La imputaci¨®n a Sergio Fajardo vuelve a poner en tela de juicio a la Fiscal¨ªa de Colombia
La inesperada decisi¨®n contra el candidato presidencial provoca nuevos cuestionamientos a la credibilidad e independencia de la entidad encabezada por Francisco Barbosa
La fiscal¨ªa ha sacudido la incipiente campa?a presidencial de Colombia cuando apenas est¨¢ por arrancar. Uno de los aspirantes mejor posicionados para las elecciones del 2022, el exalcalde de Medell¨ªn Sergio Fajardo, deber¨¢ responder ante la justicia por la primera imputaci¨®n penal de su carrera p¨²blica debido a supuestas irregularidades al contratar un pr¨¦stamo en d¨®lares hace ocho a?os, cuando era gobernador del departamento de Antioquia entre 2012 y 2015.
El ente investigador encabezado por Francisco Barbosa, un amigo ¨ªntimo del presidente Iv¨¢n Duque, acusa a Fajardo de los delitos de peculado por apropiaci¨®n en favor de terceros agravado y contrato sin cumplimiento de requisitos legales. Argumenta que, seg¨²n sus an¨¢lisis, el entonces gobernador no realiz¨® un estudio sobre la necesidad de hacer esa operaci¨®n en moneda extranjera y no en pesos, no proyect¨® la volatilidad del d¨®lar ni adquiri¨® un seguro de riesgo cambiario. Por la devaluaci¨®n del peso y la fluctuaci¨®n del d¨®lar, seg¨²n la Fiscal¨ªa, se produjo un detrimento fiscal estimado a corte de 2020 en 320.000 millones de pesos (unos 85 millones de d¨®lares).
Fajardo, un matem¨¢tico vinculado a la transformaci¨®n de Medell¨ªn como alcalde y despu¨¦s como gobernador de Antioquia, se forj¨® en movimientos ciudadanos como una figura independiente de los partidos, ha cultivado el centro del espectro pol¨ªtico y apoy¨® el acuerdo de paz sellado hace cuatro a?os con la guerrilla de las FARC. En medio de la polarizaci¨®n que ha caracterizado a Colombia desde los di¨¢logos de La Habana, no es una figura que despierte consensos. Ha sido blanco de cr¨ªticas tanto desde la izquierda como desde los sectores m¨¢s conservadores congregados en torno al Centro Democr¨¢tico, el partido de Gobierno fundado por el expresidente ?lvaro Uribe, el mentor pol¨ªtico de Duque.
Sin embargo, la imputaci¨®n fue ampliamente interpretada como una decisi¨®n tard¨ªa y despert¨® una oleada de solidaridad. La argumentaci¨®n jur¨ªdica fue rechazada por pol¨ªticos de diversas tendencias ideol¨®gicas, pero tambi¨¦n por sectores econ¨®micos y por abogados penalistas. Diversas voces cuestionan la credibilidad e independencia de la Fiscal¨ªa, justamente en v¨ªsperas de una audiencia en la que, el pr¨®ximo martes, debe sustentar su decisi¨®n de cerrar la investigaci¨®n contra el expresidente Uribe por un caso de manipulaci¨®n de testigos en el que las v¨ªctimas se han quejado de falta de garant¨ªas.
Barbosa, un abogado de 46 a?os reconocido por su cercan¨ªa con Duque desde que estudiaron juntos en la Universidad Sergio Arboleda, fue elegido en enero de 2020 por la Corte Suprema de Justicia como fiscal general a pesar de no contar con credenciales en derecho penal. Ven¨ªa de desempe?arse como consejero presidencial para los derechos humanos, un cargo en el que fue cuestionado por su manejo impreciso de las cifras sobre asesinatos de l¨ªderes sociales.
Su Fiscal¨ªa ha estado rodeada de controversias como la actuaci¨®n en el caso Uribe, una indagaci¨®n contra la alcaldesa de Bogot¨¢, Claudia L¨®pez, o la detenci¨®n del gobernador de Antioquia, An¨ªbal Gaviria. La imputaci¨®n contra Fajardo se produce en medio de una creciente sensaci¨®n de que la divisi¨®n de poderes est¨¢ en riesgo. El Ejecutivo ha logrado instalar a la cabeza de los organismos de control a personas muy cercanas a Duque o al uribismo desde el a?o pasado, lo que ha reavivado discusiones sobre el equilibrio de poderes, el sistema de pesos y contrapesos, los m¨¦ritos de los funcionarios o la independencia de distintas entidades. Los principales reparos han estado dirigidos contra Barbosa y la procuradora general, la exministra de Justicia Margarita Cabello Blanco, que asumi¨® este a?o.
Rechazo generalizado
¡°Pedir cr¨¦ditos en d¨®lares es una pr¨¢ctica bastante com¨²n y tiene una justificaci¨®n muy simple, pues en d¨®lares los intereses son m¨¢s baratos¡±, explica el consultor y analista pol¨ªtico Andr¨¦s Mej¨ªa Vergnaud. Exigir proyecciones sobre su comportamiento ¡°equivale a ver el futuro, adivinaci¨®n, futurolog¨ªa, cartomancia o bola de cristal¡±, afirma para ilustrar que la frecuencia estad¨ªstica de equivocaci¨®n de las proyecciones sobre el precio del d¨®lar es muy alta. ¡°No existe ninguna posibilidad de anticipar el desarrollo futuro de una variable financiera¡±, a?ade, y las coberturas cambiarias son supremamente costosas en el entorno colombiano. ¡°Desde la realidad del mercado financiero los cargos de la Fiscal¨ªa carecen de toda l¨®gica, que es lo que lleva a preguntarse si detr¨¢s de eso hay una motivaci¨®n pol¨ªtica¡±, valora sobre la avalancha de cuestionamientos.
¡°No suena razonable imputar cargos a un funcionario p¨²blico porque no supo hacia ad¨®nde iba el d¨®lar¡±, se?ala Bruce MacMaster, presidente de la asociaci¨®n nacional de empresarios, ANDI. ¡°Muy grave que la Fiscal¨ªa General de la Naci¨®n pretenda volver un delito los movimientos no anticipados del precio del d¨®lar¡±, coincidi¨® Luis Fernando Mej¨ªa, director de Fedesarrollo, un centro de investigaciones econ¨®micas. ¡°Es una participaci¨®n directa de la Fiscal¨ªa en el proceso electoral¡±, apunt¨® el penalista Francisco Bernate.
Fajardo, que se ubic¨® tercero en la primera vuelta de las presidenciales de 2018, por detr¨¢s de Duque y del candidato de izquierda Gustavo Petro, est¨¢ volcado a forjar la Coalici¨®n de la Esperanza, que re¨²ne a distintas fuerzas en el centro del espectro pol¨ªtico. ¡°Como dem¨®cratas respetamos la institucionalidad, pero la decisi¨®n de la Fiscal¨ªa contra Fajardo es absurda, sin precedentes, interferencia en plena campa?a pol¨ªtica. Estamos seguros de que demostrar¨¢ la transparencia de sus actuaciones¡±, manifestaron los otros miembros ¨Cque incluyen al exnegociador de paz Humberto de la Calle o la congresista ?ngela Mar¨ªa Robledo¨C en un mensaje conjunto. ¡°No solo un exabrupto y un atentado al sentido com¨²n, sino tambi¨¦n una desviaci¨®n de la justicia, una forma peligrosa de intimidaci¨®n¡±, abund¨® Alejandro Gaviria, el rector de la Universidad de Los Andes que ha descartado lanzar su candidatura.
¡°No suena bien que a meses de una elecci¨®n presidencial la Fiscal¨ªa meta mano¡±, destac¨® Petro, que ha sido muy cr¨ªtico de Fajardo en el pasado y busca forjar su propia coalici¨®n. En las ant¨ªpodas ideol¨®gicas, incluso miembros del Centro Democr¨¢tico rechazaron lo que calificaron como ¡°judicializaci¨®n de la pol¨ªtica¡±, en palabras de la senadora Paloma Valencia o el aspirante presidencial Rafael Nieto.
En medio de la tormenta, el exalcalde de Medell¨ªn ha evitado declararse un perseguido pol¨ªtico. ¡°Pongo, con dificultad, la serenidad y la prudencia por delante y me ayudo con los mensajes de apoyo que me brindan¡±, escribi¨® este jueves en un mensaje de su pu?o y letra: ¡°La verdad y la decencia siempre salen adelante aunque a veces se demoren, o las enreden¡±. Fue su segunda declaraci¨®n desde que se conoci¨® la noticia. En la primera, anticip¨® que pedir¨¢ formalmente al fiscal Barbosa que ¡°presida un comit¨¦ t¨¦cnico jur¨ªdico para revisar la improcedencia de esta imputaci¨®n¡±.
Dado que Fajardo es aforado, la imputaci¨®n debe presentarse ante el Tribunal Superior de Bogot¨¢ y luego la Corte Suprema de Justicia definir¨¢ los m¨¦ritos en un proceso que puede tardar a?os. Pero hay antecedentes recientes de comit¨¦s que han tumbado acusaciones ¨Ccomo ocurri¨® con la informante en un caso de censura en el sistema de medios p¨²blicos¨C. ¡°La Fiscal¨ªa ha demostrado que cuando hay una enorme oposici¨®n a sus imputaciones es capaz de recular y echar para atr¨¢s su aparato judicial. Es probable que debido a la oleada de cr¨ªticas que le ha merecido la movida al ser antit¨¦cnica y con un evidente doble racero frente a actuaciones similares de otros organizadores del gasto p¨²blico, pueda suceder lo mismo en este episodio¡±, apunta el analista Sergio Guzm¨¢n, director de la consultora Colombia Risk Analysis. ¡°Esto no le sirve a la reputaci¨®n p¨²blica de la Fiscal¨ªa o la del aparato judicial en general, que ha venido erosionando su credibilidad por sus actuaciones contra pol¨ªticos de alto perfil y su falta de acci¨®n en otros casos¡±, advierte.
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