¡°No fue un rodaje, sino una fiesta¡±: la pel¨ªcula almeriense que cambi¨® las vidas de Courtney Love, Elvis Costello y The Pogues

Se han rodado cientos de pel¨ªculas en Almer¨ªa, pero ninguna como Straight To Hell. En el verano de 1986, all¨ª confluyeron Joe Strummer ¨Dreci¨¦n disueltos The Clash¨D, el grupo irland¨¦s The Pogues, una entonces desconocida Courtney Love, Elvis Costello, Grace Jones, Dennis Hopper y Jim Jarmusch. La pel¨ªcula, un spaghetti western alocado y delirante, fue un fracaso estrepitoso de cr¨ªtica y p¨²blico del que se supon¨ªa que nadie se iba a acordar, pero la experiencia de aquellos d¨ªas en el desierto andaluz cambi¨® la vida de sus protagonistas.

Todo surgi¨® de modo casi improvisado. Costello, Strummer y The Pogues acaban de participar en Londres en un concierto ben¨¦fico en solidaridad con el Frente Sandinista nicarag¨¹ense, y de ah¨ª surgi¨® la idea de emprender una gira por Nicaragua que ser¨ªa filmada por Alex Cox. Este era una de las grandes promesas del cine brit¨¢nico tras firmar las pel¨ªculas de culto Repo Man (1984) y Sid & Nancy (1986), pero nadie quiso mojarse financiando aquel proyecto chiflado. Como ya hab¨ªan pedido a los m¨²sicos que bloquearan aquellas fechas, el productor de Sid & Nancy, Eric Fellner, propuso que, en su lugar, rodasen todos ellos una pel¨ªcula de ficci¨®n. Fue idea de Cox y Strummer, durante una borrachera en el Festival de Cannes, la de ir a Almer¨ªa y hacer un homenaje personal a los spaghetti westerns. El cineasta escribi¨® el gui¨®n en tres d¨ªas junto al actor Dick Rude y rodaron la pel¨ªcula en cuatro semanas regadas en alcohol y surrealismo del que ha quedado un testimonio mucho m¨¢s popular que el filme: Fiesta, la canci¨®n m¨¢s exitosa en la carrera de The Pogues, naci¨® all¨ª.

¡°En verdad aquello no era un rodaje, vinieron a hacerse una fiesta¡±, recuerda Jose Ceba Escobar, un funcionario del Ayuntamiento de Almer¨ªa que, en aquel entonces, era un joven de 18 a?os al que reclutaron en el rodaje para hacer de ch¨®fer y chico de los recados. ¡°Joe Strummer y los Pogues se iban por ah¨ª a tomar cervezas y yo era el que los llevaba. Los irlandeses eran los m¨¢s fiesteros, eran realmente muy simp¨¢ticos. Al cantante [Shane MacGowan], lo ve¨ªa con esas orejas y esos dientes y yo pensaba: ¡®?Qu¨¦ feo es el cabr¨®n!¡¯, y encima iban casi vestidos iguales, con unas gabardinas largas de vaqueros, muy de los a?os ochenta. Yo los ve¨ªa con las argollas aquellas en la oreja que era algo que no hab¨ªa visto nunca, ?solo en las pel¨ªculas de piratas! Ten en cuenta que est¨¢bamos a¨²n en la Espa?a del blanco y negro¡±, apunta el que fuera testigo y c¨®mplice de juergas de unos personajes a los que ¨¦l desconoc¨ªa por completo. ¡°Se quedaban en el Gran Hotel Almer¨ªa, y justo enfrente estaba la feria. Una noche me dijeron: ¡®Oye, ?aqu¨ª para tomar algo?¡¯, y les respond¨ª: ¡®No os preocup¨¦is¡±' Me fui a la primera caseta y nos metimos all¨ª como 40 o 50 personas, ?beb¨ªan una cosa mala esta gente!¡±.

En la pel¨ªcula, los Pogues interpretaban a los hermanos McMahon ¨Dhomenaje soterrado a ellos mismos, ya que el nombre de la banda estaba tomado de ¡°pogue mahone¡± (¡°b¨¦same el culo¡± en ga¨¦lico coloquial)¨D, un grupo de forajidos adictos al caf¨¦. Seg¨²n Alex Cox, aunque se haya quedado la sensaci¨®n de que ver la pel¨ªcula era como asistir a una fiesta que se ha montado el equipo y al que el espectador no ha sido invitado, en realidad el rodaje fue un trabajo duro, especialmente el conseguir levantar de la cama cada d¨ªa a las seis a los actores para ponerlos a rodar. El problema no era tanto por la farra como por el soniquete continuo de dos puestos de la feria que les imped¨ªa dormir. Uno era el de las entonces popular¨ªsimas mu?ecas chochonas y el otro era el de un carrito de hamburguesas, que se acab¨® convirtiendo en la archiconocida melod¨ªa de Fiesta. ¡°Estas dos canciones se alternaban en nuestras cabezas como una pesadilla horrible e infernal. Tras grabar la canci¨®n, encima tuvimos que pagar los derechos de la melod¨ªa principal, porque resulta que era una polka de Liechtenstein¡±, declarar¨ªa en su momento Phil Chevron, guitarra de The Pogues.

En la letra, cantada en un spanglish macarr¨®nico, hay multitud de gui?os a aquel rodaje, un homenaje desternillante a Federico Garc¨ªa Lorca y una pulla a la exbajista de la banda, Cait O¡¯ Riordan, que en aquellos d¨ªas estaba dejando el grupo y se acababa de casar con Elvis Costello, a quien los Pogues odiaban como si fuese su Yoko Ono particular. Fiesta ser¨ªa el segundo single de If I Should Fall From Grace With God, el ¨¢lbum que en 1988 dio la fama mundial a Shane MacGowan y compa?¨ªa.

¡°El Costello me dec¨ªan que era muy famoso. Este era m¨¢s serio, iba vestido normal y no era rarillo como los otros¡±, rememora Jose Ceba, que fue con Strummer con quien hizo mejores migas. El vocalista brit¨¢nico acababa de disolver a The Clash y se encontraba en una encrucijada personal. Lleg¨® a Espa?a pr¨¢cticamente como un expatriado buscando el anonimato ante el revuelo medi¨¢tico que su decisi¨®n hab¨ªa causado. Por aquellos tiempos, vivi¨® algunas temporadas entre Madrid y Granada ¨Ddonde conoci¨® y produjo el ¨¢lbum Mas de cien lobos, de unos j¨®venes 091¨D y, tras el rodaje de Straight To Hell, decidi¨® establecer su residencia en San Jos¨¦, en la provincia almeriense.

¡°Por las ma?anas, cuando nos ¨ªbamos en la furgoneta desde el hotel Torreluz, que era donde ¨¦l se quedaba, el director de fotograf¨ªa, Tom Richmond, nos pon¨ªa una cinta de color rojo de The Clash y el Joe Strummer iba cantando detr¨¢s. El c¨¢mara me dec¨ªa: ¡®Mira, este es el cantante¡¯, y yo pensaba: ¡®?Pero si este ni canta ni n¨¢, si este es el que va de pistolero todo el d¨ªa!¡¯, rememora Ceba. ¡°El Joe Strummer era un n¨²mero, porque yo creo que llegaba al hotel y no se cambiaba. ?l me dec¨ªa: ¡®?Pepe! ?Cerveza!¡¯, y yo le llevaba a un bar que estaba a la vuelta de la esquina, el Lisboa, que era famoso en Almer¨ªa en aquella ¨¦poca. Y ¨¦l iba vestido de vaquero, con las pistolas, y se sentaba en la terraza as¨ª hasta las 12 o la una. Recuerdo una vez que estaba ah¨ª mirando unas fotos, me las ense?¨® y me dijo: ¡®Mira, esta es mi mujer y esta es mi casa en Inglaterra¡¯. Era la foto de un castillo, y yo le dec¨ªa: ¡®?T¨² qu¨¦ vas a tener un castillo!¡¯. Era una buen¨ªsima persona y se ve que era muy sentimental. Al final este hombre se qued¨® aqu¨ª porque le gust¨® el clima y la tranquilidad, nadie lo conoc¨ªa, cuando en Inglaterra no pod¨ªa ni andar por la calle¡±.

Eso sucedi¨® con todo el equipo. ¡°Nadie en absoluto los conoc¨ªa, pero tampoco los miraban como extra?os, porque ten en cuenta que aqu¨ª se han rodado m¨¢s de 800 pel¨ªculas. John Lennon tambi¨¦n se qued¨® aqu¨ª porque nadie le dec¨ªa nada (estuvo en Almer¨ªa durante varias semanas de 1966, rodando la pel¨ªcula How I Won The War con el director Richard Lester) ?Y estamos hablando de John Lennon, as¨ª que imag¨ªnate esta gente!¡±

Pero la m¨¢s sorprendente es la presencia de una entonces desconocida Courtney Love. ¡°Yo le dec¨ªa a mi amigo el c¨¢mara: ¡®?Esta t¨ªa est¨¢ perd¨ªa!¡¯. Se iba, no hablaba con nadie, siempre estaba sola, y yo pensaba: ¡®?Qu¨¦ rara es la t¨ªa esta!¡¯. Era la ¨²nica que desentonaba en toda aquella historia¡±, asegura Ceba. Love, quien entonces ten¨ªa 22 a?os, a¨²n no hab¨ªa formado el grupo Hole e intentaba iniciarse en el mundo de la interpretaci¨®n. Alex Cox hab¨ªa llegado a considerarla para interpretar a Nancy Spungen en Sid & Nancy, pero la descart¨® por su diferencia de edad con el actor protagonista, Gary Oldman y, a cambio, le dio un papel secundario. El de Straight To Hell fue su primer personaje protagonista. ¡°Desde el principio pens¨¦ que ella era maravillosa y que deber¨ªa ser la actriz principal porque era muy carism¨¢tica, determinada, divertida y con una imagen interesante. Yo era un gran fan de Courtney y no creo que nadie m¨¢s lo fuera en aquella ¨¦poca¡±, declar¨® el director en una entrevista de 2011. ¡°Tambi¨¦n hay una leyenda urbana, la de un diario perdido que se encontr¨® un joven almeriense en el que hab¨ªa pruebas que pod¨ªan indicar que era suyo. En sus p¨¢ginas se intuye a una chica joven, insegura, fr¨¢gil y d¨¦bil, con un car¨¢cter complejo y turbulento. Cuentan que su albacea no ha querido sacar partido de esto y que mantiene confiscado el documento, como an¨¦cdota de un siglo ya pasado¡±, apunta Javier Navarrete, trabajador del cine en activo y estudioso de la pel¨ªcula y de la mitolog¨ªa de la ¨¦poca. De hecho, ¨¦l fue uno de los guionistas del documental Quiero tener una ferreter¨ªa en Andaluc¨ªa (Carles Prats, 2011), dedicado a la estancia de Strummer en Almer¨ªa y Granada.

Volvemos con los recuerdos de Ceba. ¡°Despu¨¦s del rodaje me fui con el Dennis Hopper en su moto. Yo le dec¨ªa: ¡®?Que t¨² est¨¢s muy loco!¡¯, y ¨¦l me dec¨ªa: ¡®?Pepe, t¨² conmigo!¡¯. Nos fuimos a comer a Las Negras, a una famosa terraza que hay all¨ª de una guiri, en una BMW de los a?os setenta. Me enter¨¦ despu¨¦s de que era el tipo aquel de Easy Rider y pens¨¦: ¡®?Con raz¨®n le gustaban las motos a este!¡¯. Era un hombre ya mayor, pero lo recuerdo siempre con la moto arriba y abajo, levantando unas polvaredas¡­¡±. El actor lleg¨® a Almer¨ªa despu¨¦s de rodar Terciopelo azul, de David Lynch, probablemente el papel m¨¢s decisivo y recordado de su larga trayectoria, pero en Straight To Hell hizo un simple cameo, al igual que Grace Jones, por entonces una diva en la cima de su carrera, que solo estuvo un d¨ªa en el rodaje. Nuestro interlocutor fue el encargado de ir a buscarla al aeropuerto en un jeep descapotable. ¡°?Madre m¨ªa, la Grace Jones!, Solo ten¨ªa una escena en la que dec¨ªa ¡®No fumo¡¯, y se qued¨® dos veces con la mente en blanco y se pegaba unas panzadas de re¨ªr¡­ Es que ten¨ªa un pavo que no veas. Estaba en una burbuja. Era estirada de m¨¢s, intratable¡±, asegura Ceba.

En los cr¨¦ditos del filme tambi¨¦n se encuentra Jim Jarmusch. En el momento en que lleg¨® a Almer¨ªa estaba a punto de estrenar su tercer largo, Bajo el peso de la ley, con el que se propulsar¨ªa como uno de los cineastas independientes m¨¢s prestigiosos de su tiempo. En Straight To Hell ejerci¨® como actor con un papel breve que estaba pensado para Iggy Pop, aunque este se retir¨® en el ¨²ltimo momento por una s¨²bita crisis de confianza. La presencia de Jarmusch fue bastante m¨¢s que anecd¨®tica: tres a?os despu¨¦s, Joe Strummer protagonizaba su filme Mistery Train y, en 2008, regresaba a Almer¨ªa para rodar Los l¨ªmites del control e introduc¨ªa un velado homenaje a su experiencia de 1986, seg¨²n apunta Javier Navarrete: ¡±La vida no vale nada¡¯ es una frase que podr¨¢s ver pintada en la camioneta de la pel¨ªcula con la que Joe Strummer apareci¨® sin matr¨ªcula, y en el m¨ªtico Pez Rojo de San Jos¨¦, una discoteca donde pod¨ªas encontrar lo m¨¢s granado de la Movida en mitad del desierto. Jim Jarmusch la utiliz¨® de la misma manera en Los l¨ªmites del control¡±.

La pel¨ªcula, que se estren¨® en Espa?a el 23 de mayo de 1988 con el t¨ªtulo de Directos al infierno, fue vapuleada por la cr¨ªtica. En el agregador Rotten Tomatoes, tiene un 30 sobre 100. Las razones: era un divertimento sin orden ni concierto, incoherente y tedioso. Pero el cineasta siempre la defendi¨®. ¡°Estaba basada sobre todo en la pel¨ªcula italiana Django, Kill!! (If You Live Shoot!). En aquel momento, los spaghetti westerns no eran algo tan cool como ahora. Yo creo que es un filme extraordinario, que se adelant¨® a su tiempo, y ciertamente la gente no lo pill¨®¡±, declaraba el director en 2011, cuando decidi¨® reeditar la pel¨ªcula con un metraje ampliado, dice ¨¦l que animado por el Apocalypse Now Redux de Francis Ford Coppola.

Sin duda, a Alex Cox no le falta ego, pero tampoco le faltaba algo de raz¨®n. Quentin Tarantino, sin ir m¨¢s lejos, sigui¨® las mismas huellas en Django desencadenado. Es f¨¢cil percibir c¨®mo el personaje de Samuel L. Jackson en esa pel¨ªcula es un homenaje al interpretado por Sy Richardson en Straight To Hell.

Precisamente esa versi¨®n remozada fue estrenada en primicia en una de sus localizaciones, el mini Hollywood del desierto de Tabernas, en un acto organizado por Javier Navarrete, lo que tambi¨¦n demuestra la revalorizaci¨®n que la cinta ha tenido con el tiempo. ¡°Straight To Hell es pel¨ªcula de culto, de serie B y medio, que va m¨¢s all¨¢ de los est¨¢ndares habituales de cualquier ¨¦poca. Pero sobre todo contiene un supergrupo, un dream team, un recopilatorio ¨²nico e irrepetible de artistas de la contracultura de aquella ¨¦poca, que se aunaron en un proyecto y que dejaron muchas an¨¦cdotas e interesantes historias paralelas al propio rodaje¡±, asevera este fact¨®tum del cine. Seguro que, en alg¨²n momento, todos los que estuvieron all¨ª presentes pensaron en una de las l¨ªneas inmortalizadas por The Pogues en Fiesta: ¡°Come all you rambling boys of pleasure/ And ladies of easy leisure/ We must say ¡®Adi¨®s!¡¯ until we see/ Almer¨ªa once again¡±. O sea: ¡±Vengan todos los chicos diletantes del placer y todas las damas divertidas. Debemos decir ¡®?Adi¨®s¡¯, hasta que volvamos a Almer¨ªa!¡±.

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