¡°Tengo m¨¢s miedo al hombre que a los volcanes¡±
Para el vulcan¨®logo Clive Oppenheimer la relaci¨®n que existe entre el cambio clim¨¢tico y las erupciones queda eclipsada por las acciones del hombre, que contamina 100 veces m¨¢s
El poder destructor de los volcanes es una de las mayores demostraciones de fuerza que posee la naturaleza. Un golpe de realidad que, a lo largo de la historia, ha enfrentado al ser humano ante la verdadera pirotecnia con la que nuestro planeta es capaz de responder. Colosos impredecibles que en cuesti¨®n de horas pueden borrar del mapa ciudades enteras, sepult¨¢ndolas bajo un mar de lava que reduce todo a cenizas.
Para el vulcan¨®logo brit¨¢nico Clive Oppenheimer los volcanes ofrecen muchas claves sobre c¨®mo atender los sistemas de alerta con los que el entorno natural se manifiesta: ¡°Los volcanes significan m¨¢s que amenaza y belleza. Son paisajes y fuerzas que nos han ayudado a dar forma a nuestro mundo y, en muchas ocasiones, a ense?arnos que no siempre se puede huir de la naturaleza¡±. Desde hace a?os, este reconocido doctor en vulcanolog¨ªa por la Open University y profesor en la Universidad de Cambridge investiga los riesgos y los procesos volc¨¢nicos, as¨ª como sus consecuencias sociales y ambientales. ¡°El vulcanismo y la vida est¨¢n estrechamente ligados¡±, asegura.
Esa relaci¨®n entre el hombre y los volcanes es trasladada al cine por el director Werner Herzog en el documental Dentro del Volc¨¢n (Into the inferno). Un viaje hipn¨®tico a trav¨¦s del magma volc¨¢nico que gu¨ªa el propio Oppenheimer y en el que se reflexiona sobre el m¨¢s at¨¢vico y visceral v¨ªnculo que la humanidad guarda con estos colosos de fuego. ¡°Basta con observar el aire que respiramos. La atm¨®sfera es producto tambi¨¦n de los gases que expelen los volcanes. Incluso la composici¨®n de las erupciones y la de los seres humanos es similar: carbono, hidr¨®geno, ox¨ªgeno¡¡±, apunta.
Into the inferno llev¨® a Oppenheimer a visitar, el pasado mes de noviembre, una de las zonas volc¨¢nicas m¨¢s importantes de Espa?a gracias a la Muestra de Cine de Lanzarote. El documental fue el encargado de abrir la nueva secci¨®n Trasfoco, cuya primera edici¨®n se centr¨® en el elemento que m¨¢s profundamente ha marcado la identidad de la isla en t¨¦rminos geol¨®gicos, culturales, econ¨®micos y religiosos: el volc¨¢n. La Soufriere fue otra de las cintas dirigidas por Herzog que se proyectaron en la muestra. Este cortometraje le sirve a Oppenheimer para explicar la complejidad que reporta predecir la erupci¨®n de estos cr¨¢teres. El documental, filmado en 1977, recoge la historia de una inminente erupci¨®n en la isla de Guadalupe.
Como en muchas otras disciplinas, el cambio clim¨¢tico es uno de los factores que ha a?adido nuevos enigmas en la vulcanolog¨ªa
¡°Todos los indicios parec¨ªan mostrar que el estallido del volc¨¢n se producir¨ªa de un momento a otro¡±, se?ala el vulcan¨®logo. Tambi¨¦n lo pensaron las autoridades de la isla, que evacuaron a todos sus habitantes, creando una gran expectaci¨®n medi¨¢tica. Sin embargo, las se?ales se equivocaron y aquel volc¨¢n jam¨¢s vomit¨® su lava. A finales de abril de 2018, en Chile asistieron a un hecho totalmente distinto, cuando el volc¨¢n Calbuco comenz¨® a hacer erupci¨®n casi sin previo aviso. Hechos que se repitieron en Costa Rica, Nicaragua, Haw¨¢i o Guatemala, que vio como el Volc¨¢n de Fuego provoc¨® m¨¢s de un centenar de muertos y 3.000 heridos y evacuados. ¡°En t¨¦rminos cient¨ªficos, su medici¨®n y predicci¨®n es muy dif¨ªcil. Necesitamos muchos estudios para hacer pron¨®sticos y, aun as¨ª, los volcanes siguen resultando impredecibles. Podr¨ªamos asegurar que nueve de cada diez volcanes que muestran signos de una posible erupci¨®n, terminan por estabilizarse. El problema es que uno de cada 10 s¨ª estallar¨¢¡±, concluye.
A escala global, los volcanes activos se monitorean de forma permanente. Todo esto puede dar pistas de que algo est¨¢ por venir. Para sumar m¨¢s complejidad, no solo cada volc¨¢n tiene su ¡°propia personalidad¡±, seg¨²n los especialistas, sino tambi¨¦n son de distintos tipos. ¡°A pesar de la tecnolog¨ªa, hay tantos procesos implicados en la actividad de un volc¨¢n que es dif¨ªcil discriminar con precisi¨®n cu¨¢ndo y c¨®mo van a despertar¡±, a?ade Oppenheimer.
Como en muchas otras disciplinas, el cambio clim¨¢tico es uno de los factores que ha a?adido nuevos enigmas en la vulcanolog¨ªa. La relaci¨®n m¨¢s directa que menciona Oppenheimer es la que tiene que ver con el aumento del nivel del mar. ¡°Muchos volcanes est¨¢n cerca de la costa y el crecimiento del agua, a consecuencia del cambio clim¨¢tico, puede ser un detonante en la transformaci¨®n de las presiones. Esto, a su vez, puede propiciar la aparici¨®n de m¨¢s erupciones volc¨¢nicas¡±.
La clave, no del todo clara, parece residir en los cambios en la presi¨®n superficial que se generan como resultado de la desaparici¨®n de la cubierta glaciar; y es que el peso del hielo parece mantener comprimido al magma impidiendo de forma efectiva su movimiento. As¨ª lo apunta un estudio realizado por la Universidad de Leeds. Sin embargo, Oppenheimer se muestra cauto con estas conclusiones. ¡°Determinar esto con certeza necesita mucho tiempo de observaci¨®n. Necesitar¨ªamos 10.000 a?os de estudio. Muchas veces, me preguntan por qu¨¦ hay tantas erupciones en los ¨²ltimos a?os. La realidad es que no son tantas erupciones, sino que se tienen m¨¢s en cuenta, ocupan m¨¢s espacio medi¨¢tico¡±, afirma.
Con respecto a la responsabilidad de los volcanes en el cambio clim¨¢tico, Oppenheimer tambi¨¦n lo tiene claro: ¡°Las erupciones volc¨¢nicas emiten cada a?o a la atm¨®sfera entre 110 y 250 millones de toneladas de CO2, pero las actividades humanas multiplican esas emisiones por 100¡±. Unas palabras a las que este cient¨ªfico, que ha estado casi al borde de la incandescencia de un volc¨¢n, a?ade: ¡°Personalmente tengo m¨¢s miedo al hombre que a los volcanes¡±.
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