L¨ªbano transforma sus basuras en oro para empresarios y en c¨¢ncer para los ciudadanos
La crisis de la gesti¨®n de basuras ha desembocado en un lucrativo oligopolio pero ha aumentado los riesgos medioambientales y de salud para los libaneses
Una vez m¨¢s la mala gesti¨®n de las basuras en L¨ªbano ha provocado la ira ciudadana y destapado la ineptitud del Gobierno para hacer frente a sus responsabilidades. Una tormenta el pasado mes puso en evidencia al Ejecutivo liban¨¦s al arrastrar ingentes cantidades de desechos a la playa libanesa de Zouk Mosbeh, en el distrito de Kaserwan y a 16 kil¨®metros al norte de Beirut. All¨ª, los vecinos se despertaron frente a un mar de pl¨¢sticos e inmundicia donde vieron reflejada la desidia de sus dirigentes. Ya en junio de 2015 el colapso del principal vertedero que daba sepultura a los detritus del pa¨ªs inund¨® de basuras las calles de Beirut, la misma que anta?o fuera aclamada como el Par¨ªs de Oriente Pr¨®ximo, provocando ins¨®litas y multitudinarias manifestaciones populares. El pasado domingo, unas 350 personas se congregaron frente al Gran Serrallo de Beirut para protestar contra las nuevas medidas anunciadas por el Ministerio de Medioambiente para hacer frente al problema y que, en su opini¨®n, pondr¨¢n en peligro la salud ciudadana.
Tras convivir durante m¨¢s de tres semanas con 3.500 toneladas de basura en Beirut, libaneses de todas las clases y confesiones se unieron para protestar contra la gesti¨®n del precario Gobierno. Acababa de nacer You Stink (Apest¨¢is), una plataforma ciudadana para la que las basuras simbolizaban la corruptela de un Estado en perpetuo d¨¦ficit a la hora de rendir cuentas a sus ciudadanos.
A la crisis, el Gobierno respondi¨® con promesas. ¡°Abriremos tres nuevos vertederos y apoyaremos a las municipalidades para el tratado de desechos¡±, dijo entonces el Gobierno interino. El pa¨ªs produce en la actualidad entre 6.500 y 7.000 toneladas de desechos diarios. Transcurridos 30 meses, el mal tiempo ha puesto de nuevo en evidencia a una clase dirigente que, absorbida por las rencillas internas y la vecina guerra en Siria, ha relegado los asuntos dom¨¦sticos al ¨²ltimo puesto en la agenda nacional. Al mal tiempo buena cara ha sido la m¨¢xima adoptada por el ministro de medioambiente liban¨¦s, Tarek Jatib, quien ha declarado este mes que ¡°L¨ªbano no tiene ninguna crisis de basuras¡±. Lo cierto es que el pa¨ªs arrastra desde hace 20 a?os una deficiente gesti¨®n de desechos que se ha ido parcheando con sucesivos planes de emergencia.
El hedor de las basuras despierta una conciencia social ciudadana
Desde que estallara la ¨²ltima crisis de basuras en 2015, los desperdicios del pa¨ªs se han convertido simult¨¢neamente en oro para un pu?ado de empresarios cercanos al poder y en causa de enfermedades para sus ciudadanos. Pero tambi¨¦n en el germen que alimenta el creciente descontento social que desde la creaci¨®n de You Stink ha encontrado tierra f¨¦rtil en otros ¨¢mbitos. Los vecinos de una decena de municipalidades se han organizado para elaborar un fruct¨ªfero programa de recogida de basuras, mientras que otros 100 j¨®venes de la organizaci¨®n Live Love Beirut se han armado con sus botellas de ox¨ªgeno y aletas para formar un equipo de buzos barrenderos y limpiar las entra?as de las costas libanesas.
Al olor de las inmundicias se ha producido un efecto domin¨® que ha desbordado al ¨¢mbito pol¨ªtico con el surgir de la plataforma Beirut Medinati (Beirut, mi ciudad). Organizados bajo una coalici¨®n de candidatos independientes y aconfesionales lograron obtener el 45% de los votos en las elecciones municipales de Beirut en 2016. La iniciativa ha surtido efecto y ha sido replicada al este del pa¨ªs con Baalbek Medinati (Baalbek, mi ciudad). De cara a los pr¨®ximos comicios parlamentarios previstos para el pr¨®ximo 6 de mayo, y los primeros en nueve a?os, 11 partidos de izquierda se han reunido con estas plataformas de independientes para converger en una sola fuerza y desafiar en las urnas bajo un ¨²nico listado a los partidos tradicionales anclados entre los clanes y los l¨ªderes religiosos.
El ¨²ltimo destello de esta incipiente conciencia ciudadana lo ha protagonizado la ONG LOGI, que acaba de lanzar una campa?a contra los ambiciosos planes estatales de convertir al L¨ªbano en una naci¨®n petrolera. El descubrimiento de varios yacimientos mar¨ªtimos de gas y crudo, disputados por Israel, ha puesto a la ciudadan¨ªa en guardia contra un nuevo episodio de explotaci¨®n de los recursos del pa¨ªs al servicio de un pu?ado de multimillonarios. Precavidos, han compuesto una plataforma de expertos en la materia para, por un lado, mantener informado al ciudadano, y, por otro, hacer propuestas al Gobierno en c¨®mo encauzar unos recursos nacionales al servicio de todos los libaneses.
El hebdomadario liban¨¦s Le Commerce du Levant ha revelado en el reciente reportaje Los nuevos reyes de los desechos c¨®mo los mandatarios libaneses han sabido sacar provecho y mostrar sus dotes de alquimistas para transformar monta?as de detritus en montones de oro. Entre 1996 y 2016 el tesoro p¨²blico ha desembolsado 1.630 millones de euros para deshacerse de sus basuras. La empresa Averda, m¨¢s conocida como Sukleen, ha perdido hoy el monopolio sobre la recolecci¨®n y posterior gesti¨®n de las basuras.
Cuatro nuevas empresas han ocupado su lugar creando un fruct¨ªfero oligopolio con suculentos contratos que superan los 570 millones de euros. La nueva reina de la basura es la empresa Al Jihad Group, liderada por los hermanos Al Arab, quienes mantienen una estrecha relaci¨®n con el primer ministro liban¨¦s, Saad Hariri. Uno de los hermanos del grupo, Abdel Kader Al Arab, es el jefe de su servicio de seguridad. Muerto Sukleen, la empresa Al Jihad Group ha obtenido en 2016 en opacas concesiones varios proyectos por valor de 203 millones de euros.
Un a?o m¨¢s tarde, el nuevo oligopolio de la basura no ha cumplido con sus promesas ni en la recogida, la gesti¨®n o el tratamiento de los desperdicios. Igualmente, acumulan retrasos en la construcci¨®n de nuevas plantas de tratamiento y de vertederos sin que el Gran Serrallo tome cartas en el asunto. El Gobierno tampoco ha avanzado en la descentralizaci¨®n prometida, abandonando a su suerte a las municipalidades. Hecho que ha disparado en los ¨²ltimos a?os el n¨²mero de vertederos informales en el pa¨ªs, que han pasado de 600 a cerca de 3.000. Sin un plan que ofrezca una soluci¨®n a largo plazo, el Ministerio de Medioambiente liban¨¦s aprob¨® en enero una en¨¦sima ley que ha provocado el enfado de las ONG.
Entre las nuevas medidas se prev¨¦ establecer plantas de incineraci¨®n bajo el eslogan de residuos por energ¨ªa. La idea se antoja m¨¢s que atractiva en un pa¨ªs donde los 4,5 millones de ciudadanos est¨¢n diariamente expuestos a cortes de electricidad que oscilan entre tres y 16 horas. Adem¨¢s, acoge a 1,5 millones de refugiados sirios ¡ªlo que supone un cuarto de la poblaci¨®n total¡ª, que han desbordado las ya deficientes infraestructuras del pa¨ªs. En contrapartida, la masiva presencia de refugiados ha atra¨ªdo los fondos de la comunidad internacional, que ha invertido m¨¢s de 40 millones de d¨®lares para levantar nuevos vertederos y tratar los residuos tanto de libaneses como de sirios. ¡°Los desechos en L¨ªbano est¨¢n compuestos en un 65% por materia org¨¢nica y mayoritariamente h¨²medos por lo que no pueden ser incinerados con el m¨¦todo adecuado para convertirlos en energ¨ªa. Por lo que el Gobierno emprender¨¢ una simple quema de basuras aumentado los riesgos medioambientales y de salud¡±, explica Najat Saliba, profesora en poluci¨®n atmosf¨¦rica de la Universidad Americana de Beirut, durante una manifestaci¨®n en la capital libanesa.
La incineraci¨®n no controlada de los desechos abre hoy nuevas brechas medioambientales y de salud en el pa¨ªs. ¡°M¨¢s de 150 vertederos en todo el pa¨ªs est¨¢n quemando al aire libre la basura cada semana. Esto entra?a un riesgo para la salud de los m¨¢s mayores y de los ni?os¡±, advierte la ONG Human Rights Watch, que el pasado mes emprendi¨® una campa?a contra la quema de desechos bajo el eslogan Como si estuvieras inhalando tu muerte. ¡°El n¨²mero de pacientes con c¨¢ncer en L¨ªbano es el m¨¢s elevado de la regi¨®n¡±, recuerda Muriel Rozelier en Le Commerce du Levant. Beirut supera en 3,5 veces el ratio m¨¢ximo de contaminaci¨®n establecido por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud, apostilla la especialista Saliba. Los m¨¦dicos han se?alado el vertiginoso aumento de casos con problemas respiratorios, asma y c¨¢ncer en aquellas zonas donde se concentra la quema de detritus. Areas que casualmente convergen con las barriadas m¨¢s pobres del pa¨ªs.
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