¨¢n sin este servicio b¨¢sico.
Las estimaciones apuntan a que no se podr¨¢ alcanzar el acceso universal a la electricidad en 2030, cuando 780 millones de personas seguir¨¢n sin este servicio b¨¢sico
La presencia de asentamientos urbanos informales dificulta la consecuci¨®n de la meta. Los inversores son reacios a instalar redes el¨¦ctricas en estas zonas, por miedo a los incendios propiciados por una elevada densidad de poblaci¨®n y el uso extendido de queroseno y otros materiales inflamables, que, adem¨¢s, exponen los residentes a contaminaci¨®n de interiores. Otro temor reside en la sobrecarga ilegal de las redes, que puede generar electrocuciones e incendios.
En los ¨²ltimos a?os, se han incrementado las soluciones basadas en energ¨ªa solar, sobre todo en ?frica y Asia, donde reside al menos el 95% de la poblaci¨®n sin acceso a electricidad. Estos sistemas son cada vez m¨¢s baratos y, adem¨¢s de reducir el riesgo de incendios y la contaminaci¨®n de interiores, permiten a las familias ahorrar frente a la compra de combustible.
Los autores de Frontiers 2017 insisten en la importancia de pol¨ªticas espec¨ªficas, que, combinadas con la innovaci¨®n de los mercados y el avance de la tecnolog¨ªa, pueden fomentar el desarrollo de la energ¨ªa verde, generando al mismo tiempo empleo. El informe, sin embargo, alerta tambi¨¦n de la necesidad de pensar en una gesti¨®n sostenible de los residuos generados por los productos solares, destinados a incrementarse en las pr¨®ximas d¨¦cadas.
Migraciones clim¨¢ticas
El cambio clim¨¢tico y la degradaci¨®n del entorno est¨¢n redibujando el mapa del mundo. A finales de 2016, los desplazados forzosos por causas naturales o por conflictos sumaban 65 millones, una cifra r¨¦cord desde la Segunda Guerra Mundial. Cada a?o 21,1 millones de personas se ven obligadas a abandonar sus hogares por motivos medioambientales. De mantenerse esta tendencia, en 2050 ser¨¢n 200 millones, es decir, una persona de cada 45.
El r¨¢pido incremento de poblaci¨®n tambi¨¦n contribuye a exacerbar la competencia por los recursos naturales. En los ¨²ltimos 70 a?os, al menos el 40% de los conflictos nacionales estaba relacionado con el control de tierra o agua. Los movimientos de poblaci¨®n, recuerda el informe, afectan el medioambiente, degradando el entorno y contribuyendo as¨ª a prolongar la crisis humanitaria o empeorando las relaciones con la comunidad de acogida.
Los expertos urgen soluciones que abarquen los factores pol¨ªticos, sociales y econ¨®micos a la base de este fen¨®meno y recuerdan que ser¨¢ imposible encontrar una soluci¨®n si no se elabora una estrategia a largo plazo para poner coto a la vulnerabilidad medioambiental.
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