La fiebre del queso desborda Zamora
Una feria nacional e internacional de este producto y del sector primario atrae a la ciudad a unas 300.000 personas
Hay tantos quesos que cuesta hasta elegir: m¨¢s de 1.200 variedades en 300 expositores durante dos kil¨®metros de paseo por Zamora (66.000 habitantes). Tanta oferta abruma y no queda otra que ir picoteando de puesto en puesto en busca de las cu?as m¨¢s deseadas. Alg¨²n gorr¨®n llena el buche y no la bolsa, pero en general reina el gasto constante y se agotan las existencias. La feria del queso Fromago ha conseguido lo que para esta ciudad apenas se ve¨ªa en Semana Santa, esto es, calles llenas, hosteler¨ªa a rebosar, todas las camas de hotel ocupadas y bullicio. La organizaci¨®n prev¨¦ unos 300.000 visitantes al evento tras el ¨¦xito de 2022, cuando naci¨® sin muchas expectativas y acab¨® triunfando entre el sector primario y el p¨²blico. Todos contentos: el ganadero que produce la leche, los vendedores que los dispensan y los compradores de buen paladar.
La idea consiste en combinar algo tan zamorano como el queso y el patrimonio. Los asistentes pululan por las tiendas, con variedades nacionales e internacionales, junto a los monumentos locales y el abanderado rom¨¢nico de la ciudad de Viriato, en cuya plaza se acumulan cu?as incontables. La traves¨ªa quesera ofrece piezas de leche de oveja, de vaca, de burra, de cabra o mezcladas y en sus variedades curadas, semicuradas, frescas, a?ejas, ahumadas, con trufa, con cerveza, con miel, con todo lo que a la industria se le ocurra y sus comensales incorporen a sus cenas de picoteo o sus aperitivos ma?aneros. El festejo, bienal, transcurre entre este jueves 12 de septiembre y el domingo 15, organizado por la Diputaci¨®n y coordinado por la Fundaci¨®n de Industrias L¨¢cteas, en alianza con las autoridades locales y auton¨®micas. Tras la sorpresa de 2022, se apresuraron a reiterar su apoyo al campo, a la ganader¨ªa y a todo lo que la rodea.
El presidente de la Diputaci¨®n, Javier Fa¨²ndez (PP), celebra la afluencia: ¡°Ten¨ªamos claro que es la edici¨®n de la consolidaci¨®n, llevamos un a?o con los organizadores, somos el patrocinador principal con 550.000 euros¡±. ¡°Apostamos por este sector importante en la provincia, son muchos puestos de trabajo y se cierra el ciclo productivo desde las explotaciones¡±, conf¨ªa Fa¨²ndez, destacando el ¡°escaparate¡± que supone Fromago para Zamora. El alcalde, Francisco Guarido (IU), recuerda al impulsor de la idea, el denostado Francisco Requejo, expresidente de la Diputaci¨®n por Ciudadanos: ¡°Todo el mundo se ha olvidado de ¨¦l y nadie lo menciona, le reconozco el m¨¦rito del invento¡±. Guarido anhela ¡°mucho ¨¦xito¡± y coincide en el ¡°escaparate magn¨ªfico para los productos zamoranos, el queso y la leche son de primer¨ªsimo nivel¡±. Las previsiones, con la ciudad abarrotada como en Semana Santa, ya no le sorprende pese a que en la primera edici¨®n s¨ª se vio abrumado por el alcance.
El recorrido urbano se convierte en una tentaci¨®n para el paladar y los bolsillos. Adem¨¢s de queso hay embutido, miel, legumbres, ginebra, verm¨², vino, encurtidos, caracoles, callos, mermelada, cerveza, calzado o mantas de lana, todo artesano y todo casi tan seductor como las tartas de queso que s¨ª saben a queso de verdad. A las universitarias Andrea Prada, Clara Sard¨¢, Paula Garc¨ªa y Leticia Fern¨¢ndez, de entre 20 y 24 a?os, el postre les endulza una ruta estrat¨¦gicamente trazada: ¡°Ayer era la ronda de catar y hoy la de comprar¡±. Varias llevan bolsas, con quesos desde el de Ja¨¦n hasta el poderoso queso azul del norte. Los queseros se afanan mientras de fondo se escuchan ¨®rdenes como ¡°?Coge un cacho, Pedro, pa¡¯ m¨ª que no llego!¡±. Jos¨¦ Antonio Asensio, de la cooperativa de Villalpando (Zamora) valora el trasiego y todo lo que proyecta del sector primario: ¡°Zamora necesita estas cosas, es tierra de quesos y hay que vincularlo a los ganaderos¡±. Asensio vaticina una brecha generacional para los ganaderos, con muchos de inminente jubilaci¨®n. ¡°Hay que hacer cosas nuevas y dar expectativas a los j¨®venes, Fromago aporta optimismo¡±, reclama el comerciante. El talante de la clientela, entusiasmada, ayuda a ilusionarse. Sandra Clemente, de 33 a?os, del zamorano Codesal pero afincada en Madrid, pidi¨® dos d¨ªas de vacaciones y compr¨® el AVE en verano para asaltar Fromago con su hermana. ¡°Estoy comprando queso para Madrid y para congelar, hay alguno de untar que aguanta mucho m¨¢s¡±, celebra Clemente cargada con paquetes entre los puestos. Virginia Dos Santos y Ana Hern¨¢ndez, de la queser¨ªa Garc¨ªa Filloy, vienen de los Arribes del Duero (Salamanca) y se sorprendieron de que el jueves, previsto como d¨ªa flojo, acabaron existencias de varios productos y tuvieron que volver para reponer: ¡°El fin de semana es prometedor¡±.
Una de las opciones m¨¢s razonables para decidir qu¨¦ comprar consiste en el t¨²nel del queso, un espacio de cata por donde por seis euros se pueden elegir cinco variedades, junto a pan y uvas, para luego decidirse aqu¨ª o all¨¢. El revuelo satisface a In¨¦s Mart¨ªnez, gerente de La Calesa, un establecimiento de disfraces, art¨ªculos de Semana Santa y artesan¨ªa. ¡°En verano vienen m¨¢s a comprar y ahora a mirar, pero siempre hay gente, es bueno para todos, son todo ventajas¡±, celebra la mujer. Mismo entusiasmo en la librer¨ªa Semuret, donde Judit Pino valora la ¡°visibilidad¡± que acarrea Fromago para la ciudad. Ellas aportan ofreciendo libros de gastronom¨ªa o historia del queso: ¡°Aprovechamos para ayudar a la feria promocionando como podemos¡±. Incluso el personal de Protecci¨®n Civil da su opini¨®n sobre estilos: ¡°Es que el queso de cabra tiene mucha m¨¢s potencia que el de vaca¡±.
El zamorano Miguel Leal y la malague?a Dolores Hidalgo, ella afincada en Zamora por amor, han comprado queso franc¨¦s y de M¨¢laga, de la tierra de Hidalgo. Su marido pide foco para la ciudad: ¡°?Tienen que venir m¨¢s, que cuando se acaba el queso la ciudad se queda vac¨ªa!¡±. Faustino Iglesias pasea sus 93 a?os entre los tenderetes pero no comprar¨¢ nada, pues prefiere consumir con tranquilidad cuando pase el frenes¨ª. El hombre, l¨²cido y flem¨¢tico a los pies de una casa vac¨ªa y varios locales sin actividad, deja por un rato mal sabor de boca pese al sabor de una jornada entre quesos: ¡°Pido que esta tierra tan dormida funcione y que este rinc¨®n de Castilla la Vieja deje de ser la pobreza personificada, solo un para¨ªso para jubilados. Nuestros nietos tienen que marcharse, cuanto todo esto acabe Zamora se quedar¨¢ vac¨ªa¡±. El hombre mira en derredor y se resigna: ¡°Cambiar¨ªa alguna iglesia rom¨¢nica por alguna f¨¢brica¡±.
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