Regalos para Pap¨¢ Noel y los Reyes Magos: claves para encontrar el juguete perfecto

Apenas hace unas semanas, la Academia de Nutrici¨®n y Diet¨¦tica solicit¨® la retirada de un juguete infantil (Burguer Boom) por su ¡°posible impacto en los trastornos de la conducta alimentaria (TCA) en los ni?os¡±. Se trata de un juego de mesa con cartas y un pulsador en forma de hamburguesa, en el que pierde quien explota por comer demasiado, lo que, seg¨²n Xandra Romero, coordinadora del grupo de especializaci¨®n en TCA de la academia, ¡°transmite conceptos poco adecuados sobre la alimentaci¨®n, el cuerpo y la salud. Y transmite pensamientos y actitudes gord¨®fobos y pesocentristas desde la infancia¡±. Con estas palabras, Romero deja claro que jugar es mucho m¨¢s que pasar un rato divertido: es un transmisor de valores esencial para los ni?os.

Pilar Conde, psic¨®loga y directora t¨¦cnica de Cl¨ªnicas Origen, afirma que jugando los ni?os aprenden valores como el respeto, la colaboraci¨®n, la paciencia, la creatividad, el desarrollo de la autoestima y la metacognici¨®n. ¡°Jugar permite el desarrollo de procesos tan importantes como la autonom¨ªa, la socializaci¨®n, la comunicaci¨®n y la expresi¨®n de emociones. A la vez, se realiza actividad f¨ªsica y se ponen en marcha procesos cognitivos imprescindibles como la atenci¨®n, la memoria, la planificaci¨®n y la motivaci¨®n¡±, explica. La pedagoga Ana Mar¨ªa Reynoso Ramos, tambi¨¦n profesora del Grado en Pedagog¨ªa de la Universidad Internacional de La Rioja, a?ade a todo ello la importancia de que jugando tambi¨¦n aprendan a ganar y a perder: ¡°Vamos a perder m¨¢s veces que a ganar, y es crucial que le demos al ni?o, a trav¨¦s del juego, estrategias para entenderlo, para que no le afecte y lo comprenda¡±. La docente recuerda que jugar en familia mejora el v¨ªnculo y la convivencia: ¡°Y jugar activa neurotransmisores como endorfinas, dopaminas, serotoninas, oxitocinas. ?Hay algo mejor?¡±, concluye.

Para conseguir todos estos beneficios es fundamental contar con los juguetes adecuados para cada menor. ¡°Si damos un juego demasiado f¨¢cil puede aburrirse y si le damos uno demasiado dif¨ªcil, con reglas muy complejas, puede no entenderlo, lo que acabar¨ªa por ser frustrante y restar diversi¨®n¡±, afirma Reynoso. Por eso es importante considerar varios par¨¢metros a la hora de elegir el juguete perfecto. Lo explica Maite Franc¨¦s, directora de marketing de la Asociaci¨®n Espa?ola de Fabricantes de Juguetes (AEFJ). ¡°En primer lugar, hay que tener en cuenta algo tan sencillo como la edad. A menudo, padres y abuelos tienden a considerar que sus hijos o nietos son mayores de lo que realmente son¡±, explica Franc¨¦s. En segundo lugar, y prioritario, hay que tener en cuenta los gustos y preferencias del peque?o: ¡°No olvidemos que para que se diviertan deben sentirse atra¨ªdos por el juguete, llave m¨¢gica que les adentra en el mundo del juego¡±. Y en tercer lugar, la experta incide en la seguridad de los juguetes: ¡°Saber a qui¨¦n se est¨¢ comprando (marca y establecimiento) y conocer las caracter¨ªsticas del juguete (si lleva pilas o imanes, piezas peque?as, si requiere montaje, el tama?o¡­)¡±.

Franc¨¦s destaca tambi¨¦n que los juguetes son poderosas herramientas para el aprendizaje, por lo que se pueden tener en cuenta qu¨¦ habilidades se quieren estimular o potenciar. ¡°Por ejemplo, si es un ni?o que necesita trabajar la atenci¨®n, se le pueden regalar puzles, juguetes cient¨ªficos o construcciones. Mientras que si queremos potenciar la afectividad o la comunicaci¨®n, son adecuados los mu?ecos o juguetes de escenario. Y si queremos fomentar la actividad f¨ªsica, una bicicleta o juegos para disfrutar de la acci¨®n al aire libre¡±, establece la experta. Aunque recuerda que en la variedad est¨¢ el gusto: ¡°Una buena dieta de juego debe contener un men¨² variado de juguetes en los que se combine el juego individual con el juego f¨ªsico y con compa?eros¡±.

Juguetes apropiados seg¨²n la edad

La pedagoga Ana Mar¨ªa Reynoso Ramos se?ala que lo adecuado es partir del juego libre para luego, seg¨²n van creciendo los ni?os y de manera progresiva, ir introduciendo el juego dirigido, pero sin eliminar el primero. De forma gen¨¦rica, la experta recomienda:

• De 0 a 6 meses. Juegos que tengan sonidos o m¨²sica, m¨®viles con colgantes para la cuna o el cochecito, sonajeros, alfombras o mantitas.
• De 6 a 12 meses. Mordedores, juguetes con sonidos y movimiento, de distintas texturas para que toquen y fomenten su psicomotricidad, objetos que rueden, juguetes que floten en la ba?era, bloques para apilar, para encajar, de colores y formas geom¨¦tricas¡­
• De 1 a 2 a?os. Adem¨¢s de los anteriores, juguetes que ellos puedan golpear, manipular, arrastrar, empujar¡­ peluches o mu?ecos de trapo, cuentos con im¨¢genes, t¨¢ctiles, para jugar en la ba?era¡­
• De 2 a 3 a?os. Se le pueden a?adir t¨²neles de gateo, columpios, toboganes, triciclos con pedales y juguetes de imitaci¨®n (cocinitas, cosas de casa, mu?ecas, disfraces), rompecabezas de sobremesa, materiales para pintar, instrumentos musicales.
• De 3 a 5 a?os. Juguetes para que se muevan, como patines, bicicletas, pelotas, juegos de bolos, de anillas, rompecabezas m¨¢s dif¨ªciles, coches, trenes, mu?ecas, teatros, t¨ªteres de guantes, cuentos¡­
• De 5 a 8 a?os. A?adir juguetes que fomenten h¨¢bitos saludables y practicar deporte, dianas con dardos de ventosas¡­ y podemos empezar con los juegos de mesa con reglas acordes a su edad.
• De 8 en adelante. Lo mismo que en el anterior, pero cada juego con m¨¢s dificultad en cuanto a reglas, estrategias, de simulaci¨®n, de rol, en funci¨®n de la edad, puzles de m¨¢s piezas, cuentos y libros, monopatines, mesas de ping-pong, billar, juegos de cartas¡­

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