La puerta a la ruta de la hero¨ªna estaba en un bar de Madrid

La puerta a la ruta de la hero¨ªna se abr¨ªa en el n¨²mero 37 de la madrile?a calle Sor ?ngela de la Cruz, en un local reformado a 700 metros del Paseo de la Castellana donde los anuncios de ¡°pizza artesanal italiana¡± compart¨ªan carta con cachimbas y cervezas. Desde este restaurante adornado con papel de flores en las paredes, con nuevos sillones y sof¨¢s de dise?o, Ag¨¢ daba las ¨®rdenes a sus subalternos. Aqu¨ª, en el 61 Lounge Bar, se reun¨ªa tambi¨¦n con sus socios. Y aqu¨ª cerraba los acuerdos para el env¨ªo de droga desde los Balcanes y Turqu¨ªa a Espa?a, seg¨²n considera probado la Audiencia Nacional, que lo ha condenado a 13 a?os de c¨¢rcel por liderar una organizaci¨®n internacional de narcotr¨¢fico. Tambi¨¦n ha impuesto a otros nueve miembros de la banda penas que oscilan entre los 5 y 12 a?os de prisi¨®n.

Los tribunales espa?oles ponen as¨ª punto y aparte a una investigaci¨®n que arranc¨® en 2017, cuando el Grupo 21 de la Brigada Central de Estupefacientes de la Polic¨ªa Nacional sospech¨® que el 61 Lounge Bar no era m¨¢s que una tapadera. Un burdo intento de pasar desapercibidos en una ciudad de m¨¢s de seis millones de habitantes (incluyendo el ¨¢rea metropolitana). ¡°Trataban de dotar de apariencia legal a su entramado para dificultar las pesquisas acerca de su actividad irregular¡±, detallan los agentes. Porque algo ol¨ªa a podrido en ese negocio de limitada clientela por el que se mov¨ªan turcos y b¨²lgaros que despu¨¦s emprend¨ªan viajes rel¨¢mpago a otros puntos del pa¨ªs ¡ªcomo a Galicia y Andaluc¨ªa¡ª para encontrarse con personajes vinculados al tr¨¢fico de estupefacientes y viejos conocidos de los investigadores.

¡°Ese establecimiento era el centro de operaciones¡±, insisten los magistrados de la Secci¨®n Segunda de la Sala de lo Penal en su sentencia, fechada el pasado 17 de enero y cuya ponencia ha corrido a cargo de Jos¨¦ Ricardo de Prada. Una afirmaci¨®n basada en las vigilancias y seguimientos de los investigadores, en las intervenciones telef¨®nicas y en el propio testimonio de seis integrantes de la organizaci¨®n (de los escalafones m¨¢s bajos), que admitieron los hechos en el juicio tras pactar con la Fiscal¨ªa. ¡°[En el 61 Lounge Bar] se desarrollaban todas las reuniones personales de miembros de la organizaci¨®n. Evit¨¢ndose as¨ª, en lo posible, los contactos telef¨®nicos¡±, prosigue el fallo de la Audiencia Nacional.

Por ello, los agentes pusieron desde un primer momento el punto de mira en el due?o del negocio, al que situaban en lo m¨¢s alto de la organizaci¨®n. Seg¨²n se desprend¨ªa de las escuchas telef¨®nicas, sus subalternos se refer¨ªan a ¨¦l como Ag¨¢, un t¨¦rmino turco utilizado para individuos con un cargo o mando de importancia. Nacido en 1963 en Trabzon, una ciudad del noreste de Turqu¨ªa junto a la costa del mar Negro, hab¨ªa montado el negocio en el madrile?o barrio de Tetu¨¢n, una zona con una numerosa poblaci¨®n extranjera. Y desde all¨ª, sin tener contacto con la mercanc¨ªa y sin tocar el m¨®vil para nada, mov¨ªa los hilos. Aunque ¨¦l neg¨® en el juicio toda actuaci¨®n delictiva y asegur¨® que el resto de sospechosos eran simples ¡°clientes que visitaban su local para hacer consumiciones¡±.

Pero nada m¨¢s lejos de la realidad. Entre ellos, por ejemplo, se encontraba su lugarteniente, condenado a 12 a?os de prisi¨®n, que se encargaba de la vigilancia del local y de la log¨ªstica, adem¨¢s de reunirse con los compradores y distribuidores de la hero¨ªna en otras ciudades. Tambi¨¦n pasaron por el 61 Lounge Bar los transportistas de la droga y los intermediarios con la organizaci¨®n proveedora de la mercanc¨ªa en el este de Europa. ¡°Todos ellos formaron una estructura criminal organizada, con vocaci¨®n de permanencia para introducir hero¨ªna desde la regi¨®n de los Balcanes y Turqu¨ªa, y su distribuci¨®n posterior por diferentes provincias espa?olas y en Portugal¡±, subrayan los magistrados de la Sala de lo Penal.

Tras m¨¢s de un a?o de vigilancia, la Polic¨ªa Nacional logr¨® acabar con la organizaci¨®n a principios de 2018. A finales de enero, los investigadores siguieron a varios de los narcos hasta Galicia, donde los pillaron con las manos en la masa. Les encontraron m¨¢s de medio centenar de paquetes de hero¨ªna escondidos en los coches en los que viajaban y en el chalet del ¨²nico espa?ol arrestado en la operaci¨®n (Miguel S.), encargado de almacenar la droga antes de moverla. Detuvieron en esa operaci¨®n a seis integrantes de la organizaci¨®n. Pero era solo el primer golpe. Apenas unos d¨ªas despu¨¦s cazaban a otros dos. Y el 27 de febrero, finalmente, ca¨ªa la c¨²pula: Ag¨¢ y su lugarteniente. En total, les intervinieron 34,4 kilos de mercanc¨ªa. Su valor en el mercado habr¨ªa superado los 9,7 millones de euros, destacan los jueces.