Desde la zona end¨¦mica: perspectivas sobre una pandemia
Una vez que despertemos de esta pesadilla al nuevo mundo, ?c¨®mo llevamos ese mismo sentido de urgencia a otras enfermedades cuya carga aplastante se encuentra en otro lugar?
A lo largo de los ¨²ltimos 30 a?os he tenido la oportunidad de contribuir a la respuesta a varias epidemias de enfermedades infecciosas como la gripe porcina (H1N1), la gripe aviar (H5N1) o el c¨®lera. Lo he hecho desde la perspectiva del gobierno, de grupos de an¨¢lisis de pol¨ªticas sanitarias, desde la academia y desde el sector privado, y he podido aprender de personas que cada a?o se preocupaban por entender si en aquella ocasi¨®n se trataba, s¨ª, de la gran pandemia, una repetici¨®n de lo que sucedi¨® con la gripe espa?ola que en 1918 devast¨® la salud y la econom¨ªa del mundo.
Esto, por supuesto, en el contexto de mi trabajo diario contra la malaria, una epidemia cr¨®nica establecida que se estima que s¨®lo en 2018 caus¨® 228 millones de casos y alrededor de 405.000 muertes. Para aquellos que ahora est¨¢n hipnotizados con los recuentos diarios de casos y muertes por la covid-19: esto es mucho. Todos los a?os. Y eso que la tasa de mortalidad ha disminuido en las ¨²ltimas dos d¨¦cadas debido al esfuerzo heroico de pa¨ªses, financiadores y todo tipo de socios con el objetivo de ofrecer herramientas eficaces para la prevenci¨®n y el tratamiento de esta enfermedad. Sin embargo, a¨²n tenemos cifras muy elevadas, y desde hace unos a?os el progreso ya se hab¨ªa estancado debido a la escasez de fondos y a otros problemas.
Ahora, todos los pa¨ªses ¡ªparticularmente los europeos y Estados Unidos, que ya no son end¨¦micos para enfermedades como la malaria o la polio¡ª estamos experimentando la angustia frente a una enfermedad infecciosa para la que hasta ahora no existe vacuna ni tratamiento reconocido, solo cuidados de apoyo. Se han implementado medidas de salud p¨²blica, algunas bastante dolorosas tanto desde la perspectiva sociol¨®gica como econ¨®mica. Y todos los interrogantes siguen abiertos: ?Qu¨¦ es una respuesta inmune efectiva? ?C¨®mo aceleramos el desarrollo de vacunas, tratamientos y pruebas diagn¨®sticas? ?Cu¨¢les son las estrategias de salud p¨²blica m¨¢s inteligentes?
Y lo que es m¨¢s importante, ?c¨®mo hacemos todo esto al mismo tiempo que lidiamos con los efectos sociales de la pandemia? Porque, por una vez y siendo realistas, la diferencia en esta ocasi¨®n es que TODOS estamos viviendo en ¨¢reas end¨¦micas. Todos enfrentamos la urgencia que los pa¨ªses end¨¦micos de malaria sufren cada a?o: ?d¨®nde est¨¢ la vacuna? ?Qu¨¦ puedo hacer por mi familia?
Con la covid-19, el mundo ha dado una respuesta sorprendente a una pandemia que hace solo seis meses no estaba en el horizonte
El D¨ªa Mundial de la Malaria deber¨ªa servir para reflexionar sobre el progreso realizado hasta la fecha y los desaf¨ªos que tenemos por delante. Con la covid-19, el mundo ha dado una respuesta sorprendente a una pandemia que hace solo seis meses no estaba en el horizonte. En este tiempo se han publicado las secuencias gen¨¦ticas del virus, se han compartido estudios cient¨ªficos pendientes de publicaci¨®n y se han puesto en marcha ensayos cl¨ªnicos globales, abiertos y colaborativos, con acciones p¨²blicas y privadas antes inimaginables. Con esto en mente, debemos pensar acerca de lo que significa actuar con un sentido de urgencia compartido: una vez que despertemos de esta pesadilla al nuevo mundo ¡ªalgo que sin duda haremos¡ª, ?c¨®mo llevamos ese mismo sentido de urgencia a otras enfermedades cuya carga aplastante se encuentra en otro lugar?
Todos somos la cara de covid-19. Todos tenemos una historia. ?C¨®mo escuchamos las vivencias personales y el dolor cuando se encuentran lejos? Y lo m¨¢s importante: ?C¨®mo tomamos medidas urgentes?
Regina Rabinovich es directora de la Iniciativa de Eliminaci¨®n de la Malaria del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal) y ExxonMobil Malaria Scholar en residencia en la Universidad de Harvard.
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