Una moneda oxidable para aumentar las pensiones
El sistema monetario alternativo permitir¨ªa incrementar la recaudaci¨®n de Hacienda
La pensi¨®n es un tema que nos interesa a todos, porque es el medio que garantiza nuestra supervivencia tras jubilarnos. Sabemos, al mismo tiempo, que es cada vez m¨¢s dif¨ªcil que la Seguridad Social costee todo el fondo necesario para asegurar una vida digna a todos los pensionistas, ya que sigue reduci¨¦ndose el n¨²mero de contribuyentes mientras que cada vez m¨¢s personas tienen que cobrar. Hoy quisiera proponer una idea audaz que podr¨¢ liberarnos de esta inquietud.
Huelga decir que el objetivo de la pensi¨®n es cubrir el costo de vida de aquellas personas que, principalmente por edad (pero tambi¨¦n por otro motivo, entre otros la discapacidad), ya no tienen otra fuente de ingreso. Se supone, por lo tanto, que el pensionista gasta todo el valor que recibe para llegar al fin del mes, o sea se espera que el dinero cumpla exclusivamente la funci¨®n del medio de pago sin ser atesorado (v¨¦ase mi post del mes pasado para conocer las tres funciones del dinero).
La oxidaci¨®n, sobre la que ya escrib¨ª en 2014, es una t¨¦cnica poderosa para facilitar la recaudaci¨®n del fondo que necesita el Sector P¨²blico, adem¨¢s de estimular las actividades econ¨®micas. La experiencia de W?rgl (1932 ¨C 1933), un ¨¦xito en su puesta en marcha, mostr¨® que los portadores de este dinero, que perd¨ªa su valor paulatinamente, ?quisieron adelantar el pago de impuestos! (m¨¢s informaci¨®n al respecto en alem¨¢n). Este hecho hist¨®rico sugiere la posibilidad de poder financiar un proyecto tan colosal como para asegurar la pensi¨®n a una poblaci¨®n cada vez m¨¢s envejecida.
Es muy sencillo implementar este sistema: basta instalar una secci¨®n en el Gobierno Espa?ol encargada a la emisi¨®n y circulaci¨®n de esta moneda oxidable electr¨®nica. Ya he hecho una propuesta similar para aumentar la natalidad, pero una caracter¨ªstica relevante es permitir el pago de la cuota de la Seguridad Social en esta moneda oxidable (habr¨¢ que estudiar si se acepta ¨ªntegra o parcialmente).
los portadores de este dinero ?quisieron adelantar el pago de impuestos!
Como a nadie le gusta dejar que su dinero pierda su valor, cualquier actor econ¨®mico piensa en gastarlo cuanto antes, y los que reciben m¨¢s de lo que gastan aprovechar¨¢n la cantidad sobrante para aumentar su cuota de Seguridad Social, resultando en el aumento del fondo para pagarles a los pensionistas. Y el aumento de la actividad econ¨®mica significa el aumento del impuesto recaudado por el Estado, lo que permitir¨¢ evitar recortes o dedicar m¨¢s presupuesto a la sanidad y a la educaci¨®n.
La implementaci¨®n de este sistema requiere un cambio profundo del paradigma en cuanto al propio concepto popular sobre el dinero. Solemos comprenderlo como medio de ahorro que mantiene su valor a largo plazo (excepto un poco de depreciaci¨®n debido a la ligera inflaci¨®n) y a mucha gente, sobre todo a la gente mayor, le cuesta trabajo reconocer esta moneda oxidable como dinero.
A lo mejor valdr¨ªa la pena cambiar la denominaci¨®n y llamarlo ¡°dinero¡± a ¡°punto¡± para liberar a la gente de este preconcepto y reaccionar con m¨¢s flexibilidad frente al hecho de que el punto oxida. Tambi¨¦n es imprescindible explicar que la moneda oxidable es una herramienta ideal para mejorar el presupuesto de la Administraci¨®n P¨²blica y la Seguridad Social para convencer al p¨²blico a aceptar este nuevo sistema monetario y paralelo.
La crisis de la Seguridad Social y de la finanza p¨²blica no es un problema exclusivo de Espa?a sino que, hoy en d¨ªa, es un fen¨®meno universal que padecen pr¨¢cticamente todos los pa¨ªses industrializados. Valdr¨ªa la pena leer El Orden Econ¨®mico Natural (1916), obra en la que Silvio Gesell describi¨® su propuesta de moneda oxidable, para comprender la funci¨®n de la moneda oxidable y aplicarla en nuestro contexto contempor¨¢neo del siglo XXI (por ejemplo, moneda electr¨®nica oxidable en vez de billetes con sellos).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.