Louis Garrel, seguramente el franc¨¦s m¨¢s interesante del momento

Lo de ¡°la comedia francesa del a?o¡± es un eslogan promocional tan trillado que ya funciona como subg¨¦nero en s¨ª mismo, y la f¨®rmula de su ¨¦xito (¡°?m¨¢s de un mill¨®n de espectadores en Francia!¡±) radica en que los galos son uno de los pueblos que m¨¢s se regodea en sus estereotipos: ¡°Ya s¨¦ que mi peinado es horrible¡±, se disculpa Louis Garrel (Par¨ªs, 1983) nada m¨¢s entrar en la habitaci¨®n. ¡°Es que es franc¨¦s¡±, a?ade.

Este gal¨¢n millennial evoca la bohemia de Delon, el encanto de Chevalier y el erotismo de Belmondo. Solo que en vez de fumar, vapea. Sin embargo, su ¨²ltima pel¨ªcula como actor y director, Un hombre fiel, que se estrena el pr¨®ximo 17 de mayo, recuerda a Woody Allen: el actor especialista en dramas perversos ha acabado dirigiendo comedias de enredo. La culpa es de su neurosis.

¡°Cuando estoy en una cena con varias personas, no s¨¦ por qu¨¦, me siento responsable de la atm¨®sfera. Si noto que se aburren me siento autom¨¢ticamente culpable por ello. No estoy haci¨¦ndoles disfrutar y tengo que decir algo divertido o interesante. En franc¨¦s lo llamamos ¡®le trac¡¯ [el canguelo]. Y por eso hago pel¨ªculas, para que la gente se r¨ªa¡±, confiesa. Esta actitud no siempre funciona y a menudo acaba metiendo la pata o hablando de m¨¢s en reuniones sociales. Por eso cuando estren¨® Un hombre fiel en el festival de Toronto y escuch¨® las risas del p¨²blico desde la primera escena no se le subi¨® a la cabeza. Lo ¨²nico que sinti¨® fue alivio.

"Los franceses tenemos una reputaci¨®n en todo el mundo de libertinaje, de estar obsesionados con la sexualidad, el amor y el placer"

Garrel construy¨® el guion de la cinta como si se tratase de un cad¨¢ver exquisito: uno propone una frase delirante y el otro la contin¨²a como le salga. Fue su juego favorito de la infancia porque eso es a lo que juegan los ni?os cuando sus padres son un cineasta de la nouvelle vague (Philippe Garrel) y su musa (Brigitte Sy). Jean-Claude Carri¨¨re, coguionista de Bu?uel que ya tiene 87 a?os, escrib¨ªa una escena absurda y cerebral y Garrel a?ad¨ªa la siguiente, coherente y emotiva.

¡°La trama inicial se inspiraba en las obras de Merivaux: una comedia rom¨¢ntica sobre una viuda y un tipo que acaba de ser abandonado por una mujer. Pero entonces estrenaron El lado bueno de las cosas, que ten¨ªa la misma premisa, y Jean-Claude empez¨® a inventar otras historias: ?qu¨¦ tal si ese hombre vuelve con la mujer que lo abandon¨® a?os atr¨¢s, despu¨¦s de que se quede viuda y con un hijo? Ning¨²n espectador, adem¨¢s, va a esperarse que el ni?o salga con la teor¨ªa de que su madre asesin¨® a su padre¡±, explica.

Los 75 minutos (cr¨¦ditos incluidos) que dura la pel¨ªcula no responden a ning¨²n homenaje al cine cl¨¢sico sino a limitaciones presupuestarias. Escribieron el guion, ensayaron con los actores y entonces se pusieron a buscar financiaci¨®n con el proyecto completo. ¡°No quer¨ªa andar envi¨¢ndolo a las televisiones. El presupuesto que nos concedieron solo daba para cuatro semanas de rodaje y, al terminar, estaba tan orgulloso que se lo cont¨¦ a un amigo, y este me respondi¨®: ¡®Pues Luis Bu?uel hac¨ªa sus pel¨ªculas mexicanas en 18 d¨ªas¡±, recuerda.

Jean-Luc Godard dec¨ªa que los artistas deber¨ªan morir a los 35 para evitar convertirse en viejos chochos. Y Louis Garrel, que acaba de cumplirlos, est¨¢ ahora empe?ado en comprender Instagram. Quiz¨¢ por eso reincide en contradicciones, al contar ¡°una historia de adultos prematuros que fingen madurez delante de los ni?os¡±, pero luego firmarla en los cr¨¦ditos como puesta en escena en vez de realizador. Esto, asegura, no es una boutade pretenciosa en homenaje al cineasta que lo hizo de manera m¨¢s notoria (Fran?ois Truffaut), sino un gui?o a su experiencia en el teatro.

"Siempre me resulta extra?o cuando en una pel¨ªcula francesa un personaje saca un arma, porque puedes notar que el actor no sabe empu?arla"

Un hombre fiel encaja en la tradici¨®n francesa de que el motor de la trama son las emociones, y no las acciones, como en el cine americano. Los malentendidos surgen cuando los personajes sienten de una forma y act¨²an de otra, lo cual Garrel considera que despierta curiosidad en el espectador, ¡°y la curiosidad siempre es placentera¡±. Por supuesto, que no falte un m¨¦nage ¨¤ trois: la hermana del difunto (Lily-Rose Depp, hija de Johnny Depp) se acaba enamorando del personaje de Garrel.

Porque desde Jules y Jim hasta So?adores, parece que en Francia dos amantes nunca son suficiente. ¡°Es cierto que los franceses tenemos una reputaci¨®n alrededor del mundo de libertinaje, de estar obsesionados con la sexualidad, el amor y el placer¡±, reflexiona, ¡°quiz¨¢ porque nuestras obras cl¨¢sicas, desde Choderlos de Laclos hasta De Musset, hablan de la manipulaci¨®n desde los sentimientos¡±.

En este caso, las dos mujeres de la pel¨ªcula mangonean al protagonista (Abel, el mismo nombre que Garrel ten¨ªa en su debut como director, Los dos amigos, en honor a la primera v¨ªctima de la humanidad), que, ¡°como un globo empujado por el guion¡±, se deja llevar. ¡°Abel es divertido de forma pasiva, no gasta bromas, es un primo lejano de Buster Keaton: si un tipo le tiraba una botella de Cointreau a la cabeza no se enfadaba, porque gritar no iba a cambiar nada¡±.

Los aullidos que s¨ª cambiaron algo (el mundo, nada menos) fueron los de Mayo del 68, una revoluci¨®n social que basta con ponerse la filmograf¨ªa de Louis Garrel para comprender. ¡°Parece como si fuera mi especialidad, s¨ª, y no s¨¦ por qu¨¦. Supongo que Mayo del 68 sigue afectando a la gente a diferentes niveles. Para Bertolucci en So?adores era una fantas¨ªa, porque ¨¦l lo pas¨® en Roma y se preguntaba a s¨ª mismo por qu¨¦ no fue a Par¨ªs. Los amantes habituales [ambientada en las revueltas, protagonizada por ¨¦l y dirigida por su padre] era una pel¨ªcula existencial. En Mal genio [donde interpretaba a Jean-Luc Godard] era un momento de alegr¨ªa pura, de nostalgia cinematogr¨¢fica. En Los dos amigos [los tres protagonistas se disfrazaban de manifestantes del 68] quise captar una imagen artificial de Mayo del 68 porque yo solo lo conozco de los rodajes. Ah¨ª tenemos cuatro im¨¢genes del movimiento muy diferentes, y todas muy cinematogr¨¢ficas¡±, apunta.

"So?adores' aliment¨® muchas fantas¨ªas en un momento en que la gente necesitaba hablar sobre la libertad sexual. Hasta en Ir¨¢n llevaban copias de la pel¨ªcula escondidas en el abrigo y se las iban pasando unos a otros. Es una pel¨ªcula que todo el mundo quer¨ªa descubrir en secreto, a escondidas, y despu¨¦s la compart¨ªan con sus amigos"

?Ser¨¢ consciente Louis Garrel de cu¨¢ntos huevos se han echado a perder intentando cascarlos d¨¢ndoles toquecitos con una paleta con la parsimonia de su personaje en So?adores? ¡°Creo que el ¨¦xito de esa pel¨ªcula se debi¨® a la combinaci¨®n de un guionista americano contando una historia muy ¨ªntima que ¨¦l hab¨ªa vivido en Par¨ªs, rodada por un director italiano muy sensual (la comida, la lente de la c¨¢mara, la tierra, la sexualidad) y con un actor americano, una actriz francesa y yo. So?adores aliment¨® muchas fantas¨ªas en un momento en que la gente necesitaba hablar sobre la libertad sexual. Hasta en Ir¨¢n llevaban copias de la pel¨ªcula escondidas en el abrigo y se las iban pasando unos a otros. Es una pel¨ªcula que todo el mundo quer¨ªa descubrir en secreto, a escondidas, y despu¨¦s la compart¨ªan con sus amigos¡±, explica.

Tras este fen¨®meno, su destino parec¨ªa similar al de su compa?era de reparto, Eva Green. Pero Garrel se qued¨® en Francia. ¡°En Hollywood hay muchos papeles para actores hispanos porque en EE UU viven muchas personas hispanas, pero para ellos un franc¨¦s es ex¨®tico y por eso los personajes franceses nunca est¨¢n mezclados de verdad en la historia de sus pel¨ªculas¡±, se?ala.

Vamos, que a lo m¨¢ximo que pod¨ªa aspirar era a hacer de villano de James Bond por el mismo motivo por el que la desaparici¨®n fulminante de su compatriota Jean Dujardin, ganador del Oscar por The artist, fue material de humor para Seth McFarlane ya en la gala del a?o siguiente. ¡°A m¨ª siempre me resulta extra?o cuando en una pel¨ªcula francesa un personaje saca un arma, porque puedes notar que el actor no sabe empu?arla. Excepto Vincent Cassel, que est¨¢ obsesionado con las armas y cada vez que coge una resulta cre¨ªble¡±, admira.

En Toronto un espectador se le acerc¨® para preguntarle si los franceses son como en Un hombre fiel (¡°si yo trabajase para el Ministerio de Turismo le habr¨ªa dicho que s¨ª, que viniese a comprobarlo¡±, bromea). Y durante la sesi¨®n de fotos, Laetitia Casta (exmodelo, coprotagonista de la pel¨ªcula y esposa de Garrel) irrumpe en la habitaci¨®n para indicarle a su marido que baje la barbilla.

"Qu¨¦ guapo¡±, admira en castellano cuando ¨¦l sigue sus instrucciones. Por los pasillos de este mismo hotel, el Mar¨ªa Cristina de San Sebasti¨¢n, se cuchichea que Lily-Rose Depp anda flirteando con Timoth¨¦e Chalamet (quien est¨¢ presentando Beautiful boy en el festival de cine donostiarra), una relaci¨®n que se confirmar¨¢ semanas despu¨¦s. Bohemios guapos, relevo generacional y l¨ªos de faldas en hoteles de cinco estrellas: la otra comedia francesa del a?o.