The Velvet Underground: el regreso del grupo que dio voz a los raros
Todd Haynes rinde homenaje a la banda estadounidense con un documental repleto de im¨¢genes in¨¦ditas, una reivindicaci¨®n que se une a un disco de versiones reci¨¦n publicado
Sobre la importancia de The Velvet Underground se ha hablado miles de veces. Son, con permiso de los Beatles, el grupo de rock moderno por antonomasia. Fundado por Lou Reed y John Cale en 1965 en Nueva York, la formaci¨®n fue inmediatamente apadrinada por el tambi¨¦n pionero Andy Warhol, con el que colaboraron hasta 1967, aunque su influencia nunca les abandonar¨ªa. Fueron un grupo de los sesenta que durante sus cinco a?os de existencia no encaj¨® en su ¨¦poca ni un solo d¨ªa. Mientras otros hablaban de amor y buenas vibraciones, ellos dise?aban una alternativa revolucionaria y perversa para el rock.
Alternativa que se mantiene vigente, medio siglo despu¨¦s de que el grupo quedara mortalmente herido tras la marcha de Reed en agosto de 1970. Para corroborarlo llega The Velvet Underground, que en octubre estrenar¨¢ Apple TV. Dirigido por Todd Haynes, repleto de im¨¢genes in¨¦ditas y declaraciones de quienes vivieron la historia en primera l¨ªnea, el documental cubre con creces la ausencia de pel¨ªculas de este tipo sobre una banda a la que podemos calificar de legendaria sin miedo a caer en el cu?adismo musical.
El documental no llega solo. A finales de septiembre se public¨® I¡¯ll be your mirror: A tribute to The Velvet Undergrund & Nico, una reconstrucci¨®n del influyente primer disco de la banda formada por Reed, Cale, Sterling Morrison y Moe Tucker. Obra p¨®stuma del productor Hal Willner, fallecido en 2020 a causa del Covid-19, cuenta con aportaciones de Thurston Moore, Sharon van Etten, Iggy Pop, Kurt Vile, Courtney Barnett o Michael Stipe, entre otros.
Refiri¨¦ndose a The Velvet Underground & Nico, publicado en 1967, Haynes declaraba hace unos meses a la revista Uncut: ¡°Es m¨²sica que te hace reflexionar acerca de lo fr¨¢gil que es la identidad, y tambi¨¦n acerca de que la vida. Si la contemplamos como una manera de ampliar nuestra expresi¨®n creativa, tambi¨¦n puede ser un reto en ese aspecto¡±. La periodista Susana Monteagudo secunda la opini¨®n de Haynes. ¡°The Velvet Underground fueron el primer grupo punk en cuanto a transgresi¨®n de c¨®digos y libertad creativa¡±, afirma la autora de libros como Historia ilustrada del rock y Amy Winehouse. Stranger than her. ¡°Adem¨¢s de practicar la filosof¨ªa del hazlo t¨² mismo y huir de los cauces comerciales de la industria musical, subvert¨ªan lo establecido visibilizando la disidencia a todos los niveles, no solo art¨ªstica. Abrazaban lo marginal y eran demasiado nihilistas, c¨ªnicos y siniestros para la ¨¦poca del flower power¡±.
The Velvet Unerground no pertenec¨ªan a su ¨¦poca, sino al futuro. Cale quer¨ªa fusionar el rock & roll con la m¨²sica experimental. Las letras de Reed se abr¨ªan a la influencia de escritores como Burroughs, Delmore Schwartz o John Rechy. Eran una banda ruidosa y chirriante, pero tambi¨¦n compon¨ªan canciones mel¨®dicas. Ese contraste est¨¢ presente, sobre todo en The Velvet Underground & Nico, que presenta algunas de las composiciones m¨¢s dulces del grupo. I¡¯ll be your mirror y Femme Fatale est¨¢n interpretadas por Nico (que tambi¨¦n hace coros en Sunday morning, compuesta inicialmente para ella pero que acab¨® cantando Reed), uno de los elementos discordantes del grupo.
Para la artista trans Roberta Marrero, la cantante y modelo alemana Nico (fallecida en Ibiza en 1988) representa ¡°un icono de belleza indiscutible, adem¨¢s de ser una pionera que abri¨® las puertas a otras grandes como Siouxsie¡±. A pesar de su belleza, Nico no respond¨ªa al modelo de chica pop imperante. Su manera de cantar era ajena al rock y reflejaba abiertamente sus ra¨ªces germ¨¢nicas y g¨®ticas. Su inescrutable personalidad iba pareja a un talento que, una vez abandon¨® a The Velvet Underground, germinar¨ªa en obras inclasificables como The marble index (1969) cuya idiosincrasia ¨Cromper con los esquemas de la m¨²sica pop y explorar latitudes art¨ªsticas reservadas a los hombres¨C inspirar¨ªa a Kate Bush y Bj?rk, as¨ª como a artistas m¨¢s contempor¨¢neas como Julia Holter, St Vincent o Anohni.
The Velvet Underground tambi¨¦n rompieron con la tradici¨®n heterosexual del rock. Para Monteagudo, adem¨¢s de crear un imaginario literario ¡°en el que cab¨ªan homosexuales, mujeres trans, prostitutas, yonkis, outsiders en general¡±, fueron tambi¨¦n ¡°una banda no compuesta exclusivamente por hombres, hombres que a su vez tampoco se identificaban con una masculinidad heteronormativa, especialmente en el caso de Lou Reed. Integraron y naturalizaron la diversidad en su propuesta porque su comportamiento estaba ligado a ese concepto. Era tambi¨¦n el debut de lo ambiguo, lo queer¡±. Marrero, por su parte, opina que ¡°trajeron a la palestra sexualidades no normativas como el sado, m¨¢s que la homosexualidad. Aunque ahora que lo pienso, la letra de I¡¯m waiting for my man podr¨ªa estar hablando de un chapero y no de un camello; en realidad, es bastante ambigua¡±.
Esa ruptura con los c¨¢nones imperantes tambi¨¦n tiene que ver con la presencia de Maureen ¡°Moe¡± Tucker. Su labor como baterista del grupo anticip¨® una tendencia que no llegar¨ªa hasta 1977, con la irrupci¨®n del punk. A partir de entonces, el papel femenino dej¨® de estar principalmente circunscrito a determinados instrumentos y roles. Monteagudo opina que Tucker es ¡°una pieza clave en esa ruptura de estereotipos y, por lo tanto, una figura a reivindicar por el feminismo. ¡°Su manera de tocar, tan poco ortodoxa como influyente, es uno de esos hitos que deben ser subrayados por el movimiento. Adem¨¢s, su imagen andr¨®gina y su discreci¨®n la convert¨ªan en el contrapunto al glamur de Nico¡±.
Venerada por grupos como The Jesus & Mary Chain, que llegaron a dedicarle una canci¨®n, y precursora, tal como apunta Marrero, de percusionistas como Hannah Billie, exGossip, Tucker es, junto a Cale, una superviviente de la formaci¨®n original del grupo. Su posicionamiento a trav¨¦s de las redes sociales con Trump y a la tenencia de armas tambi¨¦n la ha convertido en su miembro m¨¢s impopular.
La figura de Warhol result¨® determinante para que The Velvet Underground desarrollara una personalidad tan peculiar. En lo estrictamente musical, la banda proyectaba con sus instrumentos algunas de las ideas sobre repetici¨®n e improvisaci¨®n y saturaci¨®n que el artista aplicaba a sus pel¨ªculas experimentales. En lo literario, los personajes que transitaban la Factory dejaron su impronta en canciones como That¡¯s the story of my life /inspirada en Billy Name, primer responsable de la Factory), Femme fatale (inspirada en la it girl Edie Sedgwick) o Candy says, que habla sobre la actriz Candy Darling, icono para la comunidad trans.
¡°Cuando la canci¨®n apareci¨® en 1969 nada cambi¨®¡±, explica Marrero, ¡°pero me parece una maravillosa celebraci¨®n de lo trans por parte del grupo. Es una de mis canciones favoritas. Hay que leer la letra en el contexto hist¨®rico porque todo eso de ser trans y odiar tu cuerpo es un discurso bastante superado en nuestra comunidad¡±. Marrero recuerda que, a?os despu¨¦s, Reed tuvo una compa?era trans, Rachel Humphries, con la cual mantuvo ¡°una relaci¨®n sentimental absolutamente silenciada por la prensa musical hetero ciscentrista¡±.
Al iniciar su carrera en solitario volvi¨® a hablar de Candy Darling y de otras actrices trans en Walk on the wild side, canci¨®n incluida en el exitoso Transformer (1972), el ¨¢lbum con el cual muchas de las propuestas art¨ªsticas de The Velvet Underdroung llegaron, al fin, al gran p¨²blico. Para entonces Bowie, Patti Smith, Suicide, Modern Lovers y New York Dolls ya ya estaban preparados para hacerle justicia a su legado.
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