La sombra de Lumumba, esta vez, contra la corrupci¨®n

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Avances en la lucha contra la corrupci¨®n

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?Corrupci¨®n? S¨ª pero no pero s¨ª

De la corrupci¨®n en ?frica a los secretos de las embajadas

Jean Jacques Lumumba era un joven y prometedor empleado de banca hasta que un d¨ªa decidi¨® denunciar unos sospechosos movimientos bancarios que, supuestamente, desviaban dinero p¨²blico hacia cuentas del entorno m¨¢s pr¨®ximo al presidente de la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo, Joseph Kabila. Empiezan as¨ª los Lumumba Papers, uno de los grandes esc¨¢ndalos de corrupci¨®n destapados en el pa¨ªs, iniciado gracias a la filtraci¨®n de un sobrino-nieto del ic¨®nico primer ministro de la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo, Patrice Lumumba. Hoy, dos a?os despu¨¦s de que se refugiase en Europa y 20 meses m¨¢s tarde de que se hiciesen p¨²blicas en B¨¦lgica sus filtraciones, Jean Jacques Lumumba asegura que sigue recibiendo constantemente amenazas de muerte.

Jean Jacques Lumumba encarna el papel que pueden tener los denunciantes, los filtradores, los que en el entorno franc¨®fono se conocen como lanzadores de alerta, en la transformaci¨®n en positivo del continente africano. Son personas que han sido testigos o que tienen informaciones fiables de casos de corrupci¨®n y no han podido resistir el impulso de sacarlos a la luz, a pesar de los riesgos. ¡°La lucha contra la corrupci¨®n es el caballo de batalla de nuestro proceso por el desarrollo¡±, se?ala Lumumba, que ha recibido la cobertura de PPLAAF (Plataforma de Protecci¨®n de los Lanzadores de Alerta de ?frica). ¡°La Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo tiene muchos recursos, mucho dinero y mucho potencial, pero la corrupci¨®n, el robo de los recursos p¨²blicos es un lastre. Es necesario luchar contra estos antivalores y contra la corrupci¨®n¡±, precisa.

Jean Jacques ten¨ªa por delante una prometedora carrera en Kinshasa. Apenas treinta?ero fue nombrado jefe del Departamento de Cr¨¦dito de la filial congole?a del BGFI Bank, uno de los principales bancos del pa¨ªs, dirigido por personas del entorno m¨¢s pr¨®ximo a la familia presidencial. Sin embargo, detect¨® pronto movimientos sospechosos, observ¨®, investig¨® y reuni¨® pruebas. ¡°Mis denuncias empezaron en Kinshasa. Fui a ver al director general para explicarle lo que ocurr¨ªa y ¨¦l me amenaz¨®¡±, explica. ¡°Claro que sab¨ªa cu¨¢l era el riesgo. Era consciente de que las informaciones con las que contaba revelaban acciones muy graves, porque estaban perjudicando a la buena marcha del Estado. Hablamos de millones y millones de d¨®lares que hab¨ªan sido desviados en favor de la familia presidencial. Lo que yo revel¨¦ era solo una parte de lo que est¨¢ ocurriendo, porque toda la econom¨ªa est¨¢ gangrenada¡±.

El joven empleado del banco dej¨® la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo en junio de 2016 y se refugi¨® en Europa. ¡°Empezaron a acusarme de gestionar mal el cr¨¦dito. Cuando me lleg¨® informaci¨®n de que quer¨ªan hacer que me detuviesen, decid¨ª abandonar el pa¨ªs. Despu¨¦s de escapar a Europa las amenazas no pararon. [Mi jefe] les dec¨ªa a las personas de su entorno que iba a hacer que me asesinasen. Fue entonces cuando denunci¨¦¡±, explica.

Lo que yo revel¨¦ era solo una parte de lo que est¨¢ ocurriendo, porque toda la econom¨ªa est¨¢ gangrenada

Solo cuatro meses despu¨¦s de refugiarse en Europa y despu¨¦s de haber tramitado su solicitud de asilo, el informante sac¨® a la luz su historia, a trav¨¦s de una publicaci¨®n en el diario belga Le Soir, que se apoyaba en los papeles que hab¨ªa conseguido en el BGFI Bank. ¡°Esos documentos mostraban los lazos entre algunos responsables de sociedades y el director general del banco. Entend¨ª que toda la operaci¨®n era una red de empresas mafiosas y en el centro estaban ese director general, que es un hermano adoptivo del presidente Kabila, y otras personas de su c¨ªrculo m¨¢s cercano¡±, relata el banquero.

Lumumba explica que denunci¨® para salvar la vida ante las amenazas de muerte, pero hab¨ªa otros motivos. ¡°Ten¨ªa dos responsabilidades, la moral y la profesional, porque la gesti¨®n del riesgo de los cr¨¦ditos era mi responsabilidad. Hab¨ªa que proteger la profesi¨®n y tener una visi¨®n patri¨®tica. Los desv¨ªos de dinero tocaban la vida de toda una naci¨®n. En el Congo la gente est¨¢ mal pagada, hay pocas carreteras y la corrupci¨®n se ha extendido. No pod¨ªa continuar contribuyendo a perjudicar a este pa¨ªs¡±.

El enfoque ¡°patri¨®tico¡± se ha ido imponiendo. ¡°Llamarse Lumumba en la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo es una gran responsabilidad. Crec¨ª con la madre de Lumumba y me inculc¨® muchos valores. Envejeci¨® con el dolor del asesinato de su hijo. Recuerdo que me dec¨ªa que hab¨ªa que hacer todo lo que posible para mantener el legado de Patrice, siendo hombres ejemplares¡±, explica el joven empleado de banca.

Jean Jacques Lumumba ha hecho renuncias importantes que han tocado tambi¨¦n a sus seres queridos. ¡°Mi familia ten¨ªa miedo de mi denuncia porque estaba atacando los intereses del presidente de la Rep¨²blica, pero ten¨ªa que hacerlo. No por m¨ª, porque si fuera as¨ª, me hubiese quedado en Congo, viviendo y mirando para otro lado con la corrupci¨®n. Ten¨ªa que hacerlo, por el inter¨¦s de toda una naci¨®n que era lo que estaba en juego¡±. ¡°Mi hermano, mi hermana y mi t¨ªa se han visto obligados a exiliarse tambi¨¦n¡±, recuerda. ¡°Sigo recibiendo amenazas de muerte constantemente. Estoy seguro de que el d¨ªa que baje la guardia en mi seguridad, no van a dudar en matarme. No estoy totalmente a salvo¡±. A pesar de esta situaci¨®n, asegura: ¡°No tengo miedo. Mi vida importa poco en comparaci¨®n con el futuro de este Congo y de millones de congole?os. Lumumba dej¨® su vida y muchos activistas congole?os tambi¨¦n; si debo dejar mi vida por este pa¨ªs, no ser¨¢ un gran sacrificio¡±.

Contratado en otro banco, se siente reforzado: ¡°La honestidad en la vida paga. He recuperado mi carrera laboral porque una persona ley¨® mi historia y crey¨® en mi honestidad¡±. Jean Jacques Lumumba anima a otras personas con informaci¨®n a denunciar: ¡°Los congole?os est¨¢n hartos de vivir en la misera mientras otros se aprovechan. Denunciar puede resultar dif¨ªcil, pero todos los que tengan pruebas que puedan hacer que este pa¨ªs cambie, que las cosas mejoren, deber¨ªan denunciarlo porque el Congo de ma?ana castigar¨¢ a todos los que de cerca o de lejos han participado en su destrucci¨®n¡±.

Lumumba se muestra dispuesto a seguir con esta lucha acompa?ando a otros que tomen este mismo camino. En su caso, recuerda el apoyo de la periodista que public¨® su historia en el diario Le Soir, Colette Braeckman, ¡°porque ella se ha arriesg¨® a creer en la informaci¨®n y difundirla para protegerme¡±. Pero tambi¨¦n se refiere a la organizaci¨®n que le ha brindado el apoyo legal y tambi¨¦n el moral. PPLAAF (Plataforma de Protecci¨®n de los Lanzadores de Alerta de ?frica) ha continuado trabajando con los papeles facilitados por Lumumba, junto a organizaciones period¨ªsticas y medios. ¡°Van a seguir haci¨¦ndose p¨²blicos otros casos de corrupci¨®n y eso prueba que la juventud congole?a no quiere seguir inscribi¨¦ndose en esa l¨®gica de predaci¨®n¡±, advierte Lumumba.

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