?A qu¨¦ edad puedo dejar a mi hijo solo en casa?

Una de las dudas m¨¢s recurrentes entre los padres es cu¨¢ndo dejar a sus hijos solos en casa. Muchos vacilan sobre cu¨¢l es la edad correcta a la que su hijo es lo suficientemente maduro como para que se quede solo y se puedan ir tranquilos a una cena, a una reuni¨®n o, incluso, de vacaciones unos d¨ªas. Entonces, ?cu¨¢ntos a?os debe tener el ni?o para ser bastante maduro para quedarse solo en casa? ¡°Aqu¨ª hay que plantear una respuesta a la gallega. Depende¡±, explica el doctor Manuel Antonio Fern¨¢ndez Fern¨¢ndez, conocido como El Neuropediatra responsable de INANP, Instituto Andaluz de Neurolog¨ªa Pedi¨¢trica en Sevilla y del proyecto Lifestyle Profesional. ¡°Hay muchos factores que influyen en el proceso de madurez de un ni?o como para restringirlo a una edad concreta de forma aislada. Probablemente, pusi¨¦ramos la edad que pusi¨¦ramos, muchos padres no se sentir¨ªan identificados con la situaci¨®n de su hijo¡±, explica el experto. Efectivamente, hay ni?os que con ocho o nueve a?os son perfectamente responsables como para permanecer solos en casa durante un corto periodo de tiempo, mientras otros no lo son hasta los 13 o 14 a?os. ¡°Independientemente de ello¡±, prosigue, ¡°no es recomendable dejar un menor sin supervisi¨®n hasta que tengamos la absoluta certeza de que es capaz de asumir esa situaci¨®n sin ning¨²n riesgo¡±.

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Entonces, c¨®mo pueden saber los padres que el ni?o es suficientemente maduro para quedarse solo en casa. Para el doctor, no existen unos marcadores madurativos fiables que puedan determinar esta situaci¨®n de forma exacta, ¡°a pesar de ello, el nivel de responsabilidad general que un ni?o es capaz de alcanzar en sus actividades de la vida cotidiana, est¨¢ muy relacionado¡±. ¡°En mi consulta, por ejemplo, me sorprenden algunos padres cuando me dicen que su hijo de nueve a?os es capaz de hacerse la comida e incluso de fre¨ªrse un huevo. Realmente, no tengo nada claro que un ni?o de esa edad deba realizar este tipo de tareas dom¨¦sticas sin supervisi¨®n. Por otro lado, a partir de los 10 o 12 a?os la situaci¨®n es muy diferente y las posibilidades de permanecer en casa solo sin peligro son mucho m¨¢s altas¡±, argumenta.

Para poner a prueba al peque?o lo recomendable es planificar las situaciones de forma anticipada, de forma progresiva y si es posible con ¡°situaciones fingidas por parte de los padres¡±. ¡°Yo siempre cuento la historia de cuando mi madre me dej¨® volver solo desde el colegio a casa, que estaba a unos 15 minutos andando. No recuerdo cu¨¢ntos a?os ten¨ªa, pero fue algo consensuado. A pesar de ello, salir del colegio y por primera vez no ver a mi madre, me result¨® duro. Fui un poco angustiado todo el camino, aunque ya lo hab¨ªa hecho otras veces con amigos. A mitad del recorrido me di la vuelta para mirar hacia atr¨¢s (no s¨¦ por qu¨¦) y all¨ª estaba mi madre vigilando que no tuviera ning¨²n problema y sin avisarme. Esto puede ser un buen ejemplo¡±, sostiene el doctor Fern¨¢ndez.

Crear la relaci¨®n de confianza

Los expertos est¨¢n de acuerdo en que uno de los puntos fundamentales en la relaci¨®n con nuestros hijos es tener y mantener una relaci¨®n de confianza rec¨ªproca para esto, como en el resto de cuestiones. El menor tiene que saber que puede tener acceso directo a los padres para hablar de lo que sea necesario y desarrollar una relaci¨®n emocionalmente ¨ªntima con la familia para que sepa en quien puede confiar. ¡°Al dejarlo solo en casa, por ejemplo¡±, contin¨²a, ¡°deber¨ªa haber alguien cercano, vecinos, amigos, que est¨¦ informado y tenga la posibilidad de acudir de inmediato en caso de necesidad. Igualmente, debemos aprovechar las nuevas tecnolog¨ªas para mantener la conexi¨®n as¨ª como incluso para supervisar en la distancia. De esta forma, tanto el ni?o como los padres ir¨¢n viviendo con mayor naturalidad estas situaciones de forma progresiva hasta hacerlas algo rutinario¡±.

Para el doctor, si se hace todo esto, la aparici¨®n de ansiedad por separaci¨®n, por ejemplo, es posible pero mucho menos probable. Este trastorno es una etapa del desarrollo durante la cual el ni?o se pone ansioso cuando se separa del cuidador primario. ¡°El ni?o siente la presencia de los padres aunque esta sea en la distancia y se mantiene un v¨ªnculo de comunicaci¨®n directa que rebaja a m¨ªnimos esta situaci¨®n. A pesar de ello, alguna vez es habitual que aparezca¡±.