El secreto de Ondarreta, la firma familiar vasca liderada por mujeres que viste las oficinas de Linkedin o Herm¨¨s
La marca donostiarra, ganadora del Premio Nacional de Dise?o 2023 en la modalidad de Dise?o y Empresa, apuesta por un dise?o funcional, contempor¨¢neo y 100% enraizado en su Gipuzkoa natal
Para fabricar una silla solo hacen falta un asiento, un respaldo y cuatro patas -algunas con menos ya tienen suficiente-. Pero para crear una de las sillas de Ondarreta, la marca donostiarra que acaba de ganar el Premio Nacional de Dise?o 2023, han sido necesarias tres generaciones de una familia, un profundo esp¨ªritu vasco y una visi¨®n de dise?o funcional y contempor¨¢nea que llamara la atenci¨®n por su discreci¨®n. ¡°Do not sit please¡±, dice su lema. Cu¨¢nta intenci¨®n tras estas cuatro palabras.
Todo comenz¨® en una peque?a carpinter¨ªa en la playa de Ondarreta, en San Sebasti¨¢n. M¨¢s que un taller, lo de Juan Arratibel era una ebanister¨ªa: trabajaba a mano muebles cl¨¢sicos para la alta sociedad de principios del siglo XX. Aquel trabajo artesanal supo funcionar durante varias d¨¦cadas, hasta los a?os setenta, cuando su hijo Juanjo Arratibel y su mujer Mar¨ªa Luisa Marilis Galardi tomaron las riendas y se especializaron en cocinas. ¡°Somos hijas y nietas de ebanistas. Hacemos muebles en el mundo contempor¨¢neo, lo que nos obliga a hacer una relectura en clave de tradici¨®n e innovaci¨®n¡±, dicen hoy Nadia y Nora, las hermanas Arratibel al frente de la empresa familiar. Ellas llegaron en la d¨¦cada de 2010 en un contexto de mucha m¨¢s oferta, con clientes m¨¢s exigentes y menos fieles, y pronto pusieron en marcha una l¨ªnea de dise?o ultrasofisticada, funcional y muy contempor¨¢nea que puso su nombre en el mapa.
Su incorporaci¨®n supuso un punto de inflexi¨®n en el dise?o y la internacionalizaci¨®n. As¨ª, mientras Nora (CEO de la empresa) se dedicaba a recorrer el mundo estudiando c¨®mo comercializar su producto en distintos nuevos mercados, Nadia (arquitecta y directora de dise?o) comenz¨® a dise?ar nuevas sillas. Una de las primeras fue la llamada Don, junto con su padre. ¡°De est¨¦tica industrial, fue un modelo con el que nos adelantamos al mercado y al principio no se vend¨ªa¡±, recuerda. La paciencia fue su primer gran aprendizaje: a d¨ªa de hoy es una de las m¨¢s exitosas de la colecci¨®n de Ondarreta.
Despu¨¦s lleg¨® la familia Bob, compuesta de mesas, sillas y taburetes, de formas suaves y est¨¦tica n¨®rdica. ¡°Fue el primer dise?o propio y marc¨® un antes y un despu¨¦s¡±, recuerdan. Con un rango de precios amplio, el objetivo era tener un producto tanto para el hogar como para la instalaci¨®n. En un momento en que la industria del mueble enloquec¨ªa con el contract ¡ªel dise?o de mobiliario para oficinas, establecimientos de hosteler¨ªa o espacios profesionales¡ª, Ondarreta encontr¨® la f¨®rmula para desarrollarlo. ¡°Nos lanzamos en nuestra primera feria internacional, Maison&Objet en Par¨ªs. Creemos que parte del ¨¦xito de esta colecci¨®n fue (y es) que respond¨ªa a un concepto de cosy contract, donde el mobiliario est¨¢ preparado para resistir alta rotaci¨®n de personal en los espacios, pero no se diferencia en est¨¦tica, calidad y confort al mobiliario de espacios dom¨¦sticos¡±, explican.
Adem¨¢s de los dise?os propios, empezaron a trabajar con dise?adores de renombre como Pascual Salvador o Rafael Moneo. Una de sus l¨ªneas m¨¢s conocidas es Bai, creada con Ander Lizaso en 2017, un dise?o ligero y sin florituras que resume muy bien el tipo de mueble en el que creen las hermanas Arratibel. El suyo es una especie de ¡°dise?o silencioso¡± donde el producto no quiere destacar por encima del resto, sino que se lee en su contexto. Ellas hablan de hacer ¡°muebles con alma¡± que acompa?en a las personas y hagan de su entorno un espacio algo mejor. ¡°Hacemos mobiliario para acercar a las personas, crear v¨ªnculos y fortalecer relaciones. Queremos propiciar momentos de conexi¨®n, dar vida a espacios nuevos y enriquecer lugares viejos. Queremos que los encuentros tengan m¨¢s encanto y que las reuniones sean m¨¢s c¨®modas. Queremos ser ayuda para quienes escriben poemas, dise?an p¨®sters, env¨ªan emails, disfrutan de una cena, contemplan arte o tocan un instrumento¡±, ese es su manifiesto.
¡°Elegimos con quien trabajamos en funci¨®n de sus valores y criterio est¨¦tico, por lo que tambi¨¦n hemos hecho grandes proyectos con dise?adores de perfil m¨¢s emergente como Made Studio o Arquima?a¡±. Entre sus colaboradores est¨¢n grandes nombres del dise?o como Ben van Berkel, Sebastian Herkner o Jos¨¦ Manuel Ferrero, y proveedores como Harris Tweed, cuyo flechazo surgi¨® durante un viaje de Nadia a las islas de Lewis y Harris en Escocia: ¡°Enseguida me cautiv¨® el paisaje de mar, monta?a y naturaleza abundante. Impresiona ver c¨®mo se siguen tintando, hilando y tejiendo a mano estos materiales por los propios isle?os. Estas ic¨®nicas telas se han llevado a menudo al terreno de la moda, pero no tanto al del mobiliario y nos pareci¨® una sinergia muy interesante¡±.
Su ¨²ltimo lanzamiento se llama Supra: ¡°Una silla vers¨¢til, ergon¨®mica, apilable, competitiva y con una est¨¦tica muy diferenciadora dentro de su segmento. Su material es totalmente novedoso, se trata de un polipropileno transl¨²cido ¨²nico en el mercado¡±, explican. ¡°Este dise?o lo ha realizado Note (Design Studio), un estudio sueco con quien desde el principio tuvimos una bonita conexi¨®n¡±. De nuevo, a la tecnolog¨ªa le ganan la conexi¨®n, el alma.
Esp¨ªritu n¨®rdico, coraz¨®n vasco
Aunque sus l¨ªneas hablen de dise?os escandinavos, es evidente que Ondarreta solo podr¨ªa ser vasca. ¡°El car¨¢cter del norte es un factor indispensable a la hora de perseguir nuestros ideales en dise?o: atemporalidad, funcionalidad, armon¨ªa, sobriedad, frescura¡ valoramos los dise?os que puedan ser industrializables pero ¨²nicos¡±, cuentan estas hermanas.
Si les preguntas a las hermanas qu¨¦ silla habr¨ªan so?ado dise?ar citan la Plastic de Eames (tan moderna hace 70 a?os como hoy), la Leggera de Gio Ponti (considerada como la silla de madera por excelencia) o la Wishbone de Wegner (un icono del dise?o dan¨¦s), tres referencias que hablan de versatilidad y de una elegancia discreta: aquello de conseguir m¨¢s de lo mejor para m¨¢s gente y por menos, y con una belleza un tanto sobria que describe hoy el dise?o n¨®rdico. ¡°Un producto de Ondarreta puede vestir un apartamento, el lobby de un hotel o una oficina de coworking¡±, cuentan.
Sus diez principales proveedores est¨¢n a tan solo 30 kil¨®metros de distancia y los componentes para fabricar una silla recorren solamente 150 kil¨®metros. ¡°Quer¨ªamos apostar por la calidad y el uso de materiales de proximidad. Ser consistentes con la producci¨®n local, con la gente que se identifica con el proyecto y con el ecodise?o, coherentes y respetuosas tanto con el medio ambiente como con las familias que se implican detr¨¢s de todo el proyecto¡±, dicen refiri¨¦ndose a su equipo de 45 personas, algunas de las cuales llevan m¨¢s de 30 a?os trabajando en la empresa.
Y as¨ª, de Donosti al mundo: visten las oficinas de Linkedin en Chicago, Herm¨¨s en Par¨ªs o el Centro Bot¨ªn de Renzo Piano en Santander. Trabajan solo bajo demanda, tienen un plazo de producci¨®n de 4 o 5 semanas y venden en 40 pa¨ªses. Nadia y Nora saben que dise?ar en 2023 pasa por estudiar su huella de carbono, minimizar piezas de ensamblaje y ¡°packaging¡±, mejorar la eficiencia energ¨¦tica de sus procesos y trabajar con materiales sostenibles. Los principales son maderas europeas, acero (reciclado al 80% y reciclable al 100%), tapizados y polipropilenos (con un acabado de serr¨ªn o de 100% pl¨¢stico reciclado).
Hoy Ondarreta ya no opera desde la playa, sino a 12 km. en direcci¨®n a Francia, en una nave industrial situada en Oiartzun. Un hogar discreto que les ha permitido leer su tiempo y proyectar su nombre al futuro.
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