El Gobierno defiende el acuerdo con ERC como el final del ¡®proc¨¦s¡¯ pero evita explicar los detalles
S¨¢nchez dice que ¡°la igualdad entre espa?oles est¨¢ garantizada¡± pero Page y Lamb¨¢n la ven quebrada
El pacto es tan complejo y el riesgo de que salte por los aires en cualquier momento es tan alto que cada palabra est¨¢ medida. Y nadie quiere decir una que no est¨¦ pactada. Hasta el s¨¢bado, una vez concluida la votaci¨®n de las bases de ERC, el Gobierno y el PSOE han optado por renunciar a la batalla del relato pol¨ªtico. No habr¨¢ explicaciones, que se han dejado en manos de los republicanos para intentar convencer a sus bases. Pedro S¨¢nchez ha pedido a los suyos tiempo, les ha garantizado que el pacto no pondr¨¢ en riesgo la solidaridad del sistema de financiaci¨®n espa?ol y ha ordenado silencio para no entrar en un choque de interpretaciones del documento pactado que pueda derivar en un fiasco en la votaci¨®n de las bases de ERC. ¡°La igualdad de los espa?oles est¨¢ garantizada. El PSOE mantiene su compromiso con la solidaridad interterritorial, con la cohesi¨®n, con la igualdad entre espa?oles, se viva donde se viva¡±, asegur¨® el propio S¨¢nchez desde Palma de Mallorca tras su audiencia veraniega habitual con el rey, informa Luc¨ªa Boh¨®rquez.
El Gobierno se aferra al gran valor pol¨ªtico que tiene que un grupo independentista como ERC vaya a votar la investidura de un socialista como Salvador Illa, una ruptura de bloques que para La Moncloa es la prueba definitiva de que el proc¨¦s se ha acabado. ¡°Es un triunfo de la pol¨ªtica, de la negociaci¨®n, del di¨¢logo. Cuando uno echa la vista atr¨¢s, Espa?a est¨¢ mucho m¨¢s unida y es mucho m¨¢s pr¨®spera que cuando nosotros llegamos al Gobierno¡±, resumi¨® la portavoz, Pilar Alegr¨ªa, tras el Consejo de Ministros. Pero de ah¨ª no sali¨®. A pesar de que ya se conoc¨ªa el documento del pacto, no quiso entrar a ning¨²n detalle. Nadie del Gobierno ni del PSOE lo hizo en todo el d¨ªa. La Ejecutiva se limit¨® a trasladar que el acuerdo tiene el aval del PSOE, algo que tambi¨¦n estaba pactado con ERC, como todos los dem¨¢s pasos. S¨¢nchez reivindic¨® que se hab¨ªa respaldado ¡°casi por unanimidad, con una sola abstenci¨®n¡±, la del representante de Castilla-La Mancha, ?lvaro Mart¨ªnez Chana, presidente de la Diputaci¨®n de Cuenca.
Mientras, Salvador Illa, principal art¨ªfice de este pacto, hizo una ronda de llamadas a los dirigentes auton¨®micos socialistas para pedirles apoyo y calma hasta el s¨¢bado, cuando ¨¦l dar¨¢ explicaciones en un discurso en la Ejecutiva del PSC. En una nueva exhibici¨®n del control que S¨¢nchez tiene del PSOE, y pese a que en privado algunos dirigentes admit¨ªan cierto desconcierto ante un salto que casi nadie esperaba ¨Duna especie de nuevo concierto en el que Catalu?a saldr¨ªa del r¨¦gimen com¨²n, en el que est¨¢n todas las autonom¨ªas salvo el Pa¨ªs Vasco y Navarra¨D solo saltaron contra el acuerdo los que estaban previstos: Emiliano Garc¨ªa-Page y Javier Lamb¨¢n.
Fueron dur¨ªsimos, eso s¨ª. Para el presidente de Castilla-La Mancha, es ¡°un grave atentado a la igualdad¡±. ¡°El PSOE puede entregar Espa?a a cambio de la investidura de Salvador Illa. El acuerdo con ERC es una quiebra brutal de la igualdad entre todos los espa?oles¡±, remat¨® el l¨ªder de los socialistas de Arag¨®n. Tambi¨¦n salieron en tromba a criticarlo casi todos los presidentes auton¨®micos del PP. S¨¢nchez sali¨® tambi¨¦n en tromba contra ellos. ¡°Es un acuerdo muy positivo para Catalu?a y para el conjunto de Espa?a. Se abre una etapa nueva en la pol¨ªtica catalana. No voy a aceptar lecciones sobre igualdad y defensa de los servicios p¨²blicos de un partido que donde gobierna debilita el Estado del bienestar y privatiza la sanidad, la educaci¨®n, las universidades¡±, dijo en referencia a las ¨²ltimas noticias de universidades privadas autorizadas en Andaluc¨ªa y Madrid. ¡°Con este sistema de financiaci¨®n, los espa?oles han sufrido los mayores recortes al estado del bienestar a manos del PP. Y con el mismo sistema los mayores avances con el Gobierno progresista. Lo importante es contar con gobiernos que crean en la fortaleza de los servicios p¨²blicos¡±, remat¨® el presidente.
No solo hubo cr¨ªticas del PP. Incluso aliados del Gobierno como Comprom¨ªs o Chunta mostraron su inquietud, aunque Illa tiene casi cerrado un acuerdo de gobernabilidad con los Comunes, incluidos tambi¨¦n en Sumar. Pero ni el asturiano Adri¨¢n Barb¨®n ni la navarra Mar¨ªa Chivite, los otros presidentes socialistas, mostraron rechazo. Esta ¨²ltima gestiona un concierto que est¨¢ en la Constituci¨®n y el PSN siempre ha defendido, y tambi¨¦n siempre ha apoyado los gestos pol¨ªticos de S¨¢nchez con Catalu?a. Las llamadas de Illa para darles garant¨ªas, adem¨¢s, pudieron hacer su efecto.
Otros dirigentes socialistas que pueden sufrir un gran coste pol¨ªtico en sus comunidades por este acuerdo, pero est¨¢n mucho m¨¢s cercanos a la direcci¨®n, como el andaluz Juan Espadas, fueron mucho m¨¢s prudentes. ¡°No voy a permitir ni agravios ni privilegios que perjudiquen a Andaluc¨ªa¡±, dijo, informa Lourdes Lucio, pero enseguida aclar¨® que se sent¨ªa ¡°satisfecho¡± de que el acuerdo sirva para hacer presidente a Illa. Ese es el mensaje m¨¢s extendido y el que traslad¨® en privado la c¨²pula y el propio S¨¢nchez a los suyos: vale la pena este salto para lograr que un socialista presida la Generalitat, y ser¨¢ ¨¦l quien gestione todos estos pasos hacia una nueva fiscalidad en Catalu?a. Varios barones socialistas est¨¢n preocupados por la ruptura del principio de solidaridad, como plante¨® el secretario general de Extremadura, Miguel ?ngel Gallardo. En el PSOE, el l¨ªder catal¨¢n tiene una imagen muy clara de seriedad y de pedigr¨ª socialista, de alguien que no aceptar¨¢ algo que suponga romper un modelo de solidaridad entre todas las autonom¨ªas.
Una cuesti¨®n decisiva para el futuro del modelo es saber si esta nueva f¨®rmula que se est¨¢ pactando, como ha sucedido con las anteriores, ser¨¢ extensible a todas las autonom¨ªas, el llamado ¡°caf¨¦ para todos¡±. As¨ª fue cuando Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar pact¨® con Jordi Pujol ceder a Catalu?a el 30% del IRPF y cuando Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero acord¨® con Artur Mas pasar al 50%. Si se hiciera para todos, se pasar¨ªa a un modelo federal de fiscalidad muy distinto al actual. El PSOE no quiere profundizar ahora en esta cuesti¨®n, y menos antes de que voten las bases de ERC, pero es un escenario no descartable. Cuando se pact¨® la quita de la deuda del FLA a Catalu?a, en las negociaciones de la investidura de S¨¢nchez, fue muy pol¨¦mica, pero enseguida se aclar¨® que ser¨ªa extensible a todas las autonom¨ªas.
El PP salt¨® con dureza pero con una estrategia diferente a la habitual. Los populares quieren dinamitar el acuerdo, como Junts. Y la mejor manera de lograrlo es que las bases de ERC voten en contra. As¨ª que el portavoz del PP, Miguel Tellado, intent¨® atacar ese flanco: ¡°S¨¢nchez ha enga?ado a Puigdemont y pretende enga?ar a ERC con un acuerdo que es imposible de cumplir¡±. Esta es otra de las cuestiones que est¨¢ en duda: ?se aplicar¨¢ en alg¨²n momento este pacto? Sin los votos de Junts, y con la oposici¨®n segura del PP, es muy dif¨ªcil sacar adelante las reformas legales para cumplirlo.
Pero de momento el PSOE y ERC est¨¢n acordando un gran salto pol¨ªtico, al margen de su aplicaci¨®n t¨¦cnica, que llevar¨¢ meses y mucha discusi¨®n. Los socialistas aceptan por primera vez que Catalu?a salga del r¨¦gimen com¨²n, como el Pa¨ªs Vasco y Navarra, y eso es algo que genera muchas dudas en sectores importantes del PSOE. La propia ministra de Hacienda, Mar¨ªa Jes¨²s Montero, que a¨²n no ha hablado, dijo claramente que ella no estaba de acuerdo con un concierto catal¨¢n. S¨¢nchez e Illa parecen tener clar¨ªsimo que vale la pena por un objetivo pol¨ªtico m¨¢s de fondo, que es el gesto definitivo de la normalizaci¨®n pol¨ªtica en Catalu?a: los independentistas votando a favor de un presidente socialista. Como ha sucedido con todos los saltos que ha hecho S¨¢nchez en estos a?os ¡ªmesa de di¨¢logo, indultos, amnist¨ªa¡ª el primer golpe genera un gran shock y un rechazo profundo, que adem¨¢s el Gobierno casi nunca gestiona con explicaciones detalladas y concretas. Pero en La Moncloa creen que el tiempo juega a su favor, porque tienen una legislatura entera por delante y conf¨ªan en que la figura de Illa como president calmar¨¢ definitivamente las aguas. Es una apuesta a medio plazo, como siempre sucede con S¨¢nchez. Pero los c¨¢lculos de La Moncloa no siempre salen bien.
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