¡°Berlusconi subvencion¨® a la mafia durante a?os¡±
El fiscal antimafia Nino Di Matteo, que investiga las negociaciones del Estado italiano con la Cosa Nostra, lamenta la falta de compromiso de la pol¨ªtica en la lucha contra el crimen organizado
En el pasillo, un grupo de guardaespaldas pasa la tarde charlando. Detr¨¢s de la puerta blindada, en un despacho de la Fiscal¨ªa Antimafia de Roma al que se accede a trav¨¦s de un interfono, espera el magistrado m¨¢s protegido de Italia. Nino di Matteo (Palermo, 1961), el fiscal que ha investigado los v¨ªnculos entre el Estado italiano y la Cosa Nostra, se encuentra bajo protecci¨®n desde 1993. Pero en los ¨²ltimos cinco a?os, desde que la polic¨ªa intercept¨® unas conversaciones en la c¨¢rcel del capo de la Cosa Nostra Tot¨° Riina, las medidas han llegado al m¨¢ximo nivel. El capo dei capi quer¨ªa verle muerto. Y ten¨ªa sus motivos.
Di Matteo es la llave maestra para descifrar una verdad parcial. Una verdad, como ¨¦l dice, "negada" tantos a?os sobre lo que sucedi¨® en los atentados contra los jueces Giovanni Falcone y Paolo Borsellino en 1992. Pero tambi¨¦n sobre el v¨ªnculo real entre el crimen organizado italiano y la actual pol¨ªtica en un pa¨ªs que encara las elecciones del 4 de marzo obviando un tema crucial.
Pregunta. Parte del aumento de su seguridad se debe a las amenazas de Tot¨° Riina. ?Qu¨¦ sinti¨® cuando muri¨®?
¡°La mafia sin la pol¨ªtica ser¨ªa solo una banda de chacales¡±
Respuesta. Pens¨¦ que con ¨¦l no solo mor¨ªa el gran capo. Fue el punto de referencia de todas las organizaciones mafiosas que operaban dentro y fuera de Italia. En su mentalidad, encarn¨® la figura de un criminal de ¨¦xito que obtuvo resultados ins¨®litos hasta la fecha. Pero tambi¨¦n estableciendo relaciones criminales con altos niveles del poder en Italia. Y eso no debe olvidarse.
P. ?Hasta qu¨¦ nivel?
R. Hay dos sentencias definitivas. La Andreotti demostr¨® que la mafia palermitana tuvo relaciones directas y significativas hasta los a?os 80 con una persona que fue siete veces presidente del Consejo de Ministros [Giulio Andreotti]. Y hay otra, desaparecida de la agenda pol¨ªtica, como la del caso [Marcello] Dell'Utri, que demuestra que uno de los fundadores de Forza Italia mantuvo relaciones con exponentes de familias de mafiosas de Palermo. Pero tambi¨¦n que de 1974 a 1992 fue el intermediario de un acuerdo estipulado y respetado de una y otra parte, que ten¨ªa como protagonistas a familias hist¨®ricas como la de Riina, y del otro lado a Silvio Berlusconi. A ese nivel Cosa Nostra despleg¨® su capacidad de cultivar relaciones con el poder.
¡°Hay 60.000 italianos en la c¨¢rcel, pero los detenidos por corrupci¨®n no llegan a 30¡±
P. ?Qu¨¦ permite pensar que esas relaciones ya no existen?
R. Cosa Nostra no renunciar¨¢ nunca a cultivarlas. Est¨¢n en su ADN. Su fuerza est¨¢ en la capacidad de mantener esos v¨ªnculos. Por eso espero que la pol¨ªtica entienda un d¨ªa, finalmente, que para vencer a la mafia no es suficiente arrestar, procesar y condenar a los mafiosos. Hay que crear las condiciones para liquidar esas relaciones. Pero lamentablemente muchas se?ales que esper¨¢bamos no han llegado.
P. Durante esta campa?a pr¨¢cticamente no se ha tocado el tema.
R. Es desolador constatar c¨®mo se habla tan poco de mafia y corrupci¨®n. Se pretende hacer ver que no son el principal problema de nuestra democracia. Esperaba una atenci¨®n mayor en los programas y en la dial¨¦ctica electoral. Me sorprende que se hable de econom¨ªa, por ejemplo, y no se entienda que las mafias la adulteran y causan el empobrecimiento de todos los territorios donde tienen fuerza.
¡°Es desolador que en campa?a casi no se haya tocado este tema¡±
P. ?D¨®nde est¨¢ la frontera entre mafia y corrupci¨®n?
R. Es cada vez m¨¢s sutil, forman parte de un sistema ¨²nico. Ya no existe solo la mafia. Y la justicia no consigue todav¨ªa golpearles del mismo modo. Hoy tenemos en las c¨¢rceles italianas m¨¢s de 60.000 detenidos, pero los condenados por corrupci¨®n no llegan a 30. Y, justamente, esos son los delitos con los que consiguen controlar la administraci¨®n p¨²blica. Hoy deber¨ªa estar en la agenda pol¨ªtica la lucha sin cuartel contra la mafia y la corrupci¨®n, pero desgraciadamente no es as¨ª.
P. ?Por qu¨¦?
R. No entiendo si es porque se minusvalora o porque se acepta. En los primeros a?os noventa hubo un ministro del primer Gobierno Berlusconi [Pietro Lunardi] que dijo que hab¨ªa que aprender a convivir con ellas. Pero en nombre de todos nuestros colegas muertos y la gente que sigue combatiendo, no se puede aceptar nunca.
P. ?Alguna vez ha sentido que se traicionaba la memoria de Falcone y Borsellino?
R. S¨ª, su trabajo ha sido muchas veces traicionado. Con los hechos y con los pol¨ªticos que cuando estaban vivos les acusaban de estar politizados, de comunistas, justicieros. Cuando murieron, hicieron ver que honraban su memoria, pero continuaron acosando a los jueces vivos que pretend¨ªan vigilar al poder. La traici¨®n a sus figuras y a su compromiso ha sido muy grave por parte de muchos pol¨ªticos.
P. ?Qu¨¦ ser¨ªa la mafia sin la pol¨ªtica?
R. Le respondo con las palabras Salvatore Cancemi, un colaborador de la justicia que pertenec¨ªa a la Commissione de la Cosa Nostra y que, para entendernos, fue uno de los que se sent¨® en la misma mesa con Riina y Provenzano para decidir d¨®nde y c¨®mo matar a Falcone y Borsellino. Despu¨¦s de un interrogatorio largu¨ªsimo me dijo: ¡°Dottore, Tot¨® Riina muchas veces me dec¨ªa: 'Sin la relaci¨®n con la pol¨ªtica, habr¨ªamos sido una banda de chacales [criminales comunes]. El Estado nos habr¨ªa aplastado la cabeza f¨¢cilmente. Esa es nuestra fuerza y debemos seguir cultiv¨¢ndola'¡±. Nunca lo he olvidado.
P. Silvio Berlusconi est¨¢ en condiciones de seguir influyendo en este pa¨ªs. ?Qu¨¦ significa eso para Italia?
R. Hay una sentencia definitiva que afirma que de 1974 a 1992 Berlusconi tuvo relaciones con la mafia siciliana. La subvencion¨®, les pag¨® dinero. Lo preocupante no eso solo que todav¨ªa cuente pol¨ªticamente, sino que nadie hable de esas relaciones demostradas en sentencia definitiva. Incluso los periodistas lo ignoran. M¨¢s all¨¢ de las ideas pol¨ªticas de cada uno, los hechos deber¨ªan ser siempre recordados.
P. ?Qu¨¦ significar¨ªa su retorno a la primera l¨ªnea?
R. Cito un dato: ser¨ªa el retorno al liderazgo del pa¨ªs de un sujeto que una sentencia definitiva ha reconocido que mantuvo relaciones con la Cosa Nostra durante al menos 20 a?os, hasta el momento en que Cosa Nostra hizo los atentados. Un sujeto que sufrag¨® econ¨®micamente a la mafia en el periodo en que mat¨® a decenas de personas de las instituciones. No es una opini¨®n, es el dato de facto reconocido por el Tribunal Supremo.
P. La Cosa Nostra, seg¨²n sus investigaciones, ?puede todav¨ªa extorsionar al Estado?
R. De las investigaciones de los atentados de 1992 y 1993, emerge la probabilidad que junto la Cosa Nostra hubiera gente de otros ambientes. Mandantes externos. Y hasta que no se descubra la verdad sobre estas personas, Cosa Nostra conservar¨¢ siempre un arma peligros¨ªsima como es la extorsi¨®n. Todav¨ªa hay hombres de Cosa Nostra que custodian secretos que implican a parte del poder italiano. Hasta que solo tengamos una verdad parcial sobre lo que pas¨®, ser¨¢ una verdad negada. Y no lo podemos aceptar.
P. ?Borsellino ten¨ªa raz¨®n cuando dijo que no ser¨ªa la Cosa Nostra quien lo matase?
R. Cosa Nostra particip¨®. Pero en tantos delitos, incluido en el de Via d¡¯ Amelio, otros instigaron a Cosa Nostra a llevar a cabo aquel atentado o participaron con los mafiosos ejecut¨¢ndolo.
P. ?C¨®mo cree que ha evolucionado la aproximaci¨®n del Vaticano a la mafia?
R. Le respondo como magistrado, pero tambi¨¦n como creyente cat¨®lico. Durante d¨¦cadas la Iglesia fue responsable de una grav¨ªsima aceptaci¨®n del poder mafioso. A trav¨¦s del silencio, la desatenci¨®n, la omisi¨®n. Pero en los ¨²ltimos a?os, despu¨¦s del famoso discurso de Juan Pablo II, fue muy importante la toma de posici¨®n del papa Francisco afirmando que ser mafioso lleva a la excomuni¨®n. Y como cat¨®lico, sue?o una Iglesia todav¨ªa m¨¢s valiente, que lleve el discurso a todos los niveles. No puede haber compatibilidad entre el Evangelio y la mafia.
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