El miedo al contagio por coronavirus aumenta el inter¨¦s por los partos en casa

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C¨®mo afrontar el posparto en tiempos del coronavirus

Embarazo y parto en tiempos de la Covid-19

Cuando Micaela Apau, de 29 a?os, se qued¨® embarazada de su segundo hijo, nunca se imagin¨® que iba a tenerlo en la mitad de una pandemia. Mientras iban pasando las semanas de gestaci¨®n, lo fue planeando todo. Quer¨ªa un parto en casa, con su hermana gemela y su madre cuidando de su primer hijo, de tres a?os, para que su marido pudiera acompa?arla en el proceso. Nada de esto pudo ser as¨ª. Su hija Camila, madrugadora, decidi¨® llegar al mundo un mes antes de salir de cuentas, el 26 de abril, con toda Espa?a metida en casa. Sola, en su habitaci¨®n, Apau trat¨® de convencerse de que aquello no era posible, de que su beb¨¦ no pod¨ªa venir tan pronto y, sobre todo, de que no tendr¨ªa que afrontar su mayor miedo: acudir al hospital en mitad de una crisis sanitaria ocasionada por una enfermedad que apenas unas semanas antes estaba dejando cerca de un millar de muertos al d¨ªa en todo el pa¨ªs. El dolor de las contracciones, sin embargo, le recordaba con cada vez m¨¢s frecuencia que Camila hab¨ªa decidido nacer sin tener muy en cuenta la opini¨®n de su madre. En alg¨²n momento pens¨® en poner rumbo al hospital. Ni de eso hubo tiempo.

Camila naci¨® al segundo empuj¨®n, con todo el mundo en fuera de juego: la comadrona no pudo instalar la piscina donde deb¨ªa venir al mundo y la familia materna no hab¨ªa llegado a¨²n. Ni siquiera hab¨ªa ropa ni pa?ales para ella. Todo se complic¨® a¨²n m¨¢s al cabo de unas horas, cuando la peque?a empez¨® a respirar con dificultad. Entonces s¨ª, de inmediato, hubo que ir al hospital. Camila tuvo permaneci¨® en la UCI siete d¨ªas hasta que sus pulmones funcionaron a pleno rendimiento. "Fueron momentos muy dif¨ªciles¡±, dice Apau recordando aquella angustia.

A pesar de que los hospitales han adoptado protocolos espec¨ªficos para los partos, el miedo al contagio del coronavirus ha triplicado las peticiones de dar a luz en casa en comunidades como Catalu?a desde que comenz¨® el confinamiento, seg¨²n datos de la Asociaci¨®n Catalana de Matronas.

Eso fue lo que le ocurri¨® a Apau, a quien la pandemia vino a dar forma a una idea que ya rondaba hace tiempo su cabeza. Cuando tuvo a su primer hijo, le tuvieron que hacer una ces¨¢rea que recuerda como una experiencia verdaderamente desagradable. Ya entonces se plante¨® el parto en casa. ¡°La pandemia hizo que mi inter¨¦s por parir en casa aumentara, no quer¨ªa pisar el hospital por ning¨²n motivo¡±, cuenta Apau. Por ello, contact¨® con una asociaci¨®n que la asesor¨® en el proceso y que la iba a proporcionar el material y el personal necesario para poder dar a luz en cada. El precio de todo el servicio ronda los 2.000 euros.

La Asociaci¨®n Nacer en Casa tambi¨¦n ha visto aumentar el n¨²mero de mujeres que llaman pidiendo informaci¨®n sobre la posibilidad de parir en casa. Los partos en casa no superan el 1% de los partos en Espa?a. Imma S¨¤rries, comadrona de 51 a?os, puntualiza sin embargo que, por ahora, muchas de estas llamadas no est¨¢n cristalizando en decisiones reales de partos en el hogar. "La mayor¨ªa de la gente llama por miedo a todo esto, pero sin saber muy bien lo que significa tener un parto as¨ª".

A los 42 a?os, Helena Molina qued¨® embarazada de su primera hija. A las 10.48 del martes 5 de mayo, un mundo confinado dio la bienvenida a Noa, que pudo ir a los brazos de su madre sin necesidad de que esta se pusiera guantes ni mascarillas. Molina hab¨ªa decidido tener a su hija en la tranquilidad de su domicilio. No se lo cont¨® a nadie, ni a sus amigos m¨¢s cercanos, pues cre¨ªa que la gente no lo iba a entender. ¡°Todav¨ªa existen muchos tab¨²es con el hecho de que una mujer lo pueda hacer sola, sin drogas o m¨¦dicos ¡±, asegura Molina.

No fue f¨¢cil. Molina estuvo de parto 13 horas. ¡°En un momento me vine abajo y pens¨¦ que ¨ªbamos a tener que ir al hospital¡±, recuerda. Pero Noa naci¨® en el sof¨¢ del comedor. ¡°En ese momento te llenas de oxitocina y eso te opaca cualquier dolor¡±, cuenta Molina. ¡°Yo misma me saqu¨¦ a mi beb¨¦ con mis manos".

Una portavoz de La Asociaci¨®n Nacer en Casa, explica que, en efecto, las mujeres embarazadas han sufrido cierta sensaci¨®n de inseguridad y estr¨¦s por el hecho de asistir a hospitales y centros sanitarios por miedo al contagio. La situaci¨®n en los hospitales, se ha traducido en medidas como las altas precoces a las madres (siempre y cuando el estado de salud as¨ª lo permitiera) o la imposibilidad de que ning¨²n pariente, m¨¢s all¨¢ de los progenitores, visite al nuevo miembro de la familia. ¡°Yo no quer¨ªa entrar al hospital, parir y que me echaran¡±, dice Molina.

Todos los especialistas coinciden en que los mayores miedos de las mujeres son que su pareja no pueda acompa?arlas a la hora del parto y que las separen de los reci¨¦n nacidos. ¡°Al comienzo las medidas eran m¨¢s estrictas, pero ahora ya sabemos c¨®mo controlar mejor los riesgos¡± afirma la ginec¨®loga del Hospital Infanta Cristina, Laura Garc¨ªa, que asegura que las mam¨¢s siguen yendo a dar a luz a los hospitales como siempre.

Hay quien, con todo, sigue teniendo sus reservas, como Naiara Celades, una madre de 33 a?os que se vali¨® de plataformas como Mamifit para decidirse por el parto en el hogar: ¡°Parir en casa, para m¨ª, es la mejor decisi¨®n, porque no tienes que arriesgarte a ir a un hospital donde est¨¢s rodeada de virus y no sabes qu¨¦ est¨¢ pasando¡±.