El tribunal de la verdad, la ¨²ltima bala de las familias de los mayores que murieron en las residencias de Madrid: ¡°No se les ha escuchado¡±
Trabajadores, antiguos residentes, familiares y peritos comparecen ante un panel de siete expertos para intentar esclarecer las m¨¢s de 7.000 muertes en geri¨¢tricos madrile?os durante la crisis sanitaria
Diez y cuarto de la ma?ana. La mujer lleva el DNI en la mano, listo para ense?ar. Todo bien, es ella. Se sienta en una silla roja. La mesa y el micr¨®fono, colocado a la altura de la boca, est¨¢n delante. Y frente a ella, una segunda mesa, m¨¢s larga, donde seis personas, dos mujeres y cuatro hombres, esperan en silencio. ¡°Soy Mar¨ªa ?ngeles Maquedano, trabajadora en la residencia Parque Coimbra¡±, empieza. Tarda media hora en contarlo todo: desorganizaci¨®n, bajas, mascarillas que no llegan, ancianos contagiados compartiendo espacio con personas sanas, la orden de no enviar a nadie al hospital, llamadas desesperadas de hijos, hermanos, nietos, sobrinos.
¨D ¡°?Cu¨¢nto personal m¨¦dico quedaba?¡±¨D, pregunta una de las personas de la mesa.
¨D Hab¨ªa dos m¨¦dicos.
¨D ¡°?Aument¨® el n¨²mero de fallecidos despu¨¦s de que se iniciaran los protocolos?¡±¨D, a?ade otra.
¨D S¨ª. Murieron de una forma horrible. Lo voy a recordar hasta el d¨ªa en que me muera yo.
La escena recuerda a un interrogatorio ante el juez y ese era precisamente el objetivo: que el proceso se asemeje lo m¨¢ximo posible a una investigaci¨®n judicial, aunque no lo sea. En realidad, es un tribunal ciudadano, conformado por expertos de distintas ¨¢reas ¨Depidemi¨®logos, acad¨¦micos especializados en gesti¨®n sanitaria, soci¨®logos¨D que durante dos d¨ªas, 15 y 16 de septiembre, escuchar¨¢n a trabajadores, antiguos residentes, familiares y peritos para intentar esclarecer las m¨¢s de 7.000 muertes en geri¨¢tricos madrile?os durante la crisis sanitaria. Entonces, el Gobierno regional impuso a los hospitales unos protocolos que negaron el traslado a miles de personas mayores que viv¨ªan en alguna de las 500 residencias de Madrid y que los condenaron a morir solos en sus habitaciones.
Tambi¨¦n es la ¨²ltima bala de quienes perdieron a alguien en las residencias, despu¨¦s de incontables intentos por obtener justicia y de que jueces y fiscales hayan dado carpetazo a decenas de investigaciones. ¡°Es una comisi¨®n de la verdad, creada para determinar, a trav¨¦s de los testimonios de las v¨ªctimas, de los peritos y de la documentaci¨®n, si todo lo que sucedi¨® ha sido investigado [correctamente]. No pretendemos suplantar a nadie, pero vamos a actuar con una mec¨¢nica muy parecida a la de los tribunales¡±, explica Jos¨¦ Antonio Mart¨ªn Pall¨ªn, ex magistrado del Tribunal Supremo y encargado de presidir el panel de expertos.
A las 10 h. ha comenzado sus sesiones la #ComisionCiudadanaVerdad en las #ResidenciasDeMadrid. Ya han declarado una trabajadora y una familiar de fallecida. Parte de la Sociedad Civil pone sus conocimientos al servicio de la Verdad y la Reparaci¨®n. @manuelrico @MareaResidencia pic.twitter.com/KeteS39ByL
— Verdad y Justicia (@VyJ_7291) September 15, 2023
La iniciativa nace a petici¨®n de los familiares de los fallecidos ¨Dagrupados en las plataformas Marea de Residencia y Verdad y Justicia¨D y se ha bautizado como Comisi¨®n ciudadana por la Verdad de las residencias de Madrid. En los ¨²ltimos tres a?os, cientos de personas han recurrido a la justicia para descubrir qu¨¦ paso en los geri¨¢tricos y la mayor¨ªa est¨¢n a la espera de que prosperen sus casos o directamente han visto c¨®mo la Fiscal¨ªa los archivaba. De hecho, Amnist¨ªa Internacional expuso en un informe que la mayor¨ªa de las causas se cerraban sin una indagaci¨®n m¨ªnima y en un centenar de ellas ni siquiera se entrevist¨® a los familiares de las v¨ªctimas.
Pall¨ªn considera que ante las ¡°carencias¡± de las investigaciones judiciales, la comisi¨®n puede ayudar a dilucidar ¨D ¡°aunque las conclusiones no tienen valor legal y no son vinculantes¡±¨D si la Comunidad de Madrid, a trav¨¦s de los llamados protocolos de la verg¨¹enza, ¡°realmente ha cometido negligencias, omisiones de socorro u otros posibles delitos¡±.
La mec¨¢nica es sencilla: los testigos que han accedido a participar se sentar¨¢n, como Mar¨ªa ?ngeles, frente al tribunal, que har¨¢ las preguntas que considere necesarias. Los interrogatorios comenzaron este viernes con el relato de 15 familiares, residentes y trabajadores, y finalizan este s¨¢bado, que ser¨¢ cuando comparezcan los peritos, entre los que est¨¢n m¨¦dicos, periodistas que cubrieron el drama de las residencias o el ex consejero de Pol¨ªticas Sociales y Familias, Alberto Reyero. Una vez concluidas las dos jornadas ¨Dque se celebran en la sede de una asociaci¨®n en el barrio de Puerta del ?ngel y retransmiten por streaming¨D los expertos estudiar¨¢n todo el material, entre testimonios y documentaci¨®n, para elaborar un informe detallado que despu¨¦s entregar¨¢n a autoridades pol¨ªticas y judiciales.
¡°Hasta ahora no se ha dado una respuesta adecuada a las demandas de los familiares y de los trabajadores. Este hecho tan grave requiere una investigaci¨®n, una investigaci¨®n en profundidad. Hay personas concretas e instituciones que no ganan nada con conocer la verdad y que est¨¢n intentando obstaculizar cualquier esfuerzo para conocerla¡±, critica Mar¨ªa Victoria Zunzunegui, epidemi¨®loga de la Universidad de California especializada en tercera edad y que ha analizado a fondo lo ocurrido en las residencias madrile?as. Ahora lo har¨¢, de nuevo, como miembro del tribunal, junto a otros especialistas como Fernando Flores, director del Instituto de Derechos Humanos de la Universidad de Valencia, o Fernando Lamata, m¨¦dico y experto en gesti¨®n y administraci¨®n sanitaria que ha ocupado diversos cargos en el Ministerio de Sanidad.
Zunzunegui se?ala que el exceso de mortalidad en las residencias madrile?as ¡°es una anomal¨ªa¡± que no ha ocurrido ni se ha documentado en ning¨²n otro lugar. La epidemi¨®loga recuerda, por ejemplo, que en agosto de 2020 en Madrid ¡°se segu¨ªa aceptando que los trabajadores fueran de una residencia a otra, transmitiendo el virus, algo que ya se hab¨ªa prohibido en muchos pa¨ªses durante la primera ola¡±. ¡°La primera cuesti¨®n es la evidencia. La segunda, escuchar a las v¨ªctimas. Hasta ahora no se les ha escuchado, no se ha llamado a declarar a los familiares, no se ha llamado a declarar a los supervivientes, no se ha llamado a declarar a las trabajadoras¡±, denuncia.
Y eso es precisamente lo que hacen ante el tribunal los testigos: hablar, explicar, como ellos quieran, qu¨¦ paso a finales de marzo de 2020 en las distintas residencias en las que trabajaban o ten¨ªan familiares. Como Isabel Hern¨¢ndez Costales. ¡°Mi madre falleci¨® en la residencia Monte Hermoso. Ten¨ªa 85 a?os¡±, empieza. Este geri¨¢trico fue el primero donde se conoci¨® el fallecimiento masivo de residentes que no hab¨ªan sido derivados al hospital, antes incluso de descubrir la existencia de los protocolos.
La mujer lo cuenta as¨ª: ¡°El 20 de marzo recibo una llamada [de la doctora] entre las cuatro o cuatro y media de la tarde. Me dice que mi madre se ha puesto mala s¨²bitamente, que tiene muchas dificultades para respirar, cuando hace 24 horas estaba bien. Les digo que voy inmediatamente para trasladarla al hospital. Le dije a mi marido ¡®nos vamos y vamos a intentar sacarla de all¨ª'. Me dicen que no, que no env¨ªan ambulancias y no est¨¢n trasladando al hospital a nadie seg¨²n protocolo¡±. Diez minutos despu¨¦s, lista para salir a por su madre, recibe una segunda llamada. Hab¨ªa fallecido. ¡°La trasladaron directamente al dep¨®sito y pasamos el duelo en casa. Sin poder hacer absolutamente nada¡±.
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