Putin, Xi y la primavera ¡®horribilis¡¯ de los reg¨ªmenes autoritarios
Los rivales de las democracias liberales suelen presumir de una supuesta mayor eficacia de sus sistemas. Ahora afrontan descalabros que evidencian los fallos de sus modelos
El siglo XXI ha sido hasta ahora una ¨¦poca regresiva para la democracia en el mundo. Tras el florecimiento posterior a la ca¨ªda del Muro de Berl¨ªn, las ¨²ltimas dos d¨¦cadas han registrado din¨¢micas de deterioro de muchas democracias y una considerable consolidaci¨®n de tantos reg¨ªmenes autoritarios. El pasado d¨ªa 24 de febrero, d¨ªa de inicio de la invasi¨®n de Ucrania por parte de las fuerzas rusas, la organizaci¨®n Freedom House public¨® su informe anual bajo el t¨ªtulo de La expansi¨®n global del gobierno autoritario, en el que se alertaba de que este tipo de sistemas ya desaf¨ªan a la democracia como modelo dominante. Desde entonces, sin embargo, graves reveses se acumulan en el campo autoritario.
La ofensiva contra Ucrania est¨¢ causando grav¨ªsimas p¨¦rdidas a Rusia en t¨¦rminos militares y econ¨®micos; China se halla muy afectada por rebrotes pand¨¦micos; Turqu¨ªa alcanz¨® en abril una tasa de inflaci¨®n del 70%; Cuba se desangra en un elocuente ¨¦xodo migratorio, con 115.000 ciudadanos que entraron de forma irregular en EE UU en siete meses; y aunque no hay mucha informaci¨®n clara disponible, todo apunta a que Corea del Norte afronta una situaci¨®n catastr¨®fica por la covid.
Por supuesto se pueden encontrar desarrollos positivos en estos meses en otros de los muchos reg¨ªmenes autoritarios o de las democracias amputadas que gobiernan en el mundo. Pero es significativo que serias tribulaciones afecten a varios de los pa¨ªses m¨¢s representativos del amplio panorama de los Estados no plenamente democr¨¢ticos.
Por supuesto, tambi¨¦n, cada uno sufre circunstancias de distinta naturaleza, como diferentes son el vigor y los modelos de gobierno de estos pa¨ªses. Pero en todos esos casos hay cuando menos indicios de un com¨²n denominador: los problemas vinculados a los procesos decisionales en sistemas desprovistos de libertad plena.
Muchas democracias sufren disfunciones que las convierten en sistemas litigiosos, polarizados, casi paralizados. En los ¨²ltimos a?os los reg¨ªmenes autoritarios han subrayado esas disfunciones, y esgrimido su presunta eficacia para afianzar su legitimidad. China y Rusia han verbalizado la idea de que la esencia democr¨¢tica reside m¨¢s en el servicio prestado a la ciudadan¨ªa que no en las instituciones liberales y ciertos mecanismos de representaci¨®n.
Al margen del juicio de valor sobre esa interpretaci¨®n materialista del concepto de democracia, los acontecimientos de los ¨²ltimos meses cuestionan el mantra de la eficacia. No borran las disfunciones de las democracias liberales, ni tampoco representan de por s¨ª una inversi¨®n de la tendencia hist¨®rica que destaca el informe de Freedom House, pero como m¨ªnimo ponen bajo los focos las debilidades propias de las gestiones autoritarias. Sustancialmente, unos mecanismos de toma de decisi¨®n lastrados por falta de pluralismo, miedo a hablar incluso dentro del sistema, endogamia, dogmatismo, eternizaci¨®n de liderazgos.
¡°En lo que va de siglo, las democracias han sufrido, primero en t¨¦rminos geopol¨ªticos con lo relacionado a la invasi¨®n de Irak, despu¨¦s con la crisis econ¨®mica de 2008, la incapacidad de controlar las finanzas¡±, comenta Vanni Pettin¨¤, profesor de Historia Internacional en El Colegio de M¨¦xico. ¡°Ahora asistimos a un momento en el que parecen recolocarse las cosas, reemerger el valor de ciertos aspectos de las democracias y evidenciarse los problemas de los reg¨ªmenes. Una suerte de revancha en la que se nota que, en los sistemas autoritarios, con todos los matices ligados a sus diferentes naturalezas, hay procesos decisionales distorsionados, en el que a veces no prima el inter¨¦s colectivo, y en los que casi siempre es muy dif¨ªcil revertir los errores. Las democracias son m¨¢s lentas, pero en esa lentitud hay una dial¨¦ctica que permite contemplar mejor la complejidad. Y son m¨¢s flexibles para corregir¡±, considera Pettin¨¤.
A continuaci¨®n, una mirada sobre algunas de las tribulaciones actuales que afectan a varios t¨®tems del mundo autoritario o no plenamente democr¨¢tico.
Rusia
La invasi¨®n de Ucrania lanzada por el Kremlin en febrero es un episodio b¨¦lico todav¨ªa en desarrollo. El tiempo dir¨¢ cu¨¢l ser¨¢ su resultado. Sin embargo, de momento, es evidente que est¨¢ acarreando para Rusia un enorme coste en t¨¦rminos militares, econ¨®micos, y geopol¨ªticos.
Las perdidas en el campo de batalla son dif¨ªciles de cuantificar objetivamente, pero resultan sin duda ingentes. En el frente econ¨®mico, las sanciones de Occidente no han provocado un colapso total, pero el da?o es grave. Las autoridades rusas prev¨¦n una contracci¨®n del PIB de casi ocho puntos este a?o y una inflaci¨®n del 17%. La fuga de cerebros pasar¨¢ factura ¡ªentre 50.000 y 70.000 inform¨¢ticos se marcharon tan solo en las primeras 4 semanas, seg¨²n un reporte de una asociaci¨®n del sector¡ª. Los ingresos energ¨¦ticos son altos, pero es probable que acaben vi¨¦ndose afectados por la paulatina, aunque dificultosa, desconexi¨®n occidental. El nivel de importaciones ha colapsado, no solo desde pa¨ªses que imponen sanciones, sino incluso de otros, lo que evidencia una muy problem¨¢tica senda de aislamiento que impedir¨¢ a la econom¨ªa rusa funcionar con normalidad.
Todo esto es el resultado de decisiones alumbradas en una l¨®gica de poder con graves distorsiones. ¡°Una l¨®gica presente en la cultura sovi¨¦tica y en la de la Rusia actual, por la que el dirigente debe ser a la vez un hombre fuerte y temido y que obviamente representa una gran debilidad para el sistema¡±, dice Carmen Claud¨ªn, investigadora s¨¦nior asociada de CIDOB y experta en Rusia.
¡°El entorno del gran jefe no se atreve a hablar libremente delante de su superior ni transmite de forma fidedigna toda la informaci¨®n que tiene, que a su vez ha sido filtrada por sus subalternos de acuerdo al criterio de lo que presuntamente m¨¢s le puede agradar o¨ªr al superior¡±, prosigue la analista, que menciona la tremenda escena del Consejo de Seguridad de Rusia en v¨ªsperas de la guerra, en la que Putin humill¨® ante las c¨¢maras a Sergu¨¦i Naryshkin, el jefe del servicio de inteligencia exterior.
¡°Eso lo explica todo. Si pasa eso con una figura de tanto relieve, si esa persona no puede contener el miedo delante de las c¨¢maras, ?c¨®mo los dem¨¢s por debajo van a atreverse a decir algo que no guste? Es evidente que lo ocurrido en Ucrania es la consecuencia nefasta de cierta l¨®gica en la toma de decisiones. En estas circunstancias, las decisiones tomadas, la estrategia dise?ada, est¨¢n debilitadas, invalidadas de ra¨ªz, porque se apoyan en una serie de datos e informaciones que poco a nada tienen a que ver con la realidad¡±, concluye Claud¨ªn.
China
El gigante asi¨¢tico se halla afrontando un claro momento de dificultad. El r¨¦gimen de Pek¨ªn ha seguido manteni¨¦ndose pegado a su pol¨ªtica de covid cero ante la insurgencia de nuevos brotes pand¨¦micos con caracter¨ªsticas de mucha mayor contagiosidad que las primeras variantes, que logr¨® contener exitosamente limitando los da?os mucho mejor que las democracias occidentales. Pero la misma pol¨ªtica aplicada a las nuevas circunstancias es muy cuestionada por muchos expertos ¡ªincluida la OMS, que la ha calificado de ¡°insostenible¡±¡ª.
La consecuencia son dur¨ªsimos encierros que est¨¢n afectando a decenas de millones de ciudadanos y provocando un considerable frenazo de la econom¨ªa. Las ventas al por menor, importante indicador del consumo, fueron el pasado abril un 11% inferiores a las del mismo mes del a?o anterior. Los datos de compraventa inmobiliaria son p¨¦simos, una ca¨ªda del 40% con respecto al a?o anterior ¡ªun retroceso superior al que se produjo en el estallido inicial de la pandemia¡ª lo que ha inducido a un considerable reajuste de los tipos de referencia de las hipotecas.
Esta coyuntura permite interesantes reflexiones sobre el modelo de gobierno de China bajo el liderazgo de Xi Jinping. Sarah Cook, directora de investigaci¨®n para China de Freedom House, se?ala dos elementos de an¨¢lisis. Por un lado, la experta destaca que ¡°la incapacidad del Partido Comunista Chino para admitir un error tiene claramente un papel en esta situaci¨®n. Ellos han vinculado tanto de su legitimidad ¡ªy de la reputaci¨®n del propio Xi Jinping¡ª a la pol¨ªtica de covid cero que con el cambio de condiciones sienten que no pueden cambiar de pol¨ªticas. Este tipo de r¨ªgida din¨¢mica de ¡®no se puede dar marcha atr¨¢s¡¯ es evidente en otras pol¨ªticas y posiciones que, si cambiadas, pudieran de hecho mejorar la legitimidad del r¨¦gimen ante mucha o parte de la opini¨®n. Pero ellos han dedicado tanto de su esfuerzo a justificar la pol¨ªtica o la posici¨®n, que sienten que simplemente no pueden dar marcha atr¨¢s sin propinar un gran golpe a su control del poder¡±.
Por el otro, Cook se?ala el factor de ¡°la concentraci¨®n de poder en la figura de Xi y el tipo de ¡®culto de la personalidad¡¯ que ha creado. Tiene en sus manos muchas m¨¢s ¨¢reas pol¨ªticas que l¨ªderes anteriores y es menos colectivo en el proceso decisional. Adem¨¢s, ha tomado una l¨ªnea mucho m¨¢s dura en la supresi¨®n del disenso dentro del PCCh. El resultado es que, para expertos y para aquellos que quiz¨¢s apoyan el r¨¦gimen pero quieren ayudarle a gobernar mejor, es m¨¢s dif¨ªcil hacerse escuchar¡±.
En este contexto, resulta relevante se?alar la menor eficacia de las vacunas chinas, la reluctancia de Pek¨ªn a aceptar las versiones ARN occidentales y el amplio n¨²mero de mayores de 60 a?os sin pauta completa. Estos problemas y las circunstancias actuales no equiparan a China al nivel de impacto sanitario y econ¨®mico sufrido por la mayor¨ªa de pa¨ªses occidentales, pero pone en evidencia deficiencias muy alejadas de la trompeteada eficiencia.
Turqu¨ªa
Turqu¨ªa sufre graves turbulencias vinculadas a una inflaci¨®n que roza el 70% en base interanual. En el caso de alimentos, se sit¨²a en un 90%. La historia ense?a la peligrosidad de espirales inflacionistas descontroladas.
En este caso tambi¨¦n, la coyuntura de crisis va estrechamente vinculada a cuestionables aspectos del modelo de Gobierno del pa¨ªs, en concreto indicios de nepotismo y extralimitaci¨®n del presidente, Recep Tayyip Erdogan. Problemas vinculados a la divisa y a la inflaci¨®n no son nuevos en Turqu¨ªa, y Erdogan ha tomado decisiones y posicionamientos pol¨¦micos. Nombr¨® ministro de Finanzas a su yerno ¡ªque luego dimiti¨® en noviembre de 2020¡ª y presion¨® de forma clar¨ªsima al Banco Central ¡ªentre otras cosas destituyendo a un gobernador que se le resist¨ªa¡ª para que mantuviera tipo bajos en medio de una inflaci¨®n inquietante.
Francisco Veiga, catedr¨¢tico de Historia Contempor¨¢nea en la Universidad Aut¨®noma de Barcelona y especialista en Europa Sudoriental y Turqu¨ªa, se?ala algunos interesantes rasgos definitorios del sistema erdoganista. ¡°Con Erdogan, toma el poder la clase media musulmana de Anatolia Central y se produce una marginaci¨®n de los kemalistas laicos. Las nuevas clases llegadas al poder han ido afianz¨¢ndose en la estructura social, y en gran medida se han apoyado en procesos de selecci¨®n nepotistas, endog¨¢micos. Esto vale tanto para las altas esferas como a nivel de peque?os alcaldes. La base del poder de Erdogan reside en una distorsi¨®n de ciertos elementos sociopol¨ªticos que son propios de la cuenca mediterr¨¢nea y que aqu¨ª conocemos como caciquismo. Por supuesto esto lleva a tomas de decisiones abusivas¡±
Cuba
Cuba se ve afectada por la en¨¦sima hemorragia demogr¨¢fica, con 115.000 ciudadanos que entraron de forma irregular en EE UU en siete meses, casi un 1% del total de la poblaci¨®n (equivalente a que se marcharan de Espa?a unas 400.000 personas) y en gran medida j¨®venes.
El ¨¦xodo es ¡°obviamente el fruto de toda una serie de decisiones econ¨®micas equivocadas¡±, comenta Pettin¨¤, que es especialista en el ¨¢rea latinoamericana. ¡°Lo interesante es reflexionar sobre el porqu¨¦ de esas decisiones. Y probablemente el motivo es que se han considerado opt¨ªmas para el sistema pol¨ªtico. El r¨¦gimen teme que abrir mucho la econom¨ªa cree n¨²cleos de sociedad m¨¢s aut¨®nomos con respecto al Estado y que eso a medio plazo pueda representar un desaf¨ªo. Perciben una disyuntiva entre eficiencia econ¨®mica y supervivencia del modelo pol¨ªtico¡±.
Esta semana Cuba ha recibido una buena noticia con el alivio de algunas de las medidas sancionatorias de EE UU. Sin embargo, ni el camino de la relaci¨®n bilateral ¡ªel viernes Washington volvi¨® a colocar a Cuba en la lista de pa¨ªses que no cooperan completamente contra el terrorismo¡ª ni esa es la soluci¨®n definitiva a males que tienen en enorme medida ra¨ªces internas. Mientras, el sufrimiento, y el ¨¦xodo, siguen.
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