Claves b¨¢sicas para no ser un padre ausente

El tiempo es, sin duda, uno de los pilares m¨¢s importantes a la hora de educar, pero la mayor¨ªa de los adultos carece de ¨¦l. El ritmo al que viven, intentando compaginar la vida profesional, familiar y personal, les roba la posibilidad de estar presentes y disponibles en el d¨ªa a d¨ªa de sus hijos como a ellos les gustar¨ªa. La conciliaci¨®n en Espa?a sigue siendo una utop¨ªa, as¨ª que poder educar a un ni?o cuando ambos progenitores trabajan es casi una misi¨®n imposible. La hiperpreocupaci¨®n, las largas jornadas laborales, la velocidad en la que se entrelazan las tareas y responsabilidades crean en las familias mucho estr¨¦s por no tener tiempo para lo que es realmente importante. Cumplir en el trabajo, con las tareas dom¨¦sticas y la organizaci¨®n de m¨¦dicos y extraescolares provoca que las familias vivan sin un ¨¢pice de energ¨ªa y atrapados en una lista de tareas pendientes que nunca se reduce.

Un estilo de vida terriblemente agotador que afecta a la salud f¨ªsica y mental de los progenitores e imposibilita que pasen el tiempo necesario junto a sus hijos. Esta escasez de tiempo para la crianza les produce un sentimiento constante de culpabilidad, insatisfacci¨®n e inseguridad por vivir siempre con la sensaci¨®n que no est¨¢n en el lugar que deber¨ªan. Una ansiedad que conduce a educar con aceleraci¨®n y falta de paciencia, que provoca mucha preocupaci¨®n y agobio. Una culpabilidad que en ocasiones puede hacer que se eduque sobreprotegiendo al ni?o intentando compensar el tiempo que no se le puede dedicar.

La carencia de tiempo impacta directamente en el desarrollo f¨ªsico, mental y afectivo de toda la familia. Una falta de presencia que afecta especialmente en los primeros a?os de vida del peque?o y provoca en ¨¦l mucha incertidumbre y malestar emocional. Tambi¨¦n puede derivar en conductas desajustadas en casa y la escuela, cuando el ni?o intenta llamar la atenci¨®n, muestra rebeld¨ªa u oposici¨®n ante las normas o los l¨ªmites y necesita constantemente la aprobaci¨®n del adulto.

Un menor que se sienta solo o abandonado ser¨¢ un ni?o inseguro y dependiente que tendr¨¢ muchas dificultades para identificar, gestionar y compartir sus emociones correctamente. Poseer¨¢ una baja autoestima, dificultades para adaptarse correctamente a su entorno y hacer frente a la frustraci¨®n y a los errores. Para que pueda crecer sano y feliz necesita compartir tiempo de calidad con sus progenitores, sentir su protecci¨®n, presencia, estima e inter¨¦s por aquello que le gusta o le preocupa. Que estos se conviertan en su lugar seguro donde pueda encontrar el apoyo incondicional que necesita. Poder tener tiempo de calidad entre padres e hijos es imprescindible para establecer un v¨ªnculo sano basado en la confianza, el respeto y el amor. Un ni?o con padres presentes en su educaci¨®n se sentir¨¢ amado, importante y mostrar¨¢ inter¨¦s por compartir con ellos su vida con m¨¢s serenidad.

Para que los menores perciban que sus progenitores est¨¢n presentes es clave que las familias organicen bien sus tareas y responsabilidades. Establecer un reparto equitativo de las faenas en casa facilitar¨¢ encontrar momentos libres para poder pasar tiempo juntos haciendo actividades que gusten a grandes y peque?os. Adem¨¢s, es recomendable que los padres eviten la improvisaci¨®n porque esto permitir¨¢ una convivencia mucho m¨¢s tranquila, evitando las discusiones o malos entendidos que pueden crear malestar en casa. Lo que necesita el ni?o o adolescente es crecer en un hogar donde no haya gritos y los conflictos se solucionen desde la calma y el respeto.

Otra de las cosas que pueden hacer es organizar horarios en los que todos los miembros de la familia compartan juntos su tiempo, como pueden ser la hora de comer o cenar, hacer las tareas dom¨¦sticas o los deberes o compartir un tiempo agradable antes de ir a dormir donde se lee un cuento o se analiza c¨®mo ha ido el d¨ªa. Todo esto ayudar¨¢ al ni?o a sentir el calor de sus progenitores y desarrollar habilidades y destrezas.

Es importante saber que cuando el adulto pasa tiempo con el ni?o en casa debe tener su atenci¨®n plena en la actividad que realiza con ¨¦l. No es necesario hacer grandes planes porque no se trata de compensar las ausencias, sino de disfrutar juntos. Adem¨¢s, el padre o la madre debe expresar su cari?o a trav¨¦s de su lenguaje verbal y no verbal, como son palabras de aliento, besos, abrazos, caricias y miradas c¨®mplices. Sentir que a sus padres le importa todo aquello que le sucede en el colegio, los entrenamientos deportivos, en las clases de m¨²sica o con sus amigos. Un ni?o que se sienta querido y aceptado tal como es crecer¨¢ feliz y con una autoestima sana.