El verde: la soluci¨®n olvidada para salvar el planeta

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Bosques sostenibles contra el cambio clim¨¢tico

Desde finales del siglo XX, la preocupaci¨®n por el medioambiente y los efectos del cambio clim¨¢tico a nivel global ha ido en aumento. La superpoblaci¨®n, la falta de zonas verdes, los altos niveles de contaminaci¨®n tanto atmosf¨¦rica como visual, la acumulaci¨®n de basura y aguas residuales o la congesti¨®n de tr¨¢fico son algunos de los graves problemas que padecen las ciudades contempor¨¢neas. Pero, ?cu¨¢les son las herramientas que disponemos y como se pueden arreglar los problemas a los que el mundo se enfrenta?

Pues parece ser que los ¨¢rboles son una posible soluci¨®n ya que, entre muchas otras cualidades, absorben el ruido, canalizan y escurren el agua de lluvia, y son hogar para miles de especies. Tanto es as¨ª que el aumento del 10 % de zonas verdes en una ciudad podr¨ªa compensar el aumento de temperatura provocado por el cambio clim¨¢tico. Un dato interesante y alarmante es que, seg¨²n la Sociedad Espa?ola de Ciencias Forestales, Espa?a mantiene el ritmo de desforestaci¨®n m¨¢s alto de Europa con un 2,19 % frente al 0,51 europeo.

Una de las iniciativas para poner de manifiesto el valor de los ¨¢rboles se est¨¢ llevando a cabo en la ciudad de Melbourne; se trata del proyecto llamado Urban Forest Visual realizado conjuntamente con las autoridades locales donde se puede explorar la ubicaci¨®n, g¨¦nero y el ciclo de vida de todos los ¨¢rboles de cada distrito de la ciudad. No solo eso, sino que adem¨¢s esta iniciativa sirve como herramienta interactiva y educacional, donde se anuncian tanto las actividades para plantar ¨¢rboles, as¨ª como informaci¨®n sobre cada especie, la edad, el estado de conservaci¨®n¡­ Son peque?os gestos a replicar y tener como referente, pues contribuyen gratamente a cuidar nuestro entorno.

Gracias a distintos estudios, como el Environmental Performance Index ¨Crealizado cada dos a?os por la Universidad de Yale¨C es posible establecer un ranquin de los pa¨ªses m¨¢s y menos contaminantes del planeta en funci¨®n de c¨®mo cuidan el medioambiente: la calidad de sus bosques, la biodiversidad, calidad del aire, etc.

Seg¨²n su ¨²ltimo estudio, Finlandia ocupa el primer lugar teniendo como objetivo para 2020 que un 38 % de la energ¨ªa que se consuma en el pa¨ªs provenga de energ¨ªas renovables. Islandia ocupa el segundo lugar gracias a sus pol¨ªticas medioambientales como la protecci¨®n de sus bosques as¨ª como tambi¨¦n la utilizaci¨®n de energ¨ªas renovables. Y Suecia, en tercer lugar, destaca por la implantaci¨®n de energ¨ªas renovables adem¨¢s de la conservaci¨®n de sus bosques, su buena calidad del aire y agua potable. De hecho, la ciudad sueca de Halmstad ha sido la primera en introducir los contenedores verdes dise?ados por la compa?¨ªa estadounidense Freight Farms en distintos supermercados (como el ICA Maxi) con la idea de reducir el impacto ambiental. Se trata de unos contenedores equipados y preparados para poder cosechar en cualquier parte del mundo, especialmente en pa¨ªses con climas extremos, con el fin de reducir la dependencia de los productos importados y favorecer el cultivo de hortalizas frescas todo el a?o, independientemente de las limitaciones estacionales del clima n¨®rdico.

En Espa?a, cada a?o se desperdician 7,7 millones de toneladas de alimentos

Este tipo de invenciones se entienden despu¨¦s de conocer, por ejemplo, que el 45 % de las hortalizas perecederas cultivadas en Europa se desperdician antes de llegar a nuestros hogares, seg¨²n confirma Ellen MacArthur Foundation. En Espa?a, seg¨²n un estudio publicado por la Confederaci¨®n Espa?ola de Cooperativas de Consumidores y Usuarios (HISPACOP) avalado por el Instituto Nacional del Consumo, se menciona que cada a?o se desperdician 7,7 millones de toneladas de alimentos. Es decir, el desperdicio medio por hogar (de media de 2,7 personas) es de 1,3 kg/semana o 76 kg/a?o.

Despu¨¦s de leer con preocupaci¨®n que el medioambiente ha dejado de tener una consejer¨ªa propia en Andaluc¨ªa, es evidente que queda mucho por hacer ya que los pr¨®ximos a?os son decisivos para incorporar medidas que eviten el aumento global de la temperatura. Es importante tener en cuenta que el aumento de 2 grados cent¨ªgrados para 2100 podr¨ªa cambiar radicalmente el futuro de nuestras ciudades causando da?os terribles como, por ejemplo, la desertizaci¨®n o la subida del nivel del mar, poniendo en riesgo ciudades enteras. El mundo no se solucionar¨¢ solo. Est¨¢ en nuestras manos actuar y buscar las mejores soluciones para salvar el planeta.