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Durante el mes de febrero las puertas de las celdas se han abierto en Etiop¨ªa. M¨¢s de setecientas personas han sido liberadas de un plumazo, todas ellas consideradas por las organizaciones internacionales ¡°presos de conciencia¡±, y por las autoridades et¨ªopes, ¡°enemigos del Estado¡±, a menudo condenados o esperando a serlo en virtud de los recovecos de la controvertida ley antiterrorista del pa¨ªs. A pesar de la gravedad de las acusaciones, las autoridades han encontrado un complejo mecanismo de justificaciones para liberarlos, que ha ido desde los indultos masivos hasta la retirada de cargos, pasando por las excarcelaciones, sin demasiados argumentos. Los blogueros del colectivo Zone9 tambi¨¦n se han beneficiado del proceso y han visto c¨®mo se retiraban todos los cargos que pesaban contra ellos, casi cuatro a?os despu¨¦s de la operaci¨®n que condujo a su detenci¨®n. Sin embargo, este artefacto propagand¨ªstico dif¨ªcilmente har¨¢ olvidar a BefeQadu Hailu el a?o y medio que pas¨® en prisi¨®n.

Curiosamente, y en contra de lo que ocurre a menudo, en este caso, el gobierno et¨ªope hab¨ªa anunciado previamente, durante el mes de enero, la llegada de este proceso de liberaciones en bloque. Los pol¨ªticos opositores y los periodistas han copado la atenci¨®n y sin duda, el comunicador Eskinder Nega ha sido uno de los s¨ªmbolos. En 2012, este periodista y bloguero Eskinder Nega era condenado a 18 a?os de prisi¨®n, por un art¨ªculo en el que exploraba el impacto en Etiop¨ªa de las revueltas en el norte de ?frica. El poder consider¨® que se trataba de una llamada a la insurrecci¨®n y le aplic¨® la ley antiterrorista. Por eso, su liberaci¨®n, siete a?os despu¨¦s de su arresto, ha sido el momento m¨¢s simb¨®lico del proceso de liberaci¨®n.

Tras Nega, el m¨¢s claro ejemplo de esta nueva pol¨ªtica carcelaria son los miembros del colectivo de blogueros Zone9, que en 2014 atrajeron la atenci¨®n de esa estrategia de mordaza a las voces cr¨ªticas. Una amplia operaci¨®n acab¨® en abril de ese a?o con seis miembros del colectivo detenidos, junto a otros tres periodistas, todos ellos, acusados de intentar desestabilizar el pa¨ªs. En realidad, el blog que animaba el grupo era uno de los pocos espacios de informaci¨®n cr¨ªtica con el poder que quedaba en el pa¨ªs.

Los blogueros fueron puestos en libertad poco a poco y BefeQadu Hailu fue el ¨²ltimo en abandonar el cautiverio, 544 d¨ªas despu¨¦s de su arresto. Este joven et¨ªope ha recibido ahora, junto a sus compa?eros la noticia de que la fiscal¨ªa ha retirado todos los cargos que pesaban sobre ellos. ¡°Hemos recibido la noticia con alivio y la interpretamos como buena porque, al menos, demuestra al mundo que los cargos que se hab¨ªan presentado contra nosotros ten¨ªan motivaciones pol¨ªticas¡±, explica.?

BefeQadu Hailu ha estado en el punto de mira de las autoridades et¨ªopes permanentemente, desde aquella detenci¨®n de 2014. Es dif¨ªcil dudar de su implicaci¨®n a favor de la libertad de expresi¨®n y del respeto de los derechos humanos en el pa¨ªs. La c¨¢rcel no le supuso el escarmiento que las autoridades hab¨ªan previsto. Y en noviembre de 2016 volvi¨® a exasperar al poder. Se hab¨ªa convertido, de nuevo, en una de las voces cr¨ªticas del pa¨ªs, de las que consegu¨ªan difundir un mensaje. En este caso, BefeQadu Hailu pon¨ªa los puntos sobre las ¨ªes del estado de emergencia que se hab¨ªa declarado en Etiop¨ªa ante la ola de protestas en la regi¨®n de Oromo. Se intervinieron y se interrumpieron las comunicaciones, se decretaron toques de queda y se dieron potestades a las autoridades para castigar cualquier discurso cr¨ªtico. Pero, de nuevo, Hailu se mostr¨® cr¨ªtico con las medidas excepcionales y con la represi¨®n de las protestas en Oromia, que a esas alturas ya se hab¨ªan extendido a otras regiones del pa¨ªs. En noviembre de 2016, volvi¨® a ser arrestado temporalmente.

A nosotros nos han ayudado las campa?as en las redes sociales que han servido para dar voz

El bloguero considera que el proceso de liberaci¨®n de presos pol¨ªticos del gobierno et¨ªope responde ¡°a la presi¨®n y a las protestas p¨²blicas que se han desarrollado durante los ¨²ltimos cuatro a?os¡±. Por lo que respecta a colectivo de blogueros del que forma parte, BefeQadu Hailu destaca el papel que ha jugado la movilizaci¨®n internacional: ¡°A nosotros nos han ayudado las campa?as en las redes sociales que han servido para dar voz¡±. A pesar de todo, el activista no cree en la sinceridad de estos movimientos del gobierno o, al menos, no cree que supongan un cambio sustancial en las medidas que adoptan las autoridades. ¡°Solo es un movimiento pol¨ªtico para sobrevivir a la presi¨®n p¨²blica¡±, sentencia Hailu.

En el grupo de los m¨¢s de setecientos presos pol¨ªticos liberados hay opositores y activistas de los derechos humanos, defensores de comunidades como las de Oromia y, sobre todo, periodistas. Ellos han sido los que se han llevado una buena parte de los titulares. Sin embargo, la puesta en libertad de los profesionales de la informaci¨®n no constituye una mejora determinante del estado de la libertad de expresi¨®n en Etiop¨ªa, siempre en la picota de las organizaciones internacionales. ¡°Es cierto¡±, reconoce BefeQadu Hailu, ¡°que el estado de la libertad de expresi¨®n parece m¨¢s relajado actualmente, pero no hay que confiarse. Eso no significa nada definitivo. La libertad de expresi¨®n necesita una larga trayectoria y un ejemplo prolongado en el tiempo. No se puede mejorar de la noche a la ma?ana, solo porque se libere a los periodistas encarcelados. Hay que construir un sistema que garantice el respeto y que haga que la libertad de expresi¨®n, de alguna manera, se institucionalice¡±.

Incluso el proceso de retirada de los cargos ha sido un tanto tumultuoso porque en medio de la libertad definitiva de los activistas se ha colado un sorprendente fallo burocr¨¢tico. El pasado 14 de febrero BefeQadu Hailu y uno de sus compa?eros recibieron la noticia de que la fiscal¨ªa hab¨ªa retirado los cargos, un tercer compa?ero implicado en el mismo proceso, Atnafu Berhane, deber¨ªa haber sido exonerado tambi¨¦n, pero su identidad aparec¨ªa confundida en los documentos oficiales. Tuvo que esperar hasta el pasado 27 de febrero, despu¨¦s de retrasos y noticias contradictorias, para que oficialmente se formalizase el levantamiento de las acusaciones.

En todo caso, BefeQadu Hailu no ha dudado sobre su intenci¨®n de seguir blogueando, casualmente como ya hab¨ªa hecho despu¨¦s de su liberaci¨®n en diciembre de 2015. Una decisi¨®n que no ha cambiado el acoso al que ha sido sometido desde entonces. ¡°Seguir¨¦ contando en todo momento, siempre que tenga algo que decir y que escribir. La libertad de expresi¨®n es algo a lo que no estoy dispuesto a renunciar¡±. BefeQadu reconoce que el blog colectivo de Zone9 est¨¢ ¡°un poco estancado ¨²ltimamente¡±. Y justifica esta reducci¨®n de la actividad, porque los miembros del grupo ¡°han estado muy ocupados con el activismo por los derechos humanos¡±. Sin embargo, ¨¦l mantiene su propia bit¨¢cora y es en ella y en otros medios de comunicaci¨®n digitales en los que sigue reivindicando la necesidad de luchar por el respeto a los derechos fundamentales en Etiop¨ªa. Una de sus ¨²ltimas acciones, desafiando cualquier riesgo de un castigo por parte de las autoridades, ha sido precisamente un v¨ªdeo de una entrevista al periodista excarcelado, Eskinder Nega, que supone una aut¨¦ntica declaraci¨®n de intenciones a favor de la libertad de expresi¨®n por ambas partes.

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