Boccherini, el compositor que no se olvid¨® de la guitarra
El Cuarteto Casals y el guitarrista ?lex Garrob¨¦ evocan las ra¨ªces musicales de Madrid en un concierto en el Auditorio Nacional
Le cuesta decir un no rotundo. Pero, a primer golpe de memoria, el violonchelista Arnau Tom¨¤s no recuerda apenas compositores que en el siglo XVIII escribieran para cuarteto de cuerda y guitarra. Sabe de uno: Luigi Boccherini. Este s¨¢bado 26 de junio tocar¨¢ su quinteto No. 4 en Re mayor, Fandango. Lo har¨¢ en el Auditorio Nacional junto a su grupo, el Cuarteto Casals, y al guitarrista ?lex Garrob¨¦ en uno de los conciertos que integran El Festival Internacional de Guitarra de Madrid.
No era habitual que los compositores escribieran para quinteto con guitarra, explica Tom¨¤s, pero en el caso de Boccherini puede responder a dos motivos: ¡°Por un lado, su paso tan largo por Madrid, donde la guitarra era un instrumento muy popular. Por otro, ¨¦l era violonchelista y amante del cuarteto de cuerda. Por eso se puede entender muy bien ese binomio que mont¨®¡±. A?ade Garrob¨¦: ¡°Hay d¨²os o tr¨ªos¡ Hasta el siglo XX, quintetos no hay tantos. Ojal¨¢ m¨²sicos de la talla de Haydn, por ejemplo, hubieran escrito para este instrumento. Qu¨¦ contentos estar¨ªamos los guitarristas¡±.
Para tocar esta pieza juntos, tanto el cuarteto como la guitarra han tenido que adaptarse. Los primeros han tenido que controlar su volumen. El segundo ha cedido parte de la intimidad que tiene el instrumento cuando se luce solo. ¡°El cuarteto tiene que hacer un esfuerzo en cuanto a balance porque suele tener un poco m¨¢s de decibelios, por decirlo as¨ª. Intentamos tocar m¨¢s sotto voce¡¡±, dice Tom¨¤s.
Por su parte, la guitarra es un instrumento que tiene ciertas limitaciones si se compara con otros. Pero de esos l¨ªmites hace virtud, asegura Garrob¨¦: ¡°No tiene la cantidad de octavas que tienes en un piano, ni puedes poner acordes de diez notas... Lo que s¨ª que tiene es una sensibilidad extrema. Cuando tocas con cuarteto, por una cuesti¨®n de volumen, esa intimidad del instrumento se pierde un poco. Pero hay otros recursos y esta pieza no pide esa fragilidad. Aqu¨ª pasa a ser un instrumento que acompa?a a las diferentes voces que van apareciendo. Y cuando tiene que cantar, Boccherini le deja espacio¡±. El autor pens¨® en la manera de dar un pedacito de protagonismo a cada instrumento en este Fandango que el festival describe as¨ª en su programa: bajo una forma cl¨¢sica, recrea el car¨¢cter jovial de los espa?oles que conquist¨® al compositor de origen italiano.
Haydn y Boccherini, los referentes
El concierto lo completan por separado. El Cuarteto Casals tocar¨¢ adem¨¢s una obra de Joseph Haydn. ¡°?l y Boccherini son dos referentes de la m¨²sica cl¨¢sica, pero tambi¨¦n del repertorio inicial para cuarteto de cuerda. Haydn se lleva el apodo de padre de ese conjunto¡±, a?ade Tom¨¤s. Y explica que el compositor austriaco buscaba experimentar con su forma de escribir, que le interes¨® este formato para ensayar la composici¨®n a cuatro voces. ¡°En cada cuarteto suyo hay un elemento llamativo. No ser¨ªa exagerado decir que los compositores posteriores en realidad fueron al buf¨¦ libre que dej¨® en cuanto a recursos y picotearon de ah¨ª¡±, dice el violonchelista. Boccherini, en cambio, representa una l¨ªnea m¨¢s conservadora en la escritura para este conjunto.
Garrob¨¦ intuy¨® que el Cuarteto Casals elegir¨ªa al compositor austriaco y pens¨® en obras que homogeneizaran ese programa, que no crearan saltos bruscos. Escogi¨® piezas de los compositores catalanes Fernando Sor y Joan Man¨¦n. El guitarrista resume el v¨ªnculo entre compositores con una an¨¦cdota que le ocurri¨® durante un concierto en Francia. Cuenta que toc¨® fuera de programa una pieza de Sor y, al terminar la actuaci¨®n, una se?ora se le acerc¨® para decirle que le hab¨ªa gustado mucho la pieza de Haydn que hab¨ªa tocado. ¡°Es cierto que la escritura de Sor en algunos momentos recuerda a la de Haydn. Sor tocaba en la guitarra la m¨²sica de su tiempo¡±, a?ade.
Nosotros nos despedimos el d¨ªa del confinamiento y nos reencontramos en agosto. Ese tiempo toc¨® estar en casa, estudiar cada uno por su cuenta y ya est¨¢Arnau Tom¨¤s, violonchelista del Cuarteto Casals
Tanto Garrob¨¦ como el Cuarteto Casals est¨¢n recuper¨¢ndose del par¨®n de conciertos al que les oblig¨® la pandemia. ¡°Nosotros nos despedimos el d¨ªa del confinamiento y nos reencontramos en agosto. Ese tiempo toc¨® estar en casa, estudiar cada uno por su cuenta y ya est¨¢¡±, recuerda Tom¨¤s. El conjunto, uno de los cuartetos espa?oles m¨¢s internacionales y Premio Nacional de M¨²sica en 2006, dej¨® de viajar de golpe. Les sirvi¨® para ahorrar, dice el violonchelista: ¡°Los viajes nos suponen tambi¨¦n un desgaste econ¨®mico. Hemos podido aguantar bien la patada a nivel econ¨®mico¡±. Pero es consciente de que no todos los m¨²sicos han tenido su misma suerte.
¡°Da un poco de cosa decir que no ha sido tan grave, sobre todo por todas las personas que s¨ª lo han pasado mal¡±, a?ade Garrob¨¦. Ambos empezaron a retomar los conciertos durante el verano de 2020. Les cancelaron conciertos en el extranjero, pero lo han compensado con mayor actividad nacional. ¡°En oto?o nos movimos bastante y de repente hubo una segunda ola que afect¨® mucho a Centroeuropa. Los conciertos que ten¨ªamos en Alemania, Austria, Italia, Francia¡ fueron o cancelados o pospuestos. Desde enero hasta abril de este a?o hemos tenido otro par¨®n importante. Por suerte en este periodo en Espa?a han sido m¨¢s permisivos para hacer conciertos y hemos incrementado nuestra actividad aqu¨ª¡±, relata el violonchelista.
Poco a poco recuperan el ritmo perdido y no notan al p¨²blico con miedo. ?C¨®mo les animar¨ªan a asistir al concierto del pr¨®ximo s¨¢bado? ¡°No se lo pueden perder porque evoca ra¨ªces culturales hist¨®ricas justamente de Madrid¡±, dice Tom¨¤s. Remata Garrob¨¦: ¡°Y porque nos lo vamos a pasar muy bien¡±.
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