Maduro ensaya el espejismo de una ¡®perestroika¡¯
El Gobierno venezolano adelanta una apertura frente a la sociedad civil y el mundo econ¨®mico para recuperar autoridad interna, aliviar la presi¨®n y debilitar a¨²n m¨¢s la influencia de la oposici¨®n
Hace pocos d¨ªas, en un inusual gesto, Nicol¨¢s Maduro recibi¨® en el Palacio de Miraflores a representantes del Foro C¨ªvico, una plataforma de organizaciones de la oposici¨®n venezolana en la cual estaban incluidos importantes miembros de sociedad civil que le cuestiona. En el encuentro, sus representantes, activistas de Derechos Humanos, acad¨¦micos, sindicalistas y empresarios, todos de l¨ªnea moderada, hicieron solicitudes para la recomposici¨®n institucional del pa¨ªs. Entre ellas estaban incluidas proposiciones para el nombramiento del nuevo Tribunal Supremo de Justicia y reclamos sobre los m¨²ltiples trastornos de los mecanismos republicanos de la naci¨®n.
Acompa?ado de su esposa, Cilia Flores, y de Jorge Rodr¨ªguez, presidente de la Asamblea Nacional, Nicol¨¢s Maduro tomaba nota de las observaciones. ¡°Hemos decidido reactivar el di¨¢logo nacional con todos los sectores pol¨ªticos, culturales, sociales. El di¨¢logo de M¨¦xico recibi¨® un duro golpe, pero si estamos pidiendo di¨¢logo para el mundo tenemos que dar el ejemplo. Vamos a un di¨¢logo m¨¢s amplio e inclusivo en el pa¨ªs¡±, dijo Maduro.
Para el 21 de abril el Gobierno se dispone a instalar el Foro de Di¨¢logo Social, con presencia de miembros de la Organizaci¨®n Internacional del Trabajo, una mesa de intercambio con sindicatos y empresarios cercanos a su causa, as¨ª como tambi¨¦n miembros de la patronal empresarial Fedec¨¢maras, tradicional bestia negra de la narrativa chavista.
Asediado desde todos los frentes hace unos tres a?os, desconocido por parte importante de la sociedad venezolana durante muchos meses, sancionado internacionalmente, Maduro inicia una ofensiva para adelantar una apertura pol¨ªtica ¡ªque tambi¨¦n es econ¨®mica¡ª que le permita recuperar autoridad ante sus adversarios y conjurar definitivamente los intentos por sacarlo del poder.
Mientras lo hace, Maduro tiene frente a s¨ª a un frente pol¨ªtico opositor disperso y debilitado, con diferencias casi irreconciliables entre sus facciones y lastimada su autoridad frente a su militancia. En este bordado, Maduro parece intentar ponerle l¨ªmites pol¨ªticos a la existencia de sus adversarios, y sigue llenando el expediente de Juan Guaid¨®, amenaz¨¢ndolo peri¨®dicamente con llevarlo a la c¨¢rcel junto a ¡°sus c¨®mplices¡±.
El ¡°punto muerto¡± en el cual se encuentran las negociaciones con la oposici¨®n en M¨¦xico despu¨¦s de la captura del empresario Alex Saab ha permitido a Miraflores abrir frentes de conversaci¨®n con sectores sociales diversos con el objeto de descomprimir el discurso que le asedia y debilitar a¨²n m¨¢s la influencia de los partidos opositores, en un contexto de una recuperaci¨®n econ¨®mica y ante una sociedad sedienta de soluciones. Mientras, la Administraci¨®n dem¨®crata de Joe Biden abandona el tono intransigente de sus predecesores frente a Venezuela.
El r¨¦gimen chavista ha permitido el asentamiento de una Oficina de la Corte Penal Internacional en Caracas ¡ª instancia en la cual se investiga a la administraci¨®n de Maduro por acusaciones de Cr¨ªmenes de Lesa Humanidad ¡ª y ha dado continuidad a las conversaciones con autoridades estadounidenses para procurar el otorgamiento de licencias en los campos petroleros venezolanos.
Mientras tanto, las relaciones con la patronal Fedec¨¢maras se encuentran en un momento particularmente ¨®ptimo, con cruces mutuos de recomendaciones y par¨¢metros de coexistencia acordados. El empresariado ha aprovechado la zanja para hacerle ver a los hermanos Jorge y Delcy Rodr¨ªguez, dos de los dirigentes chavistas que comandan esta estrategia, sobre la inconveniencia en los constantes cambios de tono de Maduro con los capitales y las potenciales dificultades para aumentar la inversi¨®n privada en el pa¨ªs sin seguridad jur¨ªdica.
La decisi¨®n sobre la devoluci¨®n de activos expropiados al sector privado tender¨¢ a profundizarse. Un alto funcionario del chavismo, consciente de las resistencias internas ante la medida, ha comentado en una conversaci¨®n privada que ¡°si fuera por m¨ª, devolver¨ªa todas las empresas¡±.
Para Jes¨²s Chuo Gonz¨¢lez, polit¨®logo de la Universidad Central de Venezuela, la medida del chavismo expresa un fracaso. ¡°Hay un giro, una transici¨®n econ¨®mica en marcha, porque han colapsado los mecanismos tradicionales de la revoluci¨®n bolivariana en su relaci¨®n con el pa¨ªs a partir de 2018. Esta pol¨ªtica llena un vac¨ªo. Luego de negarse a hacerlo, el madurismo ha ejecutado un ajuste econ¨®mico sanguinario. Adem¨¢s, las expectativas de cambio que promov¨ªa Juan Guaid¨® han sido frustradas y las cosas cambiaron. Hay que reinterpretar esta realidad.¡± Para Gonz¨¢lez, todos los caminos pol¨ªticos existentes conducen a una hipot¨¦tica consulta electoral en 2024.
Los estudios de opini¨®n recogen que la poblaci¨®n parece centrada en mejorar su vida econ¨®mica cotidiana como una prioridad y se desinteresa de la pol¨ªtica. Los empresarios agroindustriales m¨¢s enemistados con el Gobierno han atendido el llamado para la devoluci¨®n de propiedades.
¡°Abrirse pol¨ªticamente es para el Gobierno de Maduro una necesidad¡±, sostiene el tambi¨¦n analista pol¨ªtico y experto electoral Andr¨¦s Caleca. ¡°Maduro busca consolidar las divisiones en el frente opositor. Algunos opositores han sido comprados con la corrupci¨®n; la mayor¨ªa ha sido ferozmente reprimida e inhabilitada pol¨ªticamente, con otros puedes tratar de entenderte ofreciendo opciones.¡±
Caleca no descarta que toda esta operaci¨®n sea temporal y que Maduro sea perfectamente capaz de volver a la ortodoxia chavista en sus procedimientos de nacionalizaciones y expropiaciones si logra retener el poder m¨¢s all¨¢ de 2024. ¡°Pienso que en este intento de apertura puede estar contando la opini¨®n de Cilia Flores, su esposa, que aparece poco pero es una figura fundamental en el gobierno, y en las Fuerzas Armadas, que constantemente hacen evaluaciones pol¨ªticas de lo que sucede.¡±
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