¡°Est¨¢ bien que el adolescente se sienta invencible. Pero esto, con la covid, no es real; nos podemos contagiar todos¡±

La llegada de la adolescencia siempre preocupa a los padres. Es una etapa vital por la que todos los adultos han pasado, pero que todos miran, o la esperan, con miedo. Lola ?lvarez Romano se ha propuesto explicar en su libro, Pero, ?qu¨¦ te pasa? Diez claves para entender la adolescencia en positivo (Planeta), c¨®mo solventar problemas cotidianos que afectan a los j¨®venes y recomendar pautas para que los padres y madres resuelvan los conflictos que puedan surgir de la mejor manera posible. La psicoterapeuta y pedagoga sostiene que en la adolescencia se produce un cambio abrupto en el compartimiento y f¨ªsico de los j¨®venes, algo que puede ser duro de sobrellevar para los padres, ¡°pero que noquea a los chavales¡±. No solo son las hormonas, sino tambi¨¦n esa necesidad de independencia y ese sentimiento de omnipotencia que tanto les caracteriza. ?C¨®mo sobrevivimos todos a esta etapa y lo m¨¢s importante, c¨®mo lo hacemos juntos?

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¡°El adolescente necesita libertad y, con la pandemia, todo son normas. Vive contenido y es lo que peor lleva¡±

El cerebro del adolescente: claves para entenderlo mejor

PREGUNTA: ?Por qu¨¦ te animaste a escribir un libro sobre adolescencia?

RESPUESTA: Para m¨ª, era fundamental escribirlo porque hago mucho trabajo con padres y con familias y suele ser una ¨¦poca en la que suele haber tropiezos. Y mi intenci¨®n con el libro era animar a los padres, animar a que no se desanimen cuando hay un conflicto, cuando hay una situaci¨®n que les deja perplejos. He trabajado con adolescentes como psicoterapeuta y hago mucho trabajo con padres. Y muchas veces los progenitores no se dan cuenta de las capacidades que tienen para mediar o lidiar con la situaci¨®n.

P. ?Por qu¨¦ tenemos los padres y las madres tanto miedo a la adolescencia? ?Tiene mala fama?

R. S¨ª, tiene mala fama. El miedo principal a la adolescencia es que es la etapa en la que el menor apunta a c¨®mo ser¨¢ de adulto. Cuando los ni?os son peque?os controlamos mucho m¨¢s la vida que tienen, elegimos todo por ellos, con quien van, qu¨¦ hacen¡­ En la adolescencia, todo eso cambia, aparece un deseo de independencia que es muy notable. Su desarrollo f¨ªsico es muy determinante porque, aparte de lo que es visible, que son m¨¢s altos, se desarrollan, les viene la regla, todo eso, hay una explosi¨®n neuronal. El cerebro se desarrolla tanto en la adolescencia como el periodo fetal. Hay una tormenta. Es muy radical. Una cosa es la pubertad, digamos el principio del desarrollo f¨ªsico y sexual, y otra la adolescencia que es una caracter¨ªstica m¨¢s emocional, m¨¢s de comportamiento. Ante esto, los adolescentes tambi¨¦n pierden un poco control de lo que les est¨¢ pasando, ellos no saben muy bien lo que les pasa porque todo es muy repentino. Los padres se encuentran con algo que no conocen muy bien, pero es que los j¨®venes tambi¨¦n chocan contra ello. El joven est¨¢ haciendo lo que puede con su cuerpo y con su mente, con sus hormonas, y los progenitores tampoco saben c¨®mo navegar, c¨®mo andar.

P. ?Qu¨¦ claves le dar¨ªas a los padres?

R. En general, cuando tienes hijos lo que m¨¢s fuerza te da para lidiar con las situaciones es tener una buena comunicaci¨®n con ellos. Pero no solo en la adolescencia, lo ideal es que se d¨¦ desde el principio: sobre todo y sobre nada. Sobre lo que sienten, lo que les pasa, c¨®mo lidiar con los problemas. Con los j¨®venes, aunque algunos sean m¨¢s herm¨¦ticos, hay que encontrar momentos para conversar con ellos no cuando hay un conflicto, sino cuando estamos todos tranquilos. No s¨¦, en la mesa, en el coche, cuando ven una pel¨ªcula juntos¡­ en momentos distendidos. Y no es hablar de un tema concreto, a lo mejor es simplemente charlar, es encontrar la oportunidad para poder ver d¨®nde est¨¢n ellos y d¨®nde est¨¢s t¨² como padre. El libro habla mucho sobre esto, sobre que a veces los progenitores est¨¢n en situaciones muy complejas y tienen que abrirse a sus hijos, no quiere decir desahogarse o hacerles responsables de la situaci¨®n, pero ellos tambi¨¦n tienen derecho y curiosidad sobre lo que est¨¢ ocurriendo en la vida de sus padres. Y hay que hacerlo, hay que cont¨¢rselo, porque lo que se imaginan suele ser mucho peor que lo que est¨¢ pasando y muchos adolescentes se preocupan por sus progenitores.

¡°Al principio, cuando tienes un hijo es como tener un perro, est¨¢ encantado de verte. Luego, de repente, llegas un d¨ªa a tu casa y tienes un gato, que cuando entras t¨², sale ¨¦l¡±

P. ?Se puede llegar a controlar todo el c¨²mulo de emociones que lleva consigo la adolescencia?

R. En uno de los cap¨ªtulos del libro, hay una declaraci¨®n de una periodista estadounidense especialista en crianza que explica: ¡°Al principio, cuando tienes un hijo es como tener un perro, est¨¢ encantado de verte, viene d¨®nde est¨¢s t¨², te lame¡­ Y luego, de repente, llegas un d¨ªa a tu casa, y ya no tienes un perro, tienes un gato que cuando entras t¨², sale ¨¦l, que cuando le pones algo de comer lo husmea con recelo. Y luego otro d¨ªa llegas a tu casa y te encuentras con una persona adulta que te dice: ?Mam¨¢ te ayudo con las bolsas de la compra? Y vuelves a tener un perro¡±. Hay que dejar que en la adolescencia se alejen un poco porque necesitan saber que se pueden individualizar, dejarles que pasen de ti, para que luego puedan volver. Pero en este momento vital, se est¨¢n demostrando a s¨ª mismos lo que son, hasta donde pueden llegar. Necesitan demostrarse que ya no son ni?os, que dejaron atr¨¢s la infancia.

P. ?C¨®mo est¨¢n viviendo los adolescentes la pandemia?

R. Es dif¨ªcil, en cierto modo, la adolescencia es un periodo el que act¨²en como si algo no fuera con ellos, es sano. Ellos se sienten invencibles y capaces de cualquier cosa y eso est¨¢ bien. Lo malo es que ahora, esa omnipotencia, ese sentimiento de poder con todo, lamentablemente no es real, porque podemos contagiarnos todos y contagiar a otros, pero esto est¨¢ muy en contra de lo que es intr¨ªnseco en el adolescente, con este sentimiento de que a m¨ª no me puede nada. La idea de enfermedad, de vulnerabilidad, de toda esta pandemia, les cuesta entender que les puede ocurrir a ellos, les cuesta hacerse responsables de que a lo mejor a ellos no les afecta, pero a sus abuelos, s¨ª. O a sus padres. Al final, yo creo, que ellos han hecho lo que han podido, que al final es toda la sociedad la que est¨¢ traumatizada por la covid, no solo los adolescentes. En cierto modo, han sobrevivido un poco mejor gracias a las redes sociales, que las tienen muy a mano, pues a algunos les ha cambiado menos la vida, porque ellos con el m¨®vil ya tienen el mundo entero.

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