Investigadores y cient¨ªficos critican la nueva Ley de Ciencia: ¡°Es absolutamente aberrante¡±
La comunidad acad¨¦mica llama a un paro este 2 de mayo en reclamo a la legislaci¨®n aprobada por el Senado el viernes en ¡®fast track¡¯


La aprobaci¨®n de la nueva Ley de Ciencia el pasado viernes ha incendiado el debate en la academia. En una sesi¨®n marat¨®nica y completamente fuera de lo normal, los senadores del Movimiento de Regeneraci¨®n Nacional (Morena) y sus aliados sacaron adelante en una sede paralela y sin presencia de la oposici¨®n una veintena de reformas, entre ellas, la Ley General en Materia de Humanidades, Ciencias, Tecnolog¨ªas e Innovaci¨®n. El proyecto hab¨ªa sido rechazado por investigadores y cient¨ªficos porque centraliza la toma de decisiones en una junta conformada por funcionarios del Gobierno, limita las autonom¨ªas de los centros de investigaci¨®n, elimina la meta de alcanzar el 1% del PIB en inversi¨®n para investigaci¨®n y consolida la presencia de las Fuerzas Armadas en la toma de decisiones en esta ¨¢rea. ¡°Es absolutamente aberrante¡±, asegura a este peri¨®dico el bi¨®logo Antonio Lazcano, profesor em¨¦rito de la Universidad Nacional Aut¨®noma de M¨¦xico (UNAM) y miembro del Colegio Nacional. La comunidad cient¨ªfica ha llamado a un paro de actividades este 2 de mayo en rechazo a lo aprobado.
El dictamen de 112 p¨¢ginas ni siquiera hab¨ªa sido le¨ªdo por la mayor¨ªa de senadores que votaron a favor. No hab¨ªa tiempo para debatir ni para analizar en profundidad el futuro de la ciencia en M¨¦xico. La iniciativa fue aprobada en unos pocos minutos junto a una veintena de leyes que sac¨® adelante el oficialismo de manera marat¨®nica. Tampoco hubo tiempo de hacer los siete parlamentos abiertos previstos para definir el escenario cient¨ªfico de los pr¨®ximos a?os. La forma en que se aval¨® la nueva ley, que convierte el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnolog¨ªa (Conacyt) en el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias, Tecnolog¨ªas e Innovaci¨®n, es una de las grandes cr¨ªticas que ha hecho la comunidad cient¨ªfica. La madrugada del s¨¢bado las redes sociales estallaron con el rechazo de numerosos investigadores e incluso instituciones. A Lazcano le parece vergonzosa la forma en que se dio luz verde a la iniciativa: ¡°Habla de la irresponsabilidad de los legisladores¡±.
El gran defensor del proyecto ha sido el presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador. ¡°Est¨¢n inconformes con la reforma al Conacyt, ?por qu¨¦? Porque el dinero del pueblo se utilizaba para financiar a las grandes empresas transnacionales, supuestamente para la innovaci¨®n tecnol¨®gica. ?Mentira!¡±, ha dicho el pasado viernes, horas antes de la aprobaci¨®n de la reforma. ¡°Era para estar subsidiando a estos grupos sin producir ciencia¡±. Otros cercanos al Gobierno han defendido que la ciencia en M¨¦xico ya no depender¨¢ de un peque?o c¨ªrculo ¡°cient¨ªfico elitista¡± gracias a la nueva ley.

La llamada ¡°Ley Buylla¡±, en referencia a la directora del Conacyt, Mar¨ªa Elena ?lvarez-Buylla, establece la creaci¨®n de una junta de Gobierno compuesta por funcionarios de las Secretar¨ªas de Agricultura; Bienestar; Infraestructura, Comunicaciones y Transportes; Cultura; Econom¨ªa, Educaci¨®n; Energ¨ªa; Hacienda; Defensa; Marina; Medio Ambiente; Exteriores; Salud; y el Instituto Nacional de los Pueblos Ind¨ªgenas. La legislaci¨®n deja fuera a los actores de las organizaciones civiles y empresariales, a los municipios y Estados. La junta, con ?lvarez-Buylla a la cabeza, es de ahora en m¨¢s la que decide en qu¨¦ se pone presupuesto y en qu¨¦ no. La medida alcanza a los 26 centros p¨²blicos que se desprenden del Conacyt, que pierden a partir de esto la autonom¨ªa administrativa y la libertad para decidir sobre sus investigaciones.
La prueba piloto de lo que pasar¨¢ con los 26 centros ha sido el Centro de Investigaci¨®n y Docencia Econ¨®micas (CIDE), donde el Conacyt nombr¨® como titular a Jos¨¦ Antonio Romero Tellaeche, un hombre af¨ªn al Gobierno mexicano, y luego cambi¨® los estatutos internos para aminorar su independencia. ¡°Lo que hicieron con el CIDE lo plasmaron en una ley y ahora lo quieren hacer en el resto de los centros p¨²blicos¡±, reclama Alma Maldonado, investigadora del Cinvestav. ¡°Buylla sac¨® a quienes eran cr¨ªticos y meti¨® gente subordinada a ella¡±, agrega. Maldonado califica el proceso de aprobaci¨®n de la nueva ley como ¡°desaseado¡± y ¡°muy burdo¡±, y sostiene que el proyecto ¡°subordina a las instituciones y dependencias¡± cient¨ªficas ante Conacyt.
La junta de Gobierno ser¨¢ entonces quien decida cu¨¢l es la ¡°agenda nacional¡± que defina las ¡°l¨ªneas de acci¨®n en torno de los asuntos estrat¨¦gicos o prioritarios para el desarrollo del pa¨ªs¡±, de acuerdo a la ley. ¡°Es la concentraci¨®n de la toma de decisiones de toda la ciencia mexicana en un pu?ado de funcionarios¡±, se?ala Brenda Valderrama, investigadora del Instituto de Biotecnolog¨ªa de la UNAM. Otro de los puntos claves es que la ley prioriza a los centros p¨²blicos en detrimento de la financiaci¨®n a quienes est¨¦n en el ¨¢mbito privado. ¡°Eso viola la Constituci¨®n¡±, asegura Lazcano, que puntualiza que de esta forma se excluye a mucha gente que hace investigaci¨®n del escenario cient¨ªfico nacional.

El cient¨ªfico agrega que el documento aprobado presenta ¡°defectos brutales¡±, y que se trata de un intento por hacer ciencia ¡°ideologizada¡±. En esa misma l¨ªnea, el investigador Mart¨ªn Aluja reclama la politizaci¨®n que ha sufrido el tema y la ¡°manera apresurada¡± con que se dio el debate. ¡°M¨¦xico requer¨ªa una ley de vanguardia, no un instrumento jur¨ªdico parroquial. Esa ley que pasaron no es una ley general, es un manifiesto pol¨ªtico¡±, dice.
La nueva ley consolida tambi¨¦n la integraci¨®n de las Fuerzas Armadas en el ¨®rgano que distribuye la inversi¨®n gubernamental en investigaci¨®n, innovaci¨®n y tecnolog¨ªa. Tanto la Secretar¨ªa de la Defensa como la Secretar¨ªa de Marina hab¨ªan sido incluidas ya en abril de 2021, bajo decenas de cr¨ªticas por parte de la comunidad cient¨ªfica. El proyecto sancionado el pasado viernes pone en negro sobre blanco la militarizaci¨®n de la ciencia, incluyendo las dos dependencias en la junta de Gobierno del Consejo. ¡°La nueva Ley General de Humanidades, Ciencias, Tecnolog¨ªas e Innovaci¨®n es un paso m¨¢s hacia la militarizaci¨®n del pa¨ªs¡±, dice Luis Omar Montoya Arias, doctor en Historia del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropolog¨ªa Social (CIESAS).
Otro de los puntos m¨¢s pol¨¦micos es la eliminaci¨®n de la meta que ten¨ªa M¨¦xico de llegar a invertir en el futuro el 1% del PIB nacional en ciencia. La nueva ley establece ¨²nicamente que el presupuesto tiene que ser cada a?o m¨¢s alto de lo que fue el a?o anterior. Tambi¨¦n han dejado fuera en el tema presupuestario la posibilidad de que el dinero que se asigna anualmente contemple la inflaci¨®n que ha sufrido M¨¦xico en ese periodo. Para Maldonado, lo ideal ser¨ªa ¡°empujar al Gobierno de turno a invertir¡± en esta ¨¢rea, pero con la nueva legislaci¨®n, ¡°con que sumen 10 pesos ya estar¨¢n cumpliendo¡±.
Ante lo aprobado por el Senado el viernes, la academia ha convocado a un paro de actividades para este martes 2 de mayo. Adem¨¢s, algunos referentes de la ciencia han anunciado que proceder¨¢n legalmente y llevar¨¢n el asunto a la justicia. ¡°Nos quedan los tribunales¡±, repiten algunos.
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