La preocupante realidad de la alimentaci¨®n de los ni?os espa?oles

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Hace dos a?os sali¨® a la luz un estudio elaborado por la Fundaci¨®n Espa?ola de la Nutrici¨®n que evaluaba el consumo de alimentos de los espa?oles en distintos rangos de edades. Gracias a ¨¦l, pudimos darnos cuenta de lo extremadamente desastrosa que es en la actualidad la alimentaci¨®n cotidiana de los ni?os, concretamente en este caso de 9 a 12 a?os, aunque podr¨ªamos extrapolarlo a ni?os de un rango mayor de edades.

Si bien la cantidad de calor¨ªas consumidas por los mismos no superan incluso se queda cortas de las recomendaciones oficiales para un mantenimiento de peso y de salud (entre 2.000 y 2.450 kcal/d¨ªa recomendadas y un consumo en el estudio de 1.960 kcal/d¨ªa), la calidad de los alimentos ingeridos dista mucho de lo que un nutricionista de verdad, sin intereses econ¨®micos ni sesgos, cree que deber¨ªa ser la correcta (aqu¨ª pod¨¦is ver las recomendaciones oficiales de la Universidad Complutense de Madrid: PDF).

Podemos empezar diciendo que el primer grupo alimentario o alimento que se consume es el pan, y sabiendo que seg¨²n Mercasa el consumo de pan integral en Espa?a no supera el 7% (PDF), podemos deducir que el 93% del pan es blanco, el que no recomendamos los nutricionistas. Empezamos mal.

Pasamos al segundo grupo y nos encontramos la hecatombe. S¨ª, el segundo grupo de alimentos consumidos a diario por los ni?os espa?oles es la boller¨ªa y pasteler¨ªa. Algo que se aconseja como uso espor¨¢dico es consumido m¨¢s que cualquier otro alimento nutritivo. Cabe recordar que son altas en az¨²car a?adido, harinas refinadas y grasas de mala calidad, tremendamente cal¨®ricos y con una capacidad de saciar rid¨ªcula en comparaci¨®n con alimentos normales. Estos productos han invadido los desayunos, almuerzos y meriendas de los ni?os, que han abandonado algo tan sencillo de comer como la fruta.

Pasando por carnes frescas y aceite de oliva nos encontramos que en el quinto lugar est¨¢n los embutidos y las carnes procesadas. Altos en sal y clasificados como carcin¨®genos para humanos con suficiente evidencia y relaci¨®n causal por la IARC creo que no deber¨ªan ocupar este puesto. Es normal que se caiga en esto cuando vamos con prisas y las salchichas se convierten en el gran aliado de las cenas, como si hacer un filete a la plancha fuera algo m¨¢s complicado.

Continuamos con la leche, que estar¨ªa bien si en la mayor¨ªa de los casos no se le a?adieran productos azucarados con un poco de cacao: los mal llamados ¡°cacaos solubles¡±, porque de cacao tienen poco y el 70% del producto es az¨²car.

El siguiente grupo es el de precocinados. S¨ª, volvemos a encontrarnos otro grupo de productos ultraprocesados de mayor consumo, y diario, que alimentos sencillos. Por cierto, es un error meter una pizza o una lasa?a en el horno antes que hacer un arroz o unos garbanzos, pensando que lo primero m¨¢s r¨¢pido; os animo a cronometrar cada cocinado.

Los ni?os espa?oles consumen m¨¢s del 50% de sus calor¨ªas diarias en forma de productos ultraprocesados

Tras los precocinados viene un alimento concreto (y no un grupo alimentario): el chocolate. Se toma m¨¢s chocolate que todas las frutas o todas las verduras y hortalizas. Y el doble de chocolate que de legumbres. Esto es algo salvaje lo miremos por donde lo miremos.

Las frutas, verduras y hortalizas aparecen en los puestos 13? y 14?. Es m¨¢s, se toman las mismas calor¨ªas en forma de zumos que de frutas, cuando sabemos que no son comparables y que el consumo de zumo se asocia a peores par¨¢metros de salud mientras la fruta completa a mejores.

Otro dato: solamente de l¨¢cteos, los ni?os espa?oles consumen (y con bastante diferencia) m¨¢s calor¨ªas diarias que del sumatorio de todas las legumbres, huevos, verduras, hortalizas, frutas, pescados y mariscos. Concretamente un 15.8% frente a 12.2%.

Si hacemos una suma, nos sale la escalofriante cifra de que los ni?os espa?oles consumen m¨¢s del 50% de sus calor¨ªas diarias en forma de productos ultraprocesados, algo que coincide con otros pa¨ªses occidentales donde se observan consumos de estos productos entre un 25% y un 50%.

Si esto no lo vemos como un problema nos encaminamos a una epidemia a¨²n mayor de obesidad infantil de la que estamos viviendo, con valores cercanos al 40% entre sobrepeso y obesidad. Y si la obesidad no preocupa de verdad, podr¨ªamos hablar de las ¨²ltimas investigaciones donde se relacionan el consumo de estos productos con aumentos de m¨¢s de un 10% en el desarrollo de c¨¢ncer.

Pablo Zumaquero (@pzjarana) es dietista-nutricionista, tecn¨®logo de los alimentos, profesor en m¨¢ster de la universidad Isabel I y divulgador.

NUTRIR CON CIENCIA es una secci¨®n sobre alimentaci¨®n basada en evidencias cient¨ªficas y en el conocimiento contrastado por especialistas. Comer es mucho m¨¢s que un placer y una necesidad: la dieta y los h¨¢bitos alimenticios son ahora mismo el factor de salud p¨²blica que m¨¢s puede ayudarnos a prevenir numerosas enfermedades, desde muchos tipos de c¨¢ncer hasta la diabetes. Un equipo de dietistas-nutricionistas nos ayudar¨¢ a conocer mejor la importancia de la alimentaci¨®n y a derribar, gracias a la ciencia, los mitos que nos llevan a comer mal.