Por favor, no te vayas

Hoy voy a hablar de los saharauis y de su regreso a la v¨ªa armada. ?Te parece un aburrimiento, te resulta cansino por lo antiguo, ya est¨¢s harto del tema? Pues, si a ti te sucede eso, imag¨ªnate a ellos. Por favor, no te vayas de este art¨ªculo: te ruego que te lo leas hasta el final. Todo comenz¨® en los a?os sesenta, cuando varias resoluciones de la ONU promovieron la descolonizaci¨®n e independencia del S¨¢hara. Pero, claro, por entonces viv¨ªamos en una dictadura, y a Franco, como buen dictador, le importaba un comino la legalidad internacional e hizo caso omiso. Arrimando el ascua a su sardina, Marruecos reclam¨® los territorios al Tribunal de Justicia de La Haya, creyendo que iba a salir vencedor. Pero, en octubre de 1975, La Haya fall¨® que ni Marruecos ni Mauritania ten¨ªan ning¨²n v¨ªnculo de soberan¨ªa con el S¨¢hara. Entonces a Hassan II se le ocurri¨® lo de la Marcha Verde y ocup¨® el S¨¢hara, y Espa?a, acobardada y ruin, firm¨® el 14 de noviembre de 1975 el Acuerdo de Madrid, que consist¨ªa en partir en dos a los saharauis y venderlos a Marruecos y Mauritania. Por cierto, ese acuerdo traidor fue declarado nulo por la ONU en 2002.

Luego vino la invasi¨®n militar marroqu¨ª a sangre y fuego, la tr¨¢gica huida de decenas de miles de saharauis a trav¨¦s del desierto, su asentamiento pasajero en tierras argelinas. Y digo pasajero porque los campamentos de refugiados de Tinduf eran provisionales. Pero ya llevan 45 a?os en la hamada argelina. Yo he estado all¨ª un par de veces: es un lugar atroz, un desierto de piedra en el que no sobreviven ni los escorpiones. ¡°Ojal¨¢ te destierren a la hamada¡±, reza una antigua maldici¨®n saharaui, porque ese lugar es el infierno. Qu¨¦ tremendo que su maldici¨®n los haya atrapado.

Pero no se rinden. En los primeros a?os de guerra, y aunque eran David contra Goliat, consiguieron que Mauritania se retirara del conflicto, que la ONU reconociera el derecho de los saharauis a la autodeterminaci¨®n e independencia y a la celebraci¨®n de un refer¨¦ndum, y que Marruecos se viera tan hostigado que en 1991 acept¨® el plan de la ONU y el refer¨¦ndum a cambio de un alto el fuego. Todo era mentira, claro est¨¢. Han pasado 29 a?os y no se ha hecho nada. A¨²n peor: como la Rep¨²blica ?rabe Saharaui Democr¨¢tica (RASD) ha sido reconocida por varias decenas de pa¨ªses (Espa?a, por supuesto, no est¨¢ entre ellos), pero no por la totalidad, los saharauis viven en un limbo legal que les impide defenderse plenamente. Por ejemplo, los 2.700 kil¨®metros de muro que Marruecos construy¨® para separar la zona ocupada de la liberada por la RASD est¨¢n sembrados de explosivos; es el campo minado m¨¢s largo del mundo y, seg¨²n el Landmine Monitor, quiz¨¢ sea el territorio habitado m¨¢s contaminado por minas antipersona del planeta. Pero no est¨¢ en el foco de zonas a limpiar por la Convenci¨®n de Ottawa, puesto que no tiene estatus de pa¨ªs independiente. Lo mismo sucede con el patrimonio cultural. Hay un yacimiento arqueol¨®gico important¨ªsimo en territorio saharaui, Erqueyez Lemgasem, con maravillosas pinturas rupestres, que est¨¢ en una situaci¨®n de vulnerabilidad extrema, porque la irregularidad de la RASD le impide inscribir el yacimiento en la lista de patrimonio mundial de la Unesco. Por eso pasan cosas tan terribles como el vandalismo de los cascos azules de la ONU, que garabatearon grafitis sobre las pinturas rupestres y arrancaron paneles (fueron denunciados en 2007 y la ONU repar¨® en lo posible los da?os).

S¨ª, estamos destruyendo y esquilmando el S¨¢hara. En 2019, la UE firm¨® un acuerdo de pesca con Marruecos que incluye los caladeros del S¨¢hara, aunque el propio Tribunal de Justicia europeo hab¨ªa dictaminado que no se pod¨ªa pescar en esa zona. Se trata, por tanto, de un acuerdo ilegal. Marruecos recibe unos 50 millones de euros al a?o y a cambio m¨¢s de un centenar de barcos europeos pueden faenar all¨ª. Y el 66% de esos barcos son espa?oles. ?Y luego criticamos que hayan vuelto a tomar las armas! Recuerda que se han pasado 29 a?os siguiendo la v¨ªa legal con todas las resoluciones a su favor sin conseguir nada. Es decir: nos hemos pasado 29 a?os ense?¨¢ndoles que en este mundo s¨®lo se presta atenci¨®n a los violentos.