Samar Badawi, la activista saud¨ª que plant¨® cara a la tutela masculina
La feminista sali¨® de la c¨¢rcel en junio tras cumplir una pena de tres a?os. Su hermano, el bloguero Raef Badawi, est¨¢ condenado a 10 a?os por ¡°insultar al islam¡±
La feminista y activista saud¨ª Samar Badawi (Yeda, 40 a?os) sali¨® de la c¨¢rcel el pasado mes de junio despu¨¦s de cumplir una pena de tres a?os, seg¨²n confirm¨® a EL PA?S un miembro de su familia. Las autoridades de Arabia Saud¨ª mantienen silencio al respecto, al igual que nunca explicaron por qu¨¦ la condenaron. Badawi fue una de la docena de mujeres detenidas entre mayo y julio de 2018 bajo cuestionadas acusaciones de atentar contra la seguridad nacional. Ella y Nassima al Sada han sido las ¨²ltimas excarceladas.
Al igual que el resto, Badawi hab¨ªa criticado el sistema de tutela masculina y la prohibici¨®n de conducir. Pero su activismo arrancaba de una dura experiencia personal. Ella misma fue v¨ªctima de la tutela que la ataba a un padre maltratador y que se negaba a darle permiso para casarse. Tuvo sin embargo el coraje de plantarle cara y poner en evidencia la injusticia de unas leyes anacr¨®nicas. Muchos de los cambios que ped¨ªan las detenidas en 2018, como poder conducir, se han hecho realidad desde entonces bajo la batuta del heredero y gobernante de hecho de Arabia Saud¨ª, el pr¨ªncipe Mohamed Bin Salm¨¢n, lo que hace a¨²n m¨¢s sorprendente la dureza con la que han sido tratadas.
Desde junio de este a?o, las saud¨ªes mayores de edad, solteras, viudas o divorciadas, pueden vivir por su cuenta sin permiso masculino. No era el caso cuando Badawi se divorci¨® de su primer marido a mediados de la primera d¨¦cada de este siglo. Entonces tuvo que regresar al hogar paterno, donde se enfrent¨® a los gritos y los golpes de su progenitor, seg¨²n concluy¨® una investigaci¨®n no judicial. Con 27 a?os y un hijo de siete, busc¨® refugio en una casa para mujeres maltratadas. El padre la denunci¨® por ¡°desobediencia¡± no una, sino dos veces y, aunque la primera fue desestimada, en la segunda ocasi¨®n un juez orden¨® detenerla. En el proceso, Badawi se enamor¨® de su abogado, Walid Abualkhair, y ante la negativa de su padre a autorizar la boda, opt¨® por demandarle. Cuando acudi¨® a la vista, se le aplic¨® la orden de detenci¨®n. Pas¨® seis meses en la c¨¢rcel antes de que un tribunal fallara a su favor y traspasara su tutela a uno de sus t¨ªos, lo que le permiti¨® casarse de nuevo.
El final feliz de su historia personal solo fue el principio de su compromiso con los derechos de la mujer. En 2011, Badawi fue la primera saud¨ª en presentar una demanda pidiendo que las mujeres pudieran votar y ser candidatas en las elecciones municipales convocadas ese a?o. Su petici¨®n fue desestimada, pero en v¨ªsperas de los comicios el entonces rey Abdal¨¢ anunci¨® que podr¨ªan participar a partir de la siguiente convocatoria.
En la misma l¨ªnea, a principios de 2012 present¨® una reclamaci¨®n contra la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico por rechazar su solicitud de permiso de conducir, siguiendo los pasos dados meses antes por Manal al Sharif en la Provincia Oriental. Al igual que la autora del libro Daring to Drive (Atreverse a conducir, sin publicar en espa?ol), Badawi fue muy activa en la campa?a contra la prohibici¨®n de que las mujeres se pusieran al volante en Arabia Saud¨ª. Todo ello le vali¨® el premio Women of Courage (Mujeres Valientes) que otorga la Secretar¨ªa de Estado norteamericana y que recibi¨® de manos de la entonces secretaria, Hillary Clinton, y de la primera dama, Michelle Obama, en marzo de 2012. La alegr¨ªa por ese reconocimiento iba a durar poco. Antes de que acabe ese a?o las autoridades detuvieron a su hermano, Raef, un librepensador y bloguero acusado de ¡°insultar al islam¡±. Terminar¨ªan conden¨¢ndolo a 10 a?os de c¨¢rcel y 10.000 latigazos. Raef hab¨ªa apoyado a Samar en la lucha judicial contra su padre, e incluso la acogi¨® en su casa durante algunos meses. El abogado Abualkhair se ocup¨® de la defensa de su cu?ado hasta que en abril de 2014 tambi¨¦n fue detenido y se convirti¨® en el primer activista juzgado bajo una draconiana nueva ley antiterrorista. Le cayeron 15 a?os.
Badawi, que acababa de ser madre por segunda vez, lanz¨® una campa?a internacional pidiendo la liberaci¨®n de ambos. En septiembre habl¨® ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra y viaj¨® a Estados Unidos para reunirse con varios senadores y responsables de grupos de derechos humanos. Ser¨ªa su ¨²ltimo viaje fuera del Reino del Desierto. El 2 de diciembre, cuando intent¨® volar a Bruselas para asistir a un foro de la UE, descubri¨® que el Ministerio del Interior le prohib¨ªa salir del pa¨ªs. En enero de 2016 fue brevemente detenida por gestionar una cuenta de Twitter que ped¨ªa la puesta en libertad de su marido, a pesar de que ambos se hab¨ªan divorciado por razones personales un par de meses antes. Aun as¨ª, ella mantuvo su activismo hasta su nueva detenci¨®n en 2018.
¡°S¨ª, Samar ha sido liberada, pero no s¨¦ con qu¨¦ condiciones¡±, confirma Ensaf Haidar, la mujer de Raef, desde Canad¨¢, donde est¨¢ refugiada. Como en el caso de Loujain al Hathloul, la excarcelaci¨®n no equivale a la libertad. Seg¨²n la organizaci¨®n de derechos humanos ALQST (Justicia, en ¨¢rabe), Badawi tiene prohibido trabajar, publicar en las redes sociales o viajar fuera de Arabia Saud¨ª durante los pr¨®ximos cinco a?os.
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