La inmigraci¨®n irregular, pieza clave de la negociaci¨®n sobre el S¨¢hara

Espa?a ha arrancado tres compromisos de Marruecos a cambio de su respaldo al plan para la autonom¨ªa del S¨¢hara, la v¨ªa propuesta por Rabat que no tiene en cuenta la voluntad de los saharauis. Con el acuerdo, seg¨²n el comunicado espa?ol, se garantiza que Marruecos no emprender¨¢ acciones unilaterales, como la extensi¨®n de la zona econ¨®mica exclusiva marroqu¨ª hasta aguas de Canarias, y que respetar¨¢ la integridad territorial, en clara referencia a Ceuta y Melilla. El tercero ¡ªy, quiz¨¢, m¨¢s importante¡ª es un compromiso de cooperaci¨®n en la ¡°gesti¨®n de los flujos migratorios en el Mediterr¨¢neo y el Atl¨¢ntico¡±. Una fuente de la administraci¨®n vinculada a la pol¨ªtica migratoria afirma: ¡°El control de la inmigraci¨®n ha sido clave para el cambio de la posici¨®n espa?ola¡±.

Espa?a, tal y como ha dise?ado su pol¨ªtica migratoria, depende de Marruecos para gestionar su inmigraci¨®n irregular. Las cifras de nacionalidad y pa¨ªses de salida, que el Ministerio del Interior nunca hace p¨²blicas, dejan claro el papel del vecino del Sur como pa¨ªs de origen y tr¨¢nsito de los migrantes que llegan al continente a trav¨¦s de las costas espa?olas. Este a?o, hasta el 23 de febrero, ocho de cada diez personas que desembarcaron irregularmente en Espa?a partieron de Marruecos o del S¨¢hara Occidental (controlado por los marroqu¨ªes), seg¨²n datos de la Polic¨ªa Nacional a los que ha tenido acceso EL PA?S. La proporci¨®n fue a¨²n mayor en 2018, cuando Espa?a recibi¨® el mayor n¨²mero de inmigrantes irregulares de su historia. Entonces, nueve de cada 10 salieron del pa¨ªs magreb¨ª. El porcentaje baila ligeramente en cada ejercicio, pero Rabat es, siempre, de lejos, el socio m¨¢s importante para Madrid en materia migratoria. De ¨¦l acaba dependiendo el tr¨¢nsito en el Mediterr¨¢neo, en Ceuta y Melilla y en Canarias. Sus nacionales, con la excepci¨®n de algunos a?os en los que son superados por los argelinos, son los que m¨¢s emigran irregularmente a Espa?a.

Desde 2019, Marruecos es el pa¨ªs que m¨¢s fondos espa?oles recibe para patrullar, interceptar pateras en el mar y comprar veh¨ªculos destinados al control fronterizo. En 2021 fueron para las arcas marroqu¨ªes 30 de los 43,5 millones que tambi¨¦n financian la cooperaci¨®n policial de Senegal, Mauritania o Gambia. Para Europa es igualmente estrat¨¦gico y es el segundo pa¨ªs que m¨¢s fondos recibe para el control migratorio despu¨¦s de Libia. Fueron 343 millones de euros entre 2014 y 2020. Las nuevas partidas est¨¢n a¨²n negoci¨¢ndose y Espa?a ha mediado para que Rabat salga reforzado. Las f¨®rmulas que utilizan las autoridades marroqu¨ªes para frenar a los migrantes, no obstante, han sido denunciadas por diversas ONG a lo largo de los a?os porque incluyen detenciones, redadas violentas, traslados forzosos y abandono de personas en zonas des¨¦rticas.

Pero la colaboraci¨®n que Espa?a quiere de Marruecos no se basa solo en vigilar la frontera y desincentivar las salidas. Espa?a ¡ªy la UE en su conjunto¡ª demandan que Marruecos coopere en el retorno de sus nacionales. Tambi¨¦n se aspira a cerrar acuerdos para incluir a migrantes de terceros pa¨ªses. No en vano, la UE, frustrada porque solo expulsa un tercio de los inmigrantes que se propone, est¨¢ empe?ada en que el retorno sustente buena parte del futuro plan migratorio del continente.

Hasta que sobrevino la pandemia y se cerraron fronteras, Madrid gestionaba con m¨¢s o menos fluidez una serie de cupos de devoluci¨®n con Rabat, pero desde 2020, las devoluciones se complicaron.

Tras el repunte de llegadas a las islas Canarias en 2020, por ejemplo, el Ministerio del Interior logr¨® negociar cuatro vuelos semanales, que se mantuvieron de diciembre de 2020 a abril de 2021. En ese tiempo, Espa?a solo consigui¨® devolver 1.162 marroqu¨ªes de los m¨¢s de 11.000 que hab¨ªan llegado a las islas, seg¨²n cifras de un informe reservado de la Comisi¨®n Europea. Este mismo documento, redactado tras la entrada de m¨¢s de 10.000 personas en Ceuta en mayo del a?o pasado, daba cuenta de las dificultades de otros Estados miembros con Marruecos. El informe recog¨ªa que los Pa¨ªses Bajos calificaban de ¡°muy pobre¡± la cooperaci¨®n de las autoridades marroqu¨ªes en los procesos de retorno y los obst¨¢culos de pa¨ªses como B¨¦lgica, Austria o Ruman¨ªa.

Ni siquiera ahora, que Marruecos reabri¨® su espacio a¨¦reo en febrero, Espa?a ha conseguido devolver marroqu¨ªes, seg¨²n una fuente conocedora de esos dispositivos. En realidad, Rabat no se niega, pero exige que Espa?a ¡ªy el resto de pa¨ªses¡ª garanticen que los devueltos tienen la pauta de vacunaci¨®n completa y una PCR negativa. ¡°As¨ª es imposible, lo ¨²nico que conseguiremos es que no se vacunen¡±, se quejaba una fuente policial al conocer los requisitos.