El rey de Marruecos expresa su deseo de abrir una nueva etapa ¡°in¨¦dita¡± en la relaci¨®n con Espa?a
Mohamed VI pone fin a la crisis diplom¨¢tica con un inesperado discurso
El rey de Marruecos, Mohamed VI, puso fin la noche de este viernes, de forma completamente inesperada, a la crisis diplom¨¢tica abierta con Espa?a a mediados de mayo ¡ªla mayor de los ¨²ltimos a?os entre ambos pa¨ªses¡ª tras la hospitalizaci¨®n en Logro?o del l¨ªder del Frente Polisario, Brahim Gali y la posterior entrada de cerca de 10.000 marroqu¨ªes en dos d¨ªas en Ceuta. Con ocasi¨®n del discurso que anualmente pronuncia por la fiesta de la Revoluci¨®n del Rey y del Pueblo, el monarca marroqu¨ª asegur¨® que quiere ¡°inaugurar una etapa in¨¦dita¡± en las relaciones entre los dos pa¨ªses, que se debe basar en ¡°la confianza, la transparencia, la consideraci¨®n mutua y el respeto a los compromisos¡±.
¡°Con sincero optimismo, expresamos el deseo de seguir trabajando con el Gobierno espa?ol y su presidente, Pedro S¨¢nchez, con el fin de inaugurar una etapa in¨¦dita en las relaciones entre nuestros dos pa¨ªses¡±, dijo el monarca, en el primer comentario p¨²blico que hace sobre la grave crisis diplom¨¢tica. En su discurso de finales de julio con el que conmemor¨® el 22? aniversario de su entronizaci¨®n, Mohamed VI no dedic¨® ni una palabra a la cuesti¨®n.
Aunque el detonante de la crisis fue la hospitalizaci¨®n del l¨ªder del Polisario en Logro?o para ser tratado de la covid, las relaciones entre los dos vecinos del Estrecho se hab¨ªan ido enfriando durante los meses anteriores. De hecho, las autoridades marroqu¨ªes reconocer¨ªan m¨¢s tarde que el problema era m¨¢s profundo y ten¨ªa que ver con la posici¨®n espa?ola con relaci¨®n al conflicto del S¨¢hara Occidental. A Rabat le frustr¨® que Espa?a y la UE no siguieran los pasos de Trump y no reconocieran la soberan¨ªa de Marruecos sobre el S¨¢hara. En respuesta a lo que Rabat defini¨® como ¡°una provocaci¨®n¡±, en alusi¨®n a la acogida de Gali, Marruecos dej¨® de controlar la frontera con Ceuta durante poco m¨¢s de un d¨ªa, lo que motiv¨® la entrada de un aluvi¨®n de unas 10.000 personas en la ciudad aut¨®noma. La escalada de la crisis situ¨® las relaciones entre ambos pa¨ªses vecinos en su peor momento desde que Marruecos ocup¨® el islote de Perejil en 2002.
¡°Responsabilidad¡±
En su discurso, el propio monarca reconoci¨® que se ha tratado de ¡°una crisis sin precedentes que ha sacudido fuertemente la confianza mutua y ha planteado varias preguntas sobre su futuro¡±. Mohamed VI asegur¨® que su Administraci¨®n ha trabajado con ¡°la mayor tranquilidad, total claridad y esp¨ªritu de responsabilidad¡± para llegar a un entendimiento con Espa?a, una tarea en la que ¨¦l se habr¨ªa implicado directamente.
El rey Felipe VI tambi¨¦n ha puesto de su parte en la reconducci¨®n del conflicto. En una carta dirigida al monarca alau¨ª y hecha p¨²blica en julio por la agencia de noticias marroqu¨ª MAP con motivo del aniversario de la llegada al trono de Mohamed VI, Felipe VI expres¨® ¡°los mejores deseos de salud y prosperidad al muy querido pueblo amigo marroqu¨ª¡± en su nombre ¡°y en nombre del Gobierno y el pueblo espa?oles¡±.
Durante las ¨²ltimas semanas se hab¨ªan percibido diversas se?ales de distensi¨®n, pero pocos esperaban una apuesta tan clara y directa de Mohamed VI por renovar el entendimiento con Espa?a. El hecho que parece haber desencallado la crisis ha sido el cese de la exministra de Exteriores espa?ola Arancha Gonz¨¢lez Laya, a la que la prensa oficialista marroqu¨ª hab¨ªa se?alado como la principal responsable del conflicto.
Fuentes marroqu¨ªes hab¨ªan valorado los gestos del Gobierno espa?ol para reconducir la crisis desde el nombramiento en julio del nuevo titular de Asuntos Exteriores, Jos¨¦ Manuel Albares.
El factor argelino
En este sentido, los medios marroqu¨ªes han destacado que el presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, definiera en una rueda de prensa la semana pasada a Marruecos como un ¡°socio estrat¨¦gico¡± de Espa?a. Adem¨¢s, Rabat hab¨ªa mostrado se?ales de distensi¨®n, como el hecho de aceptar inicialmente la devoluci¨®n de 700 menores que entraron en Ceuta en mayo.
Un hecho que puede haber estimulado adem¨¢s el giro repentino en la actitud de Rabat es el aumento de la tensi¨®n que experimentan sus relaciones con Argelia. Despu¨¦s de una reuni¨®n del Alto Consejo de Seguridad argelino el viernes, el presidente argelino, Abdelmajid Teb¨²n, dedic¨® unas duras palabras a su adversario regional: ¡°Los actos hostiles repetidos por parte de Marruecos hacia Argelia nos han llevado a reconsiderar las relaciones entre los dos pa¨ªses y a intensificar la vigilancia de la seguridad en la frontera del Oeste¡±. En concreto, Teb¨²n acus¨® a Marruecos de estar detr¨¢s de la terror¨ªfica ola de incendios que ha devastado Argelia, as¨ª como de apoyar los partidos Rachad ¡ªislamista¡ª y MAK ¡ªnacionalista amazig¡ª, que Argel considera grupos terroristas.
As¨ª las cosas, quiz¨¢s Rabat ha considerado en este momento que no pod¨ªa permitirse el lujo de mantener dos conflictos abiertos con sus dos principales vecinos.
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