El triple juicio a Villarejo marca el futuro de su presunta ¡°organizaci¨®n criminal¡±
La Audiencia Nacional acoge desde este mi¨¦rcoles la primera gran vista oral contra el comisario jubilado, para el que el fiscal pide 110 a?os de prisi¨®n. Otras 26 personas lo acompa?an en el banquillo
El caso Villarejo se adentra en un nuevo y crucial escenario. La Audiencia Nacional acoge a partir del pr¨®ximo mi¨¦rcoles el primer gran juicio contra el comisario jubilado Jos¨¦ Manuel Villarejo y sus colaboradores. Casi cuatro a?os despu¨¦s de su arresto y tras pasar m¨¢s de tres en prisi¨®n provisional, el tribunal sienta en el banquillo al antiguo agente de la Polic¨ªa Nacional, epicentro de una macrotrama de corrupci¨®n policial, empresarial y pol¨ªtica que acumula m¨¢s de un centenar de imputados. Los magistrados han decidido unir en una ¨²nica vista tres l¨ªneas de investigaci¨®n que se instruyeron de forma independiente y que el magistrado Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n envi¨® a juicio de forma separada. La sentencia no solo marcar¨¢ el futuro de la presunta organizaci¨®n criminal, sino tambi¨¦n del resto de la causa que a¨²n sigue viva.
La importancia de esta cita resulta indiscutible, seg¨²n repiten diferentes fuentes jur¨ªdicas consultadas por EL PA?S para analizar un juicio que comienza a las 10.00 de este 13 de octubre con la fase de cuestiones previas y que, seg¨²n el calendario provisional fijado por la Audiencia Nacional, se prolongar¨¢ hasta finales de enero de 2022. Por un lado, un fallo condenatorio abre la puerta al regreso de Villarejo a prisi¨®n, donde la Fiscal¨ªa quer¨ªa que permaneciera mientras sigue con las pesquisas de m¨¢s de una decena de l¨ªneas de investigaci¨®n en las que considera que a¨²n quedan pruebas por recabar.
Adem¨¢s, por otra parte, el tribunal ¡ªcompuesto por los jueces ?ngela Murillo, Carmen-Paloma Gonz¨¢lez y Ferm¨ªn Echarri¡ª carga con la responsabilidad de pronunciarse por primera vez sobre la dimensi¨®n del grupo liderado por el comisario jubilado, una ¡°organizaci¨®n criminal¡± en palabras del ministerio p¨²blico. Hasta ahora, Villarejo ha defendido que trabajaba como agente encubierto y que contaba con el benepl¨¢cito de los distintos gobiernos para urdir sus negocios a trav¨¦s de unas empresas que, seg¨²n asegura, despu¨¦s utilizaba el propio Estado para sus intereses. ¡°La verdadera funci¨®n de sus empresas era la eficaz cobertura de sus labores como servidor del Estado¡±, recalca su defensa. Por ello, c¨®mo quede plasmado o no este argumento en la sentencia repercutir¨¢ en otras l¨ªneas de investigaci¨®n que quedan por juzgar, donde algunas compa?¨ªas salpicadas arguyen que c¨®mo iban a saber que era ilegal contratar a Villarejo si las instituciones ¡°propiciaron o permitieron¡± sus negocios al hacer ¡°dejaci¨®n de sus funciones p¨²blicas de supervisi¨®n y vigilancia¡±.
El gran protagonista. Villarejo, de 70 a?os y nacido en El Carpio (C¨®rdoba), se movi¨® durante muchos a?os en las sombras. Fue un desconocido para el gran p¨²blico hasta que EL PA?S comenz¨® en 2015 a destapar sus oscuros negocios, pero sobre todo hasta que fue detenido en noviembre de 2017 en el marco de este macrosumario denominado Operaci¨®n T¨¢ndem. A ¨¦l se le atribuye el liderazgo de una organizaci¨®n criminal que, durante a?os, se enriqueci¨® espiando para particulares, empresas e incluso el Gobierno de Mariano Rajoy, aprovech¨¢ndose de su posici¨®n privilegiada de polic¨ªa y sus contactos dentro del Cuerpo. La Fiscal¨ªa le pide en este primer juicio 109 a?os y 10 meses de c¨¢rcel por toda una bater¨ªa de delitos: cohecho activo y pasivo, descubrimiento de secretos, falsedad documental, tr¨¢fico de influencias, extorsi¨®n y revelaci¨®n de secretos relacionados con la vida sexual de una de sus v¨ªctimas, entre otros.
Qu¨¦ se juzga. La Sala de lo Penal acord¨® juntar en un ¨²nico macrojuicio las tres primeras l¨ªneas de investigaci¨®n del caso Villarejo que se dieron por concluidas y que se instruyeron por separado: las bautizadas como piezas Iron, Land y Pintor. Esta decisi¨®n, que complic¨® la organizaci¨®n y celebraci¨®n de la vista, se tom¨® el pasado febrero, cuando hab¨ªa comenzado la cuenta atr¨¢s para la salida de la c¨¢rcel del comisario jubilado. El antiguo polic¨ªa cumpl¨ªa en noviembre de este 2021 los cuatro a?os que, como m¨¢ximo, se puede permanecer en prisi¨®n preventiva sin una condena en contra; y, para entonces, ya se hac¨ªa imposible que hubiera sentencia antes de que se alcanzara el plazo. Es m¨¢s, el 3 de marzo, Villarejo quedaba libre y abandonaba el centro penitenciario de Estremera (Madrid) asegurando: ¡°Eso de que voy a huir es mentira [...] Es la raz¨®n por la que me han tenido preso, para que no hablara. Conf¨ªo ahora en poder defenderme¡±.
Los acusados. 27 personas f¨ªsicas, adem¨¢s de cinco jur¨ªdicas, se sentar¨¢n en el banquillo, seg¨²n los autos de procesamiento del instructor. Los acusados se dividen en cuatro grandes grupos. El primero lo integran Villarejo y sus presuntos colaboradores: lo que incluye a familiares como su hijo (Jos¨¦ Villarejo) y su esposa (Gemma Alcal¨¢), su principal socio (el abogado Rafael Redondo) o varios polic¨ªas (el tambi¨¦n comisario Enrique Garc¨ªa Casta?o o los inspectores Antonio Bonilla y Constancio Ria?o). Los otros tres lo conforman los contratantes y cooperantes del principal sospechoso en Iron, Land y Pintor. Fuentes jur¨ªdicas detallan que la Fiscal¨ªa ha alcanzado un pacto con varios acusados.
Iron. Tras casi tres a?os de instrucci¨®n, Garc¨ªa-Castell¨®n tom¨® la decisi¨®n en mayo de 2020 de dar por concluida una primera l¨ªnea de investigaci¨®n. Fue la pieza separada n¨²mero 2, bautizada como Iron por el despacho de abogados que centra las pesquisas, Herrero & Asociados. Seg¨²n el sumario, este bufete se hizo con los servicios del comisario para espiar a otro (Balder IP Law), adonde se hab¨ªan marchado antiguos socios y empleados. La Fiscal¨ªa y el magistrado mantienen que la trama obtuvo ilegalmente ¡°datos de car¨¢cter reservado¡± que iban a servir para sustentar una futura denuncia que permitir¨ªa, gracias a los tent¨¢culos de Villarejo, desplegar una operaci¨®n policial que acabara con la detenci¨®n de los rivales de Herrero. El objetivo era que la repercusi¨®n medi¨¢tica de ¡°dicha actuaci¨®n policial y el procedimiento judicial subsiguiente¡± da?ara la reputaci¨®n de Balder, seg¨²n mantienen los investigadores, que cifran el precio del encargo en 625.000 euros ¡ª325.000 euros como coste fijo y 300.000 en concepto de prima de ¨¦xito¡ª.
Land. Esta l¨ªnea de las pesquisas (pieza separada 3, conocida como Land) impacta de lleno en la jet set espa?ola y desvela los entresijos de una guerra familiar. Adem¨¢s de Villarejo, por esta parte de la causa, se sienta en el banquillo Susana Garc¨ªa-Cereceda, hija del fallecido Luis Garc¨ªa-Cereceda, el promotor que levant¨® la urbanizaci¨®n de lujo La Finca en Pozuelo de Alarc¨®n (Madrid). Seg¨²n la instrucci¨®n, junto a dos de sus colaboradores (Francisco Pe?alver y David Fern¨¢ndez), la procesada contrat¨® a la trama de Villarejo para espiar al resto de herederos ¡ªincluidas su hermana y la viuda del empresario¡ª y obtener informaci¨®n de su vida privada que le sirviera despu¨¦s como ¡°instrumento de presi¨®n¡± a su favor en las batallas ¡°sobre el patrimonio social y familiar existentes¡±. El juez calcula que el precio pactado con el comisario ascend¨ªa a 275.000 euros, m¨¢s otros 150.000 ¡°en caso de rentabilizaci¨®n de los resultados¡±.
Pintor. Villarejo bautiz¨® este encargo como Thew-Pintor, nombre que ha heredado la pieza separada 6 abierta por la Audiencia Nacional para investigarlo. Esta l¨ªnea de las pesquisas coloca en la diana al empresario Juan Mu?oz Tamara, marido de la popular presentadora Ana Rosa Quintana. El juez instructor concluy¨® que ¨¦l y su hermano Fernando contactaron con el comisario para que obtuviera ilegalmente datos de un exsocio, al que reclamaban el pago de una deuda. La trama puso entonces un operativo que incluy¨® grabaciones con c¨¢maras ocultas y el acceso a bases de datos de car¨¢cter confidencial. El tribunal ha rechazado que Quintana declare como testigo, como hab¨ªa pedido una de las acusaciones populares.
Piezas pendientes. Esta vista oral inaugura el largo camino que le queda a Villarejo en la Audiencia Nacional. Adem¨¢s de las tres l¨ªneas de investigaci¨®n que se juzgan desde este mi¨¦rcoles, el magistrado Garc¨ªa-Castell¨®n ya ha dado por concluidas otras ocho piezas separadas, en siete de las cuales se encuentra se?alado el comisario jubilado. En total, 54 personas (49 f¨ªsicas y 5 jur¨ªdicas) han sido procesadas ya por todas estas pesquisas, que han acumulado m¨¢s de un centenar de imputados y que han hecho temblar los cimientos del establishment espa?ol.
Esas otras ocho l¨ªneas de investigaci¨®n que el instructor ha propuesto enviar a juicio versan sobre diversos temas. Desde los presuntos encargos de particulares ¡ªcomo la contrataci¨®n de Villarejo por parte del empresario Javier L¨®pez Madrid para supuestamente hostigar a la doctora Elisa Pinto¡ª y empresas (Mutua Madrile?a, Repsol y Caixabank). A la trama Kitchen, sobre la operaci¨®n gestada en el Ministerio del Interior para espiar a Luis B¨¢rcenas con el presunto objetivo de arrebatarle documentaci¨®n comprometedora para altos cargos del PP. O al caso Dina, sobre el supuesto robo de una tarjeta de m¨®vil a una antigua asesora del exvicepresidente Pablo Iglesias y cuyo contenido acab¨® publicado en varios medios de comunicaci¨®n ¡ªuna causa que se ha desdoblado y donde el juez ha llegado a se?alar al exl¨ªder de Podemos como presunto responsable de destruir esa tarjeta¡ª.
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