El reconocimiento del Estado palestino, una apuesta con vocaci¨®n de efecto domin¨®

Espa?a, Noruega e Irlanda reconocer¨¢n al Estado palestino el 28 de mayo. Los tres pa¨ªses se han concertado para hacerlo el mismo d¨ªa y anunciarlo, simult¨¢neamente, el pasado mi¨¦rcoles. Se les ha reprochado que se trata de un ¡°gesto simb¨®lico¡± y lo es: Madrid fue sede de la Conferencia de Oriente Pr¨®ximo de 1991 y Oslo de los acuerdos de paz de 1993. ¡°El reconocimiento del Estado palestino no va a poner fin a la matanza de Gaza, pero si a [Benjam¨ªn] Netanyahu le ha disgustado y [Mahmud] Abbas lo ha aplaudido, alg¨²n valor tendr¨¢¡±, alegan fuentes diplom¨¢ticas espa?olas.

El Gobierno israel¨ª reaccion¨® el mismo mi¨¦rcoles llamando a consultas a sus embajadores en Espa?a, Noruega e Irlanda y convocando a los representes diplom¨¢ticos de los tres pa¨ªses en Tel Aviv para darles una ¡°severa reprimenda¡± y exhibirles una grabaci¨®n del secuestro de cinco j¨®venes mujeres militares por parte de Ham¨¢s el pasado el 7 de octubre. El primer ministro israel¨ª, Benjam¨ªn Netanyahu, declar¨® que el reconocimiento de Palestina es ¡°una recompensa al terrorismo¡± y que ¡°al mal no se le puede dar un Estado¡±; mientras, el presidente palestino, Mahmud Abbas, llamaba a Pedro S¨¢nchez para agradecerle la decisi¨®n.

Lo que preocupa a Netanyahu es que cunda el ejemplo. A ¡°Israel le da un poco igual si Espa?a reconoce o no a Palestina, pero si otros pa¨ªses se suman a esta iniciativa, podr¨ªa abrirse una grieta en el escudo de impunidad del que ese pa¨ªs goza en Europa¡±, analiza Isa¨ªas Barre?ada, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad Complutense. Por eso, el viernes, el Gobierno israel¨ª tom¨® una nueva represalia: impedir al Consulado espa?ol en Jerusal¨¦n (embajada de facto ante el nuevo Estado) que preste servicios a los palestinos. La v¨ªspera hab¨ªa amenazado con construir un asentamiento por cada pa¨ªs que d¨¦ ese paso. Si en 2014, cuando Suecia reconoci¨® al Estado palestino, nadie le sigui¨®, ahora puede ser muy diferente. Ya son 143 los pa¨ªses que lo han hecho y el martes llegar¨¢n a 146, el 75% de los miembros de Naciones Unidas. Y habr¨¢ m¨¢s.

¡°Espa?a estar¨¢ acompa?ada. Esperamos no ser los ¨²ltimos, que nuestro reconocimiento contribuya a que otros pa¨ªses occidentales sigan este camino¡±, afirm¨® el presidente S¨¢nchez el pasado mi¨¦rcoles en el Congreso.

A los tres reconocimientos del 28 de mayo se sumar¨¢ el 13 de junio Eslovenia, una vez haya completado su procedimiento interno. Fuentes conocedoras de las conversaciones que ha mantenido S¨¢nchez en los ¨²ltimos meses esperan que le siga Malta, que el 22 de marzo, en los m¨¢rgenes del Consejo Europeo, suscribi¨® una declaraci¨®n en la que se mostraba dispuesta a dar ese paso, junto a Espa?a, Eslovenia e Irlanda.

Los siguientes en la lista, seg¨²n las mismas fuentes, podr¨ªan ser Luxemburgo y B¨¦lgica, cuyo primer ministro, Alexander de Croo, acompa?¨® al presidente espa?ol en su visita a Israel y Palestina, en noviembre pasado, pero luego se baj¨® de la iniciativa ante la inminencia de las elecciones generales en su pa¨ªs, que coinciden con las europeas.

Tambi¨¦n se descolg¨® Portugal, despu¨¦s de que el primer ministro socialista Ant¨®nio Costa fuera sustituido por el conservador Lu¨ªs Montenegro, pero su ministro de Exteriores, Paulo Rangel, asegur¨® el 14 de mayo en Madrid que su pa¨ªs apoya el reconocimiento, aunque prefiere esperar al momento oportuno, para sumar a otros pa¨ªses europeos a¨²n reticentes. Grecia y Francia podr¨ªan completar una lista que superar¨ªa la mitad de los Veintisiete socios de la Uni¨®n, contando a los seis que reconocieron Palestina cuando formaban parte del Pacto de Varsovia y los dos que lo hicieron tras ingresar en el club comunitario, Chipre y Suecia.

La expectativa de ese reconocimiento con efecto domin¨® es precisamente lo que ¡°alimenta la esperanza¡± de los palestinos, subraya por tel¨¦fono desde Ramala la analista Nour Odeh, exportavoz de la Autoridad Palestina. El paso dado por Espa?a, Noruega e Irlanda ¡°rompe un tab¨² en Europa y viene a decirle a la Uni¨®n Europea que sus pol¨ªticas sobre Palestina han sido err¨®neas; que lo que se ha hecho en los ¨²ltimos 30 a?os [desde los acuerdos de paz de Oslo] equivale a garantizar que, hiciera lo que hiciera Israel, no tendr¨ªa consecuencias¡±.

Condiciones y requisitos

Fuentes diplom¨¢ticas se?alan que el mejor term¨®metro para medir la posici¨®n de cada pa¨ªs es la votaci¨®n de la resoluci¨®n aprobada el pasado d¨ªa 10 por la Asamblea General de la ONU que, adem¨¢s de ampliar las prerrogativas y derechos de la representaci¨®n palestina, aseguraba, en su primer punto, que ¡°el Estado de Palestina cumple las condiciones y requisitos para ser miembro de Naciones Unidas¡±, por lo que ped¨ªa al Consejo de Seguridad que reconsiderara su negativa a admitirlo.

La resoluci¨®n fue aprobada con 142 votos a favor, nueve en contra y 25 abstenciones. Significativamente, los dos miembros de la UE que votaron en contra (Rep¨²blica Checa y Hungr¨ªa) ya reconocieron el Estado palestino cuando estaban en la ¨®rbita sovi¨¦tica. Entre los que se abstuvieron, figuran los m¨¢s remisos a dar este paso, como Alemania, Austria, Pa¨ªses Bajos o Italia. Por el contrario, entre los 14 socios de la UE que votaron a favor hab¨ªa 11 que a¨²n no han reconocido a Palestina. Adem¨¢s de los dos que lo har¨¢n el martes ¨C¡ªNoruega no forma parte de la Uni¨®n¡ª, Portugal, Francia, B¨¦lgica, Dinamarca, Estonia, Luxemburgo, Grecia, Malta y Eslovenia. Fuentes diplom¨¢ticas alegan que, por coherencia con lo que han votado, deber¨ªan reconocer al Estado palestino ¡°m¨¢s pronto que tarde¡±. Naciones Unidas ha reconocido la legitimidad de un posible Estado palestino en sucesivas resoluciones, especialmente la 3236 de 1974 de la Asamblea General, que defin¨ªa como un ¡°derecho inalienable¡± la ¡°libre determinaci¨®n¡± de ese pueblo. Reconocimientos como el de Espa?a ¡°no son un regalo, sino la consagraci¨®n de un derecho¡±, puntualiza la analista Nour Odeh.

Francia es un caso especial, pues tambi¨¦n vot¨® en el Consejo de Seguridad, que es el ¨®rgano decisorio de Naciones Unidas, en favor del ingreso, aunque Estados Unidos impuso su veto. Tras el anuncio que los tres pa¨ªses europeos hicieron el mi¨¦rcoles, el ministro de Exteriores franc¨¦s, St¨¦phane S¨¦journ¨¦, declar¨® que el reconocimiento del Estado palestino ¡°no es tab¨²¡± para su pa¨ªs, aunque no considera llegado el momento de hacerlo. Con la mayor comunidad jud¨ªa de Europa y casi siete millones de musulmanes, el conflicto ¨¢rabe-palestino polariza a la sociedad francesa, donde se han multiplicado los incidentes antisemitas.

Fuera de la UE, tres pa¨ªses tradicionalmente alineados con Estados Unidos ¡ªReino Unido, Canad¨¢ y Australia?¡ª han abierto la puerta en las ¨²ltimas semanas a que el reconocimiento de Palestina no tenga que esperar al final del proceso de paz, sino que pueda anticiparse. Aunque a¨²n est¨¢n lejos de dar ese paso, fuentes diplom¨¢ticas subrayan que algo empieza a moverse incluso en el n¨²cleo de aliados incondicionales de Israel. La dimensi¨®n que ha alcanzado la tragedia de Gaza y la cr¨ªtica de los pa¨ªses del llamado Sur Global, que acusan a los occidentales de aplicar un doble rasero en Oriente Pr¨®ximo y Ucrania, empiezan a hacer mella en las canciller¨ªas, seg¨²n reconocen fuentes diplom¨¢ticas espa?olas.

Frente a quienes ven un tufo electoralista en la decisi¨®n espa?ola, las mismas fuentes alegan que la fecha prevista del reconocimiento era el pasado d¨ªa 21, para que no coincidiera con la campa?a electoral, y se aplaz¨® para coordinarse con otros pa¨ªses, como Noruega, donde no hay elecciones europeas. El Gobierno sostiene, adem¨¢s, que la medida no va en contra de Israel y asegura que, en su campa?a internacional por esta iniciativa, S¨¢nchez tambi¨¦n ha defendido el reconocimiento del Estado de Israel por parte de los m¨¢s de 25 pa¨ªses que a¨²n no lo han hecho. Se trata, finalmente, de un asunto pol¨ªticamente transversal: los primeros ministros de Espa?a y Noruega son socialistas, pero su hom¨®logo irland¨¦s es de conservador.

¡°Necesario pero insuficiente¡±

Los palestinos han acogido el anuncio de Espa?a entre la ¡°esperanza¡± que describe la exportavoz de la Autoridad Palestina, el escepticismo o incluso el temor de que ese paso sirva de pretexto para no oponerse con medidas concretas ¡°al genocidio en Gaza y al apartheid al que Israel somete a la poblaci¨®n palestina¡±, asegura Taher Ali. Este palestino, activista de la Red Solidaria contra la Ocupaci¨®n de Palestina (Rescop), considera que la ¡°naturaleza colonial y expansionista de Israel¡± es incompatible con un nuevo Estado que ni siquiera tendr¨ªa ¡°continuidad territorial¡± por los asentamientos israel¨ªes y la anexi¨®n de tierras en Cisjordania y Jerusal¨¦n Este. Esta decisi¨®n, a?ade, ¡°obvia que Israel es un Estado que ni siquiera se fija fronteras¡±.

En su discurso en el Congreso, S¨¢nchez no precis¨® qu¨¦ implicar¨¢ la asunci¨®n de la estatalidad de Palestina, cuando es precisamente en esos detalles donde radica la diferencia entre ¡°un mero acto simb¨®lico y otro que contribuya a resquebrajar la realidad impuesta por Israel sobre el terreno¡±, apunta el profesor Barre?ada. Un Estado palestino requiere de ¡°condiciones m¨ªnimas¡± por las que Espa?a deber¨ªa presionar y que deber¨ªan acompa?ar a ese reconocimiento que describe como ¡°necesario pero insuficiente¡±. Entre ellas, el ¡°fin de la ocupaci¨®n y del apartheid de los palestinos en Israel¡±, as¨ª como ¡°una soluci¨®n justa para los [casi seis] millones de refugiados palestinos que tienen derecho al retorno [al actual Israel]¡±.

A la inc¨®gnita sobre los detalles concretos del reconocimiento se suma otro motivo de inquietud, a?ade Itxaso Dom¨ªnguez de Olaz¨¢bal, profesora de Geopol¨ªtica de Oriente Pr¨®ximo en la Universidad Carlos III de Madrid. Se trata de la ¡°legitimaci¨®n¡±, durante el anuncio parlamentario de S¨¢nchez, ¡°de una Autoridad Palestina corrupta, que reprime a su propio pueblo y colabora con Israel¡±.

Esta experta cree que la decisi¨®n espa?ola deja demasiadas cuestiones en el aire: ¡°?Qu¨¦ posibilidades reales hay de crear un Estado? ?Qu¨¦ soberan¨ªa real tiene la Autoridad Palestina? y, sobre todo, ?qu¨¦ va a pasar con Gaza, c¨®mo entra eso en la ecuaci¨®n de este nuevo Estado?

Esos y otros interrogantes, como el relativo al derecho al retorno de los casi seis millones de refugiados palestinos, retrotraen a esta profesora a los fallidos acuerdos de Oslo, hace m¨¢s de 30 a?os, de los que se supuso que culminar¨ªan en un Estado palestino. Entonces, la negociaci¨®n de todas las cuestiones ¡°centrales para la causa palestina se pospuso para m¨¢s adelante¡± sin que llegara nunca a hacerse realidad. Por esa y otras razones, Dom¨ªnguez de Olaz¨¢bal cree que ese Estado palestino, en las actuales condiciones y ¡°en el contexto de un genocidio en Gaza¡± es ¡°ut¨®pico¡±. Adem¨¢s, el derecho de autodeterminaci¨®n de los palestinos ¡°puede culminar en un Estado o no. O en un estado binacional¡±.

Hay ¡°alternativas¡±, dice esta especialista. Frente a un reconocimiento ¡°in¨²til¡± y lo que define como ¡°soluci¨®n muerta¡± de los dos Estados, ¡°se impone romper las relaciones con Israel, sobre todo la compraventa de armas, sumarse a la demanda por genocidio de Sud¨¢frica y seguir presionando a la UE para que suspenda el acuerdo de asociaci¨®n con Israel¡±. En su opini¨®n, solo as¨ª se combatir¨¢ ¡°la impunidad de la que goza desde hace d¨¦cadas¡± ese pa¨ªs.

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