Almejas taiwanesas de 'Comer, beber, amar'
Volvemos a preparar una receta de pel¨ªcula, esta vez concentrados en el despiporre culinario que ofrece la pel¨ªcula de Ang Lee. ?Qui¨¦n dijo que la cocina china era dif¨ªcil?
Como en El Comidista estamos m¨¢s condicionados que el perro de Pavlov, babeamos cual animalicos al ver comida en la pantalla grande. No s¨®lo hemos hablado de los mejores bocados de la historia del cine sino que ya hemos perpetrado recetas tan cin¨¦filas como los spaghetti de El Padrino, el estofado que se marca Yoda en El imperio contraataca, la cerveza de mantequilla que beb¨ªan Harry Potter y compa?¨ªa en Howgarts, el bocata cubano y cochinero de Chef, los tomates verdes fritos de la pel¨ªcula ¨ªdem y la m¨ªtica ratouille de Ratatouille.
Ya era hora de que rindi¨¦ramos homenaje de rodillas a uno de los largometrajes que mejor reflejan el trabajo de un cocinero y la importancia de las comidas familiares: Comer, beber, amar del director Ang Lee (Taiwan, 1994). Su t¨ªtulo original Eat, drink, man, woman (¡°comer, beber, hombre, mujer¡± en espa?ol, ¡°y¨«n sh¨ª n¨¢n n¨·¡± o ÒûʳÄÐÅ® en chino) se refiere a una cita del Libro de los ritos ¡ªuno de los textos cl¨¢sicos del confucianismo¡ª sobre los deseos naturales del ser humano. Zampar, pimplar y refocilarse, b¨¢sicamente.
El protagonista, el maestro cocinero se?or Chu, tiene tres hijas que no hacen m¨¢s que darle disgustos y a las que invita a comer todos los domingos para quitarles la tonter¨ªa de encima a base de guisos tradicionales. Lo que hacen todos los padres; aqu¨ª, en Taiw¨¢n y en la Conchinchina. Y es que uno de los m¨¦ritos de esta maravillosa pel¨ªcula fue presentar la comida oriental de un modo realista y cercano. En 1994 la cocina china en Espa?a era a¨²n ex¨®tica y misteriosa, pero no hay manera de ver la escena inicial de Comer, beber, amar sin relacionarla con tu abuela preparando afanosamente la comida del domingo.
El se?or Chu corta, despelleja, fr¨ªe y cuece con una maestr¨ªa que da gusto ver. Aunque su colecci¨®n de cuchillos (o de ranas vivas) supera ampliamente la de cualquiera de nosotros, su dedicaci¨®n silenciosa al guisoteo entronca con nuestros recuerdos culinarios, igual que el estofado en la olla o la gallina en la sopera. La pel¨ªcula es un desfile continuo de woks humeantes y t¨¦cnicas fascinantes (el cierre de unas empanadillas, el corte de un nabo) con m¨¢s de cien recetas diferentes cocinadas al momento por decenas de especialistas.
Para rodar adecuadamente c¨®mo el vapor escapa de las cazuelas se hac¨ªan m¨¢s de una docena de platos simult¨¢neamente, y los actores recibieron entrenamiento culinario para dar verosimilitud a sus movimientos (aunque la escena en la que una de las hijas de Chu hace tortitas necesit¨® de dos cocineros y tres asistentes). El resultado: un festival de cuchipandas familiares, banquetes principescos y mesas repletas.

Para rendir tributo al se?or Chu he elegido una de las recetas m¨¢s sencillas que aparecen en la peli: almejas salteadas al estilo taiwan¨¦s. Se hacen en un pisp¨¢s y est¨¢n buen¨ªsimas, tanto para comer solas de aperitivo como para acompa?arlas de arroz o noodles y convertirlas en un se?or platazo ¨²nico. Entre sus ingredientes aparece la albahaca tailandesa, que es una planta muy de dejarnos picuetos y bastante diferente de la europea, de sabor m¨¢s dulce y anisado. Si no la encontr¨¢is (como me ha pasado a m¨ª) us¨¢is de la normal y punto pelota, que queda igualmente buen¨ªsima.
Para animar el cotarro las almejas usan chiles picantes, pero dependiendo de vuestra tolerancia al picor pod¨¦is mezclarlos con pimiento rojo dulce o usar jalape?os o cayena picada. Al fin y al cabo la clave est¨¢ en disfrutar de la receta y adaptarla respetuosamente a nuestra despensa, as¨ª que no os cort¨¦is si no ten¨¦is salsa de ostras (probad con teriyaki o Worcestershire, que al fin y al cabo lleva anchoa) o vino de arroz (m¨¢s o menos sustituible por vino blanco).
Dificultad: Para los que piensan que wok es s¨®lo el nombre de una franquicia
Ingredientes
Para 4 personas
- 600 g de almejas
- 2 dientes de ajo
- un trozo de jengibre de tama?o equivalente a los ajos
- 1 chile rojo finamente picado
- un trozo de pimiento rojo (cortado de la misma forma que el chile)
- 2 cucharadas de salsa de soja
- 2 cucharadas de vino de arroz o vino blanco
- 1 cucharada de vinagre
- 1 cucharada de aceite de s¨¦samo
- 1 cucharada de salsa de ostras
- 1 cucharadita de az¨²car
- 1 pu?ado de hojas de albahaca picadas
Instrucciones
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