El Tribunal Electoral de Guatemala denuncia un atropello de un sector judicial y pide protecci¨®n constitucional

Las maniobras por sacar de la carrera electoral en Guatemala al Movimiento Semilla, el partido que rompi¨® el tablero electoral y ha colocado en segunda vuelta al soci¨®logo progresista Bernardo Ar¨¦valo, tienen al pa¨ªs centroamericano al borde de la ruptura democr¨¢tica. Dos altos funcionarios del Tribunal Electoral han sido criminalizados por rechazar la orden de un juez, cuestionada por abusiva e improcedente seg¨²n el propio Constitucional, con la que se persigue inhabilitar a la agrupaci¨®n pol¨ªtica que propone ¡°poner fin a los gobiernos corruptos de los ¨²ltimos 20 a?os¡±. Contra ellos pende una orden de captura al igual que contra dos exmilitantes de la formaci¨®n.

Adem¨¢s de ese intento de cancelaci¨®n de la candidatura, el Movimiento Semilla se enfrenta a una investigaci¨®n penal, impulsada por una fiscal¨ªa que criminaliza opositores y antiguos funcionarios anticorrupci¨®n, que los dirigentes del partido consideran ¡°maliciosa¡±, ¡°selectiva¡± e ¡°intimidatoria¡±. La sede del partido fue allanada este viernes y horas antes de este operativo, en la madrugada del 21 de julio, el Tribunal Supremo Electoral present¨® un amparo para que la Corte de Constitucionalidad les proteja ¡°ante la amenaza cierta, futura e inminente¡± de que las instituciones estatales que dirigen investigaciones ¡°vulneren el Estado Democr¨¢tico de Derecho y que se garantice el ejercicio de las funciones del tribunal¡±.

As¨ª, se pide a la corte que sea el ¨¢rbitro de ¨²ltima instancia en el proceso electoral m¨¢s atropellado y m¨¢s observado de la historia democr¨¢tica de Guatemala. El Tribunal ha pedido que la corte dicte protecci¨®n frente a las acciones de otras ocho entidades del Estado, como el ministerio de Gobernaci¨®n; la Corte Suprema; la Fiscal General y el Ministerio P¨²blico, que intervienen en las presiones para que sus funcionarios cancelen al Movimiento Semilla, una orden que no se puede ejecutar, seg¨²n ha reafirmado la Corte de Constitucionalidad mediante un comunicado divulgado la ma?ana del viernes.

Pese al amparo que la sala constitucional otorg¨® al Movimiento Semilla el 13 de julio, el juez Fredy Orellana y el fiscal Rafael Curruchiche insisten en la cancelaci¨®n del partido y han arremetido contra los dos funcionarios electorales que se han negado a acatar una orden ilegal que pretende anular al partido de Ar¨¦valo. Curruchiche se ha negado a ofrecer una conferencia de presa para rendir cuentas sobre las acciones contra el partido que va a segunda vuelta.

Con su propuesta de ¡°construir una nueva primavera para Guatemala¡±, el Movimiento Semilla desarm¨® los pron¨®sticos que lo situaban en los ¨²ltimos lugares de la preferencia de los votantes y se gan¨® el voto del 12% de los 5,5 millones de ciudadanos que acudieron a las urnas el 25 de junio. Su candidato a la presidencia, Bernardo Ar¨¦valo, se propone rescatar al pa¨ªs del autoritarismo que ha empujado la criminalizaci¨®n de decenas de opositores, m¨¢s de cien en el exilio y otros muchos encarcelados. La opci¨®n m¨¢s votada en primera vuelta fue el voto nulo, que canaliz¨® el descontento hacia las propuestas pol¨ªticas y el segundo para la exprimera dama Sandra Torres, la candidata de la Unidad Nacional de la Esperanza que hoy busca atraer el voto de los sectores conservadores.

El avance de Semilla ha inspirado esperanza en la poblaci¨®n que durante varios d¨ªas ha salido a las calles para defender su voto y pedir la renuncia de la fiscal General Consuelo Porras y el fiscal Curruchiche, entre otros actores que, seg¨²n varios analistas, tratan de entorpecer una posibilidad de cambio en Guatemala, como se observ¨® en la exclusi¨®n de tres candidaturas presidenciales y ahora con las presiones hacia los funcionarios electorales que se niegan a obedecer la orden ilegal para cancelar al partido de Ar¨¦valo.

¡°El abuso del sistema penal¡±, que es como el analista Marco Canteo llama a los esfuerzos para intimidar a funcionarios y al partido de Ar¨¦valo, alcanz¨® su apogeo este jueves, cuando el juez Orellana gir¨® orden de captura contra Eleonora Castillo, la directora del Registro de Ciudadanos interina que rechaz¨® cancelar al Movimiento Semilla. Castillo goza de inmunidad porque est¨¢ en funciones del despacho que ha dejado temporalmente el registrador Ramiro Mu?oz, que sali¨® del pa¨ªs y est¨¢ bajo investigaci¨®n, como ella por no acatar la orden. En una semana, el Ministerio P¨²blico ha allanado dos veces las oficinas del tribunal electoral.

La violenta coyuntura desatada por el Ministerio P¨²blico y el juez Fredy Orellana, responsables por la persecuci¨®n contra las autoridades electorales ¡°debe terminar ya¡±, ha reaccionado la organizaci¨®n civil Movimiento Pro Justicia. ¡°Urge certeza y estabilidad, respeto a los principios fundamentales del debido proceso y a la voluntad del pueblo¡±, se?ala uno de sus pronunciamientos. Ar¨¦valo ha repudiado ¡°este acto es parte de la persecuci¨®n pol¨ªtica de la minor¨ªa corrupta que sabe que est¨¢ perdiendo el poder, d¨ªa con d¨ªa¡±. El candidato detuvo por unos minutos su gira en un poblado costero para recordar que ¡°el pueblo es el que decide y no un fiscal corrupto apoyado por un juez corrupto que actuando fuera del marco de la legalidad, ejercen persecuci¨®n pol¨ªtica¡±.

La alternabilidad en el poder

La alternancia en el poder ha sido un tema de debate p¨²blico porque el desplazamiento del Movimiento Semilla le abrir¨ªa espacio al partido Vamos, que qued¨® tercero en la elecci¨®n, con el 7.8 % de los votos. Se trata de la agrupaci¨®n pol¨ªtica del presidente Alejandro Giammattei, quien asegura no se exceder¨¢ en su mandato pero que no se ha pronunciado sobre c¨®mo se pretende capturar a una funcionaria que goza de inmunidad.

En las calles, los ciudadanos les gritan ¡°golpistas¡± a los fiscales y jueces que ejecutan las acciones para desbaratar al partido progresista. En las redes sociales, piden que se castigue, con la remoci¨®n o la c¨¢rcel, a un juez que ha pasado por encima de la ley para dictar ¨®rdenes ilegales, como la persecuci¨®n penal de los funcionarios electorales.

El quiebre constitucional comenz¨® el 12 de julio, cuando el juez penal Fredy Orellana le orden¨® a un organismo de mayor jerarqu¨ªa, el Tribunal Supremo Electoral, cancelar al Movimiento Semilla. Adem¨¢s de la inversi¨®n en los poderes, la disposici¨®n se interpreta como ilegal porque se entromete en las funciones exclusivas del tribunal electoral y porque la norma especializada, de rango constitucional, establece que a un partido pol¨ªtico no se le puede inhabilitar durante un proceso electoral.

La solicitud para cancelar el partido surge en el marco de una investigaci¨®n por adhesiones irregulares que el partido denunci¨® y en la que ahora son sindicados, pero el juez Orellana no les reconoce como parte procesal, explica a ELPA?S el fiscal nacional de Semilla, Juan Guerrero Garnica. Al desconocer su participaci¨®n en la causa penal, ¡°violentan nuestro derecho de defensa, tutela judicial y de acceso a la informaci¨®n¡±, precisa Guerrero. Por este caso ya se ha ordenado la captura de dos exmilitantes del partido mientras la fiscal¨ªa avanza a toda prisa para armar un caso por delitos contra la delincuencia organizada, como asociaci¨®n il¨ªcita y lavado de dinero.

Este viernes, la fiscal¨ªa allan¨® la sede del Movimiento Semilla en la capital guatemalteca, un claro ¡°acto de intimidaci¨®n¡±, denunci¨® la abogada del partido y diputada electa Andrea Reyes. ¡°Toda la papeler¨ªa que nos han pedido¡± ya la tiene la fiscal¨ªa y ¡°nos han negado nuestro derecho de defensa¡±, se?al¨® Reyes.

La orden que pretende la inhabilitaci¨®n del Movimiento Semilla lleva la firma de Fredy Orellana, uno de los 10 guatemaltecos incluidos en la lista de actores corruptos y antidemocr¨¢ticos en Centroam¨¦rica que el Departamento de Estado de Estados Unidos ha actualizado este 19 de julio. El caso est¨¢ a cargo del fiscal Rafael Curruchiche, tambi¨¦n designado por EE UU como un actor corrupto y antidemocr¨¢tico, que ha dirigido la criminalizaci¨®n de exoperadores de justicia, defensores de derechos humanos y periodistas, algunos en prisi¨®n y m¨¢s de cien en el exilio.

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