?Qu¨¦ es un coordinador de bienestar y c¨®mo ayuda a los ni?os y adolescentes en el cole?
El nuevo rol que se incorpora este curso en los centros escolares es el de prevenir y detectar situaciones de acoso y violencia, adem¨¢s de comunicarse con alumnos y familias ante posibles casos
El nuevo curso ha comenzado en la mayor¨ªa de las comunidades aut¨®nomas y con ¨¦l se da la bienvenida a una nueva figura que se incorpora a los centros escolares: el coordinador de Bienestar y Protecci¨®n (CBP). Se trata de un nuevo puesto, creado a merced a la Ley de protecci¨®n integral a la infancia y la adolescencia frente a la violencia, cuyas funciones son, seg¨²n Ana Cobos, presidenta de la Confederaci¨®n de Organizaciones de Psicopedagog¨ªa y Orientaci¨®n en Espa?a (COPOE), ¡°proporcionar al alumnado bienestar emocional, estar al tanto de las crisis, actuar en programas de prevenci¨®n y estar al lado de los alumnos en situaciones que puedan alterar su salud f¨ªsica, mental y social¡±.
Es decir, tratar de poner fin a situaciones que afectan a los menores y que preocupan a todos. Por ejemplo, el bullying. Datos facilitados por la Unesco en 2020 justifican esta preocupaci¨®n: uno de cada tres estudiantes es v¨ªctima de acoso. En todo el mundo, el 32% de los alumnos de entre 11 y 15 a?os de edad ha sido v¨ªctima de acoso escolar por parte de sus compa?eros. Por su parte, la ONG Bullying Sin Fronteras refer¨ªa hace apenas unos meses 11.229 casos graves de bullying entre enero de 2021 y febrero de 2022 en los centros escolares espa?oles.
Una figura necesaria contra el acoso y la violencia
Ramiro A. Orteg¨®n Delgadillo, presidente de la Plataforma PDA Bullying y director del M¨¢ster Acoso Escolar UNIR, se?ala otros asuntos a los que el coordinador de Bienestar y Protecci¨®n debe prestar especial atenci¨®n. Por un lado, el tema de abusos sexuales: ¡°En Espa?a, uno de cada cinco ni?os/as es situado en rol de v¨ªctima en casos de abuso sexual infantil¡±, concreta. Por otro lado, la violencia entre parejas de adolescentes: ¡°Existe mayor prevalencia en esta etapa vital¡±.
Ante estos datos, Orteg¨®n est¨¢ convencido de que esta figura era necesaria: ¡°Del bienestar individual debemos ocuparnos las familias. Pero en los centros existe un ente que los padres y madres no tenemos en nuestro hogar, eso llamado grupo. Los docentes son los encargados de que los ni?os y adolescentes se relacionen desde y hacia el bienestar o la convivencia cuando est¨¢n dentro del grupo. Tema a¨²n m¨¢s complicado cuando hoy las fronteras del grupo se diluyen m¨¢s all¨¢ del aula gracias a las posibilidades que nos da internet.¡±
Mayor prevenci¨®n y detecci¨®n de casos
El director del M¨¢ster Acoso Escolar UNIR asegura que a partir de este curso y, sobre todo a medio plazo, empezar¨¢ a dar frutos el trabajo de esta nueva figura. Y lo har¨¢ tanto en materia de prevenci¨®n como de detecci¨®n. ¡°Se debe notar en un mayor n¨²mero de acciones preventivas, coordinadas entre s¨ª y con un sentido estrat¨¦gico hacia una vida m¨¢s sana. Tambi¨¦n en mayor detecci¨®n de situaciones de riesgo, no porque haya m¨¢s, sino porque antes no las ve¨ªamos, ya que no est¨¢bamos presentes. Tiene que notarse tambi¨¦n en un mejor dise?o de la respuesta ante los casos detectados, profesionales especializados implica profesionales mejor formados/as¡±, sostiene.
En ese sentido, Ana Cobos hubiera apostado por ¡°reforzar el departamento de orientaci¨®n mejor que crear una nueva figura¡±. En efecto, ser¨¢ un maestro o profesor quien se encargue de coordinar el bienestar de los menores. La orientadora opina que es un trabajo para el que ¡°la formaci¨®n adecuada es la psicopedagog¨ªa. Lo adecuado hubiera sido reforzar la ratio de los departamentos de Orientaci¨®n para que fuera este el encargado de esta labor¡±.
Mejor comunicaci¨®n con alumnos y familias
En cualquier caso, supondr¨¢, al menos en teor¨ªa, la mejora de la comunicaci¨®n del alumnado con el centro ante casos de acoso. ¡°El coordinador de Bienestar y Protecci¨®n se encargar¨¢ de coordinar equipos de ni?os y ni?as y de j¨®venes que ayuden a mejorar la convivencia, detectando posibles casos. Pero tambi¨¦n ser¨¢ la persona a quien acudir cuando haya una alerta; alguien que sepa verdaderamente qu¨¦ hacer y qu¨¦ decir al alumno cuando existe un problema. Para m¨ª ese es uno de los verdaderos cambios o mejoras¡±.
En cuanto a las familias, estas tambi¨¦n notar¨¢n su existencia. ¡°La respuesta que debemos dar como padres a cualquier indicio de violencia o maltrato debe ser la comunicaci¨®n al centro a trav¨¦s del CBP, pero perm¨ªteme que no acabemos hablando ¨²nicamente de la figura. Tambi¨¦n es importante nuestro papel dentro de la familia, sin importar el rol en el que se sit¨²e nuestro hijo. Al final, cuando hay violencia, hay dolor m¨¢s o menos consciente¡±.
Infantil, Primaria y Secundaria
La figura del CBP estar¨¢ presente en todos los centros en los que haya menores, es decir, escuelas de Primaria y de Secundaria. Una buena opci¨®n ya que aunque en la adolescencia es el momento en el que m¨¢s conflictos afloran estos se han ido gestando en la infancia. ¡°La labor de prevenci¨®n en Infantil y Primaria es imprescindible para disponer de una buena salud mental a lo largo de la vida. Son a?os en los que se sientan las bases del futuro emocional. Adem¨¢s, los ni?os y ni?as son como esponjas, como tallos tiernos, much¨ªsimo m¨¢s f¨¢ciles de moldear para el aprendizaje. Incluso la plasticidad del cerebro en esas etapas es mayor¡±, afirma Ana Cobos.
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