Michel Barnier: ¡°Est¨¢ en duda que podamos fiarnos de los brit¨¢nicos¡±

Durante 1.600 d¨ªas, Michel Barnier (La Tronche, 70 a?os) fue el encargado de sentarse en la mesa con el Reino Unido para defender los intereses de la Uni¨®n Europea en las negociaciones para el Brexit. Hubo momentos cr¨ªticos, en los que las conversaciones parec¨ªan abocadas al fracaso, como cuenta en su libro La gran ilusi¨®n. Diario secreto del Brexit (2016-2020). Meses despu¨¦s, sigue sin ver ¡°el valor a?adido¡± al Brexit y cree que ¡°la ideolog¨ªa o la ret¨®rica han triunfado sobre el pragmatismo¡±. En un hotel de Madrid, donde Barnier recibe a EL PA?S antes de dar una conferencia, advierte a Bruselas de que debe ¡°escuchar y responder¡± al descontento social en algunos ¨¢mbitos o ¡°habr¨¢ otros Brexit¡±. El exministro y excomisario europeo aborda tambi¨¦n su vuelta a la pol¨ªtica francesa con la intenci¨®n de ser nombrado candidato de Los Republicanos, de centroderecha, para ser el pr¨®ximo presidente de la rep¨²blica.

Pregunta. Cuando ve las colas en las gasolineras y las estanter¨ªas vac¨ªas en el Reino Unido, ?qu¨¦ le viene a la cabeza?

Respuesta. Acabo de estar en Londres y la situaci¨®n es muy complicada. No es solo por el Brexit, es tambi¨¦n por el aumento del precio del petr¨®leo, la covid, la crisis de las materias primas. Pero es tambi¨¦n el Brexit. Me reafirmo en que la salida del Reino Unido de la UE no tiene valor a?adido. Todav¨ªa no entiendo el inter¨¦s econ¨®mico del Reino Unido en abandonar el mercado ¨²nico, que era tan importante para ellos. Que fue el motivo de su adhesi¨®n en 1973. Lamento esta situaci¨®n, pero es la elecci¨®n democr¨¢tica y soberana de la mayor¨ªa de los brit¨¢nicos.

P. ?Ha habido imprevisi¨®n del lado brit¨¢nico despu¨¦s de cuatro a?os de negociaciones?

R. En mi primera conferencia de prensa en Bruselas en 2016, dije que las consecuencias del Brexit son innumerables: sociales, econ¨®micas, t¨¦cnicas, financieras, pol¨ªticas, jur¨ªdicas y humanas. Y que ten¨ªamos que prepararnos. Durante cuatro a?os, en el lado europeo, hemos producido un centenar de documentos para informar a las empresas. Me he reunido en cada pa¨ªs con los sindicatos y la patronal, para que todo el mundo estuviera preparado. No creo que el lado brit¨¢nico haya trabajado de la misma manera. Estaba la idea de que el Brexit era lo importante y hab¨ªa que ejecutarlo. Y que las consecuencias eran menos importantes.

P. Adem¨¢s de las que hemos visto estas semanas, ?qu¨¦ otras consecuencias le esperan al Reino Unido?

R. Muchas barreras arancelarias, porque tenemos que controlar los productos que entran en el mercado ¨²nico. Verificar la seguridad sanitaria y alimentaria; posiblemente tasas, si se trata de productos que vienen a trav¨¦s del Reino Unido desde China. Los servicios financieros brit¨¢nicos han perdido el pasaporte europeo. Ya no existe el reconocimiento mutuo autom¨¢tico de profesiones y cualificaciones profesionales. Los brit¨¢nicos pod¨ªan haber salido de la UE sin dejar de permanecer en el mercado ¨²nico, como Noruega. Est¨¢bamos abiertos. Tambi¨¦n pod¨ªan haberse quedado en la uni¨®n aduanera, pero esta ha sido su elecci¨®n. Tengo la sensaci¨®n de que la ideolog¨ªa o la ret¨®rica han triunfado sobre el pragmatismo.

P. En la nueva relaci¨®n entre la UE y Londres, ?cu¨¢les son los aspectos m¨¢s dif¨ªciles?

R. Una de las cuestiones que m¨¢s me preocupaban durante la negociaci¨®n era preservar la cooperaci¨®n a medio y largo plazo. Tenemos muchos desaf¨ªos ante nosotros: otras pandemias, lamentablemente; el terrorismo; la pobreza en ?frica y las grandes migraciones que provocar¨¢; el cambio clim¨¢tico, etc¨¦tera. Todo esto requiere la cooperaci¨®n entre el Reino Unido y la UE. Para cooperar necesitamos un marco legal. Pero una vez que tienes ese marco legal, tambi¨¦n hace falta confianza. Y ese es el problema hoy. Existen dudas sobre la confianza que podemos tener en los brit¨¢nicos, porque no respetan lo firmado en cuestiones pesqueras y en el protocolo de Irlanda, y quieren dar marcha atr¨¢s. Eso es grave. Y mina la confianza.

P. Durante las negociaciones, ?se fiaba de la contraparte brit¨¢nica?

R. Tuve un momento de grandes dudas. Cuando quisieron cuestionar el protocolo sobre Irlanda del Norte con una norma unilateral llamada ley de mercado interior. Se generaron muchas emociones, muchas dudas, y yo, en ese momento, perd¨ª la confianza.

P. El Reino Unido amenaza con una soluci¨®n no pactada para Gibraltar tras rechazar el mandato de la Comisi¨®n para negociar. ?Cree que van en serio?

R. Hay que tener cuidado porque Londres parece querer utilizar m¨¦todos que ni siquiera son diplom¨¢ticos, y no siempre son los correctos. Ser¨¢ necesario que los otros 26 Estados miembros sean solidarios con Espa?a. Espero que se pueda iniciar un debate constructivo en el marco del mandato y de acuerdo con el Gobierno espa?ol.

P. ?Qu¨¦ lecciones debe sacar la UE del Brexit?

R. Que la unidad es posible y hay que usarla para proyectos positivos, como para salir de la crisis de la covid, el plan de recuperaci¨®n, nuevas ambiciones industriales y agr¨ªcolas, la cooperaci¨®n en defensa y una gesti¨®n exterior seria y rigurosa de las fronteras. La segunda lecci¨®n, m¨¢s all¨¢ de las razones muy brit¨¢nicas del Brexit ¡ªel populismo o que algunas personas en la City quer¨ªan liberarse de las reglas europeas¡ª es que hay razones que se pueden encontrar en muchas otras regiones de Europa, no solo en el Reino Unido. Existe cierto enfado social, el sentimiento de que Europa no protege, la desindustrializaci¨®n y la inmigraci¨®n que no est¨¢ bajo control. Hay que tener cuidado, hay que escuchar, entender y responder. Si Bruselas no entiende que hay que cambiar ciertas cosas, habr¨¢ otros Brexit.

P. Usted ha dado los primeros pasos para ser el candidato a la Presidencia por su partido, Los Republicanos, en Francia. ?Qu¨¦ ofrece como contrapeso a la extrema derecha?

R. La extrema derecha es fuerte cuando otros son d¨¦biles. As¨ª que tenemos que dar respuestas a los problemas que tienen los franceses. Si nos ocupamos de esos temas que preocupan a la ciudadan¨ªa, el populismo de extrema derecha no tiene la oportunidad de utilizar el descontento del pueblo.

P. Usted ha propuesto una moratoria para frenar las llegadas migratorias, un refer¨¦ndum sobre ese asunto y reivindica la soberan¨ªa francesa frente a la justicia europea en ese ¨¢mbito.

R. Es un debate que est¨¢ abierto en Francia. Esta semana el ex primer ministro socialista Manuel Valls dijo exactamente lo mismo. Hay temas sobre los que estamos sujetos a la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la UE o al Convenio Europeo de Derechos Humanos, porque no tenemos nada en la Constituci¨®n sobre la cuesti¨®n.

P. Hay quien ha visto en esa propuesta sobre la soberan¨ªa legal una puerta para que otros reclamen lo mismo en esa o en otras ¨¢reas.

R. Nadie me puede dar lecciones sobre compromiso europeo. La pol¨ªtica migratoria es compartida entre los Estados miembros y la Uni¨®n Europea. Debemos tener una Constituci¨®n que nos d¨¦ la capacidad de tomar medidas nacionales en determinadas ¨¢reas. Por ejemplo, limitar la reunificaci¨®n familiar. De lo contrario habr¨¢ una gran divisi¨®n en la sociedad francesa.

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