L¨ªbano forma Gobierno tras tres meses de vac¨ªo pol¨ªtico y protestas
Cientos de manifestantes cortan las carreteras del pa¨ªs para manifestarse contra un Gabinete al que acusan de perpetuar la ¨¦lite confesional en el poder
El presidente del L¨ªbano, Michel Aoun, y el primer ministro liban¨¦s en funciones, Has¨¢n Diab, firmaron este martes el decreto para la formaci¨®n de un nuevo Gobierno en el pa¨ªs casi tres meses despu¨¦s de la dimisi¨®n de Saad Hariri y tras registrarse las jornadas m¨¢s violentas que han dejado medio millar de heridos tan solo en el fin de semana en la capital. "Este es un Gobierno que representa las aspiraciones de los manifestantes movilizados desde hace tres meses¡±, ha declarado Diad desde el palacio presidencial antes de citar a los nuevos ministros a su primera reuni¨®n este mi¨¦rcoles a las 11 de la ma?ana, hora local [10 en Espa?a].
Nada m¨¢s conocerse los nombres de los 20 ministros, la mayor¨ªa especialistas y entre los que hay cinco mujeres, la m¨¢s destacada la cristiana Zeina Akar que ser¨¢ vice primera ministra y titular de Defensa, docenas de libaneses se han echado a las calles para cortar las carreteras y congregarse frente al Parlamento en protesta ante un Ejecutivo que ¡°no satisface las demandas populares¡±.
Los manifestantes exigen desde el 17 de octubre la ca¨ªda en bloque de la ¨¦lite pol¨ªtico-confesional en el poder, a la que acusan de llevar el pa¨ªs a la bancarrota. Diad fue nombrado el pasado 20 de diciembre despu¨¦s de que los manifestantes rechazasen previamente a tres candidatos al cargo. El primer ministro en funciones pidi¨® entonces a los libaneses ¡°una oportunidad¡± y su nombre provoc¨® la primera divisi¨®n en un movimiento de contestaci¨®n que por ahora no tiene l¨ªderes.
El anuncio del nuevo Gabinete ha vuelto a dividir este martes a los ciudadanos entre aquellos que consideran que no se trata de un "Gobierno tecn¨®crata" como ha afirmado Diab, y aquellos m¨¢s pragm¨¢ticos que buscan una formula tecno-pol¨ªtica ¡°aceptable¡± capaz de frenar el colapso econ¨®mico hacia el que se dirige el pa¨ªs.
La generaci¨®n de veintea?eros de postguerra (1975-1990) y carne de ca?¨®n para la emigraci¨®n o el paro, lidera la ola de protestas que se opone a perpetuar el sistema confesional que desde hace tres d¨¦cadas rige el L¨ªbano con un complejo reparto del poder pol¨ªtico seg¨²n las cuotas confesionales. La crisis econ¨®mica en ciernes en un pa¨ªs donde un tercio de los 4.5 millones de libaneses vive bajo el umbral de la pobreza, ha servido como revulsivo para romper con el tradicional sistema de movilizaci¨®n y solidaridad social basada en la pertenencia religiosa y potenciar el germinar de una sociedad aconfesional.
"Se trata de un Gobierno un tercio tecno y dos tercios sectarios¡±, ironiza Hussein Hemede, comerciante de 52 a?os en Beirut. ¡°Nuestros l¨ªderes viven en la inopia¡±, remacha. ¡°No se pueden cambiar 30 a?os, en tres meses¡±, discrepa por su parte Mey Insuli, ama de casa y madre de tres a los 32. ¡°Cada d¨ªa m¨¢s libaneses pierden su trabajo, la libra vale la mitad y aumenta la violencia en las calles¡±, advierte. Como Insuli, los libaneses temen que con el vac¨ªo pol¨ªtico no haya vuelta atr¨¢s en una crisis que amenaza con escalar conforme m¨¢s trabajadores pierden sus puestos y salarios y son m¨¢s los casos que no pueden hacer frente al pago de hospitales, colegios o incluso comida.
Las infraestructuras del pa¨ªs se caen literalmente a pedazos, los cortes de electricidad son diarios y la poblaci¨®n sufre el abuso de mafias que abastecen de agua y electricidad. La libra libanesa ha perdido hasta un 60% de su valor desde el inicio de las protestas en las casas de cambio, tras que los bancos hayan impuesto un control informal en la retirada de capital. El pa¨ªs acumula una de las deudas p¨²blicas m¨¢s importantes del mundo de casi 76.000 millones de euros, el 150% del PIB, y encabeza la lista de Gobiernos corruptos en la regi¨®n.
Gobierno monocolor
Los detractores acusan tambi¨¦n al nuevo de ser de ¡°un solo color¡±. El bloque pol¨ªtico minoritario que integra el dimitido Hariri y principal representante de la comunidad sun¨ª, ha rehusado formar parte alegando cerrar filas con las protestas en su exigencia de un Gobierno ¨ªntegramente tecn¨®crata. Con ello, ha dado por terminado el anterior Gobierno de unidad que apenas ha sobrevivido al a?o de vida. En su grupo se cuentan los partidos cristianos Fuerzas Libanesas y Kataeb, as¨ª como el druso Partido Progresista Socialista.
El dise?o del nuevo Gabinete ha quedado exclusivamente en manos del bloque mayoritario, que conforman el t¨¢ndem chi¨ª Hezbol¨¢-Amal junto con el principal partido cristiano, que lidera Yibran Basil, ministro de Exteriores en funciones y yerno del presidente Aoun. A pesar de formar parte de una misma alianza, estos partidos se han enfrascado durante semanas en un mercadeo de carteras y candidatos, acumulando retrasos en la formaci¨®n del Gobierno.
Las libanesas se han mantenido en la vanguardia de las protestas para exigir una mayor representaci¨®n en las esferas de decisi¨®n pol¨ªtica y acabar con un arcaico sistema judicial por el que las mujeres son tuteladas por maridos y padres en un sistema de doble patriarcado pol¨ªtico-religioso. Un cuarto de las carteras ser¨¢n ocupadas por mujeres, incluida Defensa cuya ministra saliente, Raya el Hassan, ha sido la primera mujer en el mundo ¨¢rabe en ocupar dicho cargo. Entre los reci¨¦n nombrados hay varios abogados y profesores universitarios, colectivos que est¨¢n jugando un importante papel en las protestas.
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