Almer¨ªa clama por sus infraestructuras

Que una piedra de grandes dimensiones caiga en una carretera de Almer¨ªa ha dejado de ser un hecho extraordinario. Ocurre con cierta frecuencia en la de El Ca?arete. Pas¨® el pasado mes de mayo y, antes, en abril, y en a?os previos. Cada vez que la lluvia eleva el tono, caen rocas. Esta primavera la situaci¨®n oblig¨® a cerrar la v¨ªa y dej¨® a la autov¨ªa como ¨²nico paso entre la capital y el poniente almeriense, epicentro de la agricultura intensiva. El problema es casi una nimiedad para los almerienses, acostumbrados a que las infraestructuras lleguen hasta su tierra m¨¢s tarde que a ninguna otra en Andaluc¨ªa. Si la autov¨ªa A-92 fue realidad una d¨¦cada m¨¢s tarde de lo anunciado y a¨²n tiene cuentas pendientes con la provincia, el tren de alta velocidad lleva 30 a?os de retraso respecto a ciudades como Sevilla o C¨®rdoba. ¡°El escenario no permite que podamos tener un desarrollo econ¨®mico pleno. Siempre estamos a la cola de la cola, gobierne quien gobierne¡±, cuenta Jos¨¦ Carlos Tejada, hist¨®rico sindicalista de Comisiones Obreras que ahora ejerce de portavoz de la Mesa del Ferrocarril de Almer¨ªa.

El pl¨¢stico domina el paisaje almeriense. Es la imagen m¨¢s llamativa al adentrarse en la provincia, que se intensifica al circular por N¨ªjar en la zona este o por la comarca del Poniente, al oeste, con ciudades como Adra (25.501 habitantes) y El Ejido (84.005 habitantes) rodeadas de invernaderos. En esta ¨²ltima zona viven unas 300.000 personas, y en la ciudad de Almer¨ªa, poco m¨¢s de 200.000, seg¨²n el Instituto Nacional de Estad¨ªstica. Pero quienes van a trabajar a diario desde la capital solo pueden usar el coche por la autov¨ªa. No hay alternativa y los colapsos, habituales. La construcci¨®n de una l¨ªnea ferroviaria fue dibujada en 2008 por la Consejer¨ªa de Obras P¨²blicas, entonces gobernada por el PSOE, que habl¨® de un tranv¨ªa el¨¦ctrico y un inicio de funcionamiento para 2013, pero nunca lleg¨®.

La Junta de Andaluc¨ªa, ya en manos del PP, impuls¨® la idea de Cercan¨ªas, colocando el coste de las obras al Estado, evitando as¨ª sufragar el posible tranv¨ªa. Ahora, una decena de alcaldes de la zona y distinto signo pol¨ªtico se han unido para insistir en su importancia. ¡°Nuestro Ayuntamiento ve con buenos ojos esa posibilidad¡±, afirman en Adra. ¡°Creemos que es esencial¡± insiste Tejada, cuya plataforma naci¨® en 2015 y cuenta con 223 socios, entre los que hay 83 municipios, adem¨¢s de instituciones, empresas, colegios profesionales o asociaciones. Como representante, los viajes de Tejada a Bruselas o la capital de Espa?a se repiten ¡°para que los pol¨ªticos pongan la lupa en Almer¨ªa¡±. ¡°Es que la situaci¨®n nos cabrea¡±, se desespera.

30 a?os esperando el AVE

Las peticiones que realiza en sus encuentros no parecen descabelladas. Viajar desde Almer¨ªa a Madrid es una odisea. La opci¨®n directa son seis horas y 11 minutos en un viejo Intercity. La otra es subir a un tren durante dos horas y media hasta Granada y, desde ah¨ª, tomar otro de tres horas y media hasta Madrid. Ruegan que el AVE llegue de una vez. El Gobierno estima que ser¨¢ una realidad entre finales de 2025 e inicios de 2026, pero en Almer¨ªa, hartos de incumplimientos, creen que lo har¨¢ como muy pronto en 2028. ¡°Siempre somos los ¨²ltimos en todo¡±, lamenta Jer¨®nimo Parra, presidente de la C¨¢mara de Comercio provincial que ha impulsado la iniciativa #ObjetivoAlmeriaAve y un comit¨¦ t¨¦cnico que visita con frecuencia las obras para ver su evoluci¨®n. ¡°Apenas hay actividad¡±, afirma. Mar¨ªa Luisa Dom¨ªnguez, presidenta del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), asegur¨® en abril que los tres tramos en obras del AVE en Almer¨ªa est¨¢n al 16% de su ejecuci¨®n. De los cinco restantes hasta Murcia, dos est¨¢n en servicio, otro con la plataforma finalizada. Solo dos m¨¢s no han empezado a construirse, seg¨²n un informe facilitado por el Ministerio de Transportes. Entre ellos, la segunda fase del soterramiento en la capital, que cortar¨¢ unos 36 meses la circulaci¨®n, por lo que los almerienses deber¨¢n desplazarse mediante transbordos hasta la estaci¨®n de Hu¨¦rcal-Viator. El coste total de las obras es de 3.300 millones, de los que hasta ahora se han invertido 1.650, seg¨²n Adif.

Los empresarios creen que la alta velocidad es b¨¢sica para los residentes y el turismo, a¨²n por explotar en la capital y, sobre todo, en Cabo de Gata. Pero apuntan a las mercanc¨ªas, aqu¨ª sin¨®nimo de hortalizas y frutas. Mil camiones al d¨ªa parten hacia distintos puntos de la geograf¨ªa espa?ola y europea, donde se exporta m¨¢s de la mitad de la producci¨®n ¡ªcasi 1,5 millones de toneladas¡ª con Alemania, Reino Unido y Francia como principales mercados. ¡°Todo debe ir por carretera, no hay otra alternativa. Y sabemos que deja una gran huella de carbono que necesitamos eliminar. El tren es la soluci¨®n. Y, adem¨¢s, mejorar¨ªa los m¨¢rgenes de beneficio para el agricultor¡±, insiste Parra, que recuerda los proyectos para crear dos puertos secos al este y oeste de la capital para el transporte intermodal. ¡°Las cifras lo justifican¡±, dice.

Almer¨ªa cuenta con m¨¢s de 32.827 hect¨¢reas de invernaderos, seg¨²n la Junta de Andaluc¨ªa. El sector movi¨® 3.500 millones de euros en su ¨²ltima campa?a ¡ªcifra que oscila seg¨²n el desarrollo de los cultivos en cada temporada¡ª y su industria auxiliar otros 2.000 millones de euros. Son los datos que maneja la Asociaci¨®n de Organizaciones de Productores de Frutas y Hortalizas de Almer¨ªa (Coexphal), que reflejan que m¨¢s de 82.000 personas trabajan en ¡°el principal motor econ¨®mico de la provincia, su locomotora¡±, como afirma Luis Miguel Fern¨¢ndez, gerente de Coexphal. Opina que el ferrocarril podr¨ªa sacar de las carreteras entre el 20% y el 30% de los camiones. El trazado para las mercanc¨ªas es el mismo del AVE e igual que el sector del m¨¢rmol espera la finalizaci¨®n de la Autov¨ªa del Almanzora para llevar su producto a Europa m¨¢s f¨¢cilmente, el agr¨ªcola espera el tren de mercanc¨ªas. ¡°Aunque tras tanto retraso igual llega antes el cami¨®n el¨¦ctrico y aut¨®nomo¡±, sentencia Fern¨¢ndez, que tira de iron¨ªa y mucha paciencia.