Arturo Zald¨ªvar: ¡°Habr¨¢ dos elecciones de jueces, no ser¨¢ todo en un solo proceso electoral¡±
El encargado de la reforma judicial de Claudia Sheinbaum confirma la gradualidad de la norma y adelanta que los mexicanos votar¨¢n a sus jueces en 2025 y 2027
El ministro en retiro Arturo Zald¨ªvar se ha afianzado en el entorno de Claudia Sheinbaum, a pocas semanas de que tome oficialmente el relevo de la Presidencia de M¨¦xico de manos de Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador. La mandataria electa ha nombrado a Zald¨ªvar coordinador de Pol¨ªtica y Gobierno de la oficina presidencial y le ha encargado, como primera misi¨®n, llevar a buen puerto la reforma al Poder Judicial. Concluidos los debates p¨²blicos organizados por el Congreso para recoger las posturas de jueces y trabajadores de la judicatura, el oficialismo se dispone a aprobar el dictamen en comisiones de la C¨¢mara de Diputados. La meta de Morena y sus aliados del PT y el Partido Verde es que la Legislatura que tomar¨¢ posesi¨®n el 1 de septiembre apruebe en los primeros d¨ªas del mes la enmienda judicial, a fin de que L¨®pez Obrador pueda promulgarla antes de despedirse.
A punto de cumplir 65 a?os, Zald¨ªvar se?ala en esta entrevista con EL PA?S que la pol¨¦mica elecci¨®n de jueces en las urnas se mantendr¨¢ en la reforma, pero matiza que la renovaci¨®n de la judicatura se har¨¢ en dos momentos, en comicios a celebrarse en 2025 y en 2027. Estos ¨²ltimos ser¨ªan concurrentes con la elecci¨®n intermedia de diputados federales y con la consulta de revocaci¨®n de mandato ¡ªque debe efectuarse a la mitad de cada sexenio para que los ciudadanos decidan si el Ejecutivo en turno sigue en el cargo. El ministro en retiro defiende la apabullante mayor¨ªa obtenida por la alianza de Morena en las urnas, y fustiga a los acad¨¦micos y opositores que exigen al INE y al Tribunal Electoral restar curules al oficialismo en el Congreso, como parte del movimiento contra la sobrerrepresentaci¨®n partidista. ¡°Ser¨ªa un verdadero golpe de Estado t¨¦cnico; ser¨ªa grav¨ªsimo desde el punto de vista constitucional, pero m¨¢s desde el punto de vista social, porque el pueblo de M¨¦xico ya vot¨® abrumadoramente a favor de una opci¨®n, con reglas del juego preestablecidas¡±, afirma el juez retirado.
P. Algunos lo perfilaban a usted en la Consejer¨ªa Jur¨ªdica de la Presidencia.
R. Esa nunca fue una opci¨®n, porque, si bien es cierto que yo no ten¨ªa impedimento ¡ªla Consejer¨ªa no es secretar¨ªa de Estado, lo distingue la Constituci¨®n¡ª, s¨ª hay un impedimento para manejar asuntos ante el Poder Judicial Federal dos a?os despu¨¦s de haber sido ministro. Y pr¨¢cticamente la mitad del trabajo de la Consejer¨ªa es litigar o llevar asuntos en tribunales, y no hubiera sido adecuado. Adem¨¢s, yo no estaba aspirando a ning¨²n cargo, yo estaba interesado en tener un encargo en el cual pueda ser ¨²til a la presidenta y al pa¨ªs.
P. ?Este nombramiento le da margen para ayudarle tanto como usted pretende?
R. Todos los nombramientos en la Oficina de Presidencia son cargos de apoyo a la presidenta. Ella ha mencionado expresamente que mi labor principal, al menos en esta primera etapa, ser¨¢ ayudar en la instrumentaci¨®n de todas las reformas constitucionales, con mucho ¨¦nfasis en la reforma judicial, porque es la que requerir¨¢ una instrumentaci¨®n mucho m¨¢s intensa.
P. ?Lo veremos en el cargo de coordinador de Pol¨ªtica y Gobierno todo el sexenio?
R. Ser¨¢ decisi¨®n de la presidenta en d¨®nde cree que la puedo ayudar de mejor manera, yo no tengo ning¨²n problema. Yo no me sum¨¦ a su equipo por un cargo, me sum¨¦ tratando de apoyarla, de ayudarla. No estoy en esto, menos en este momento de mi vida, en b¨²squeda de politiquer¨ªa, de buscar cargos. Eso no va conmigo.
P. La reforma judicial ha requerido de mucho trabajo pol¨ªtico. ?Cu¨¢l es el mayor reto para que se apruebe en el Congreso?
R. Es un reto may¨²sculo porque es un cambio muy trascendental, quiz¨¢s el m¨¢s importante que se ha dado en la historia del Poder Judicial mexicano. Y esto presenta muchos retos: primero, que se apruebe, que es responsabilidad de los legisladores, y hacer los ajustes a la iniciativa que se consideren adecuados sin perder su esencia; despu¨¦s, la instrumentaci¨®n: llevar a cabo la elecci¨®n popular de todos los integrantes del Poder Judicial Federal y de los Poderes Judiciales de los Estados y de Ciudad de M¨¦xico no es una labor sencilla. Tambi¨¦n hemos tenido el reto de explicar la reforma; hay mucha desinformaci¨®n, mucha descalificaci¨®n a priori. Y tambi¨¦n convencer de que no es un tema de personas, no es una cuesti¨®n que se d¨¦ porque hay buena o mala relaci¨®n con Norma Pi?a [la presidenta de la Suprema Corte] o con quien sea; es una cuesti¨®n de que el sistema de justicia no funciona, creo que en eso todos estamos de acuerdo, y hubo un mandato en las urnas de la gente de que hab¨ªa que cambiar ese sistema para que funcione. De eso se trata, no de pasar facturas a determinadas personas.
P. ?Habr¨¢ cambios en el proyecto tras los foros que organiz¨® el Congreso?
R. Los legisladores y tambi¨¦n el presidente L¨®pez Obrador han socializado algunos cambios que en principio podr¨ªan darse. Por ejemplo, que haya convocatorias abiertas tanto en la Presidencia como en el Legislativo y en el Poder Judicial para que se pueda postular cualquier persona que tenga inter¨¦s. Segundo, comit¨¦s evaluadores para elegir los mejores perfiles. Tercero, que todos los ministros, magistrados y jueces tienen garantizado competir, si as¨ª lo desean, para que su cargo sea de alguna manera ratificado por el pueblo en la elecci¨®n popular. Lo que se est¨¢ viendo, de acuerdo con lo que se ha dicho en los foros, es qu¨¦ se puede mejorar; por ejemplo, se ha insistido mucho en el escalonamiento, entonces es muy probable que haya por lo menos dos elecciones, que no sea todo en un solo proceso electoral. Se est¨¢ analizando tambi¨¦n qu¨¦ tipo de boletas tiene que haber, porque se habla mucho de la dificultad de la votaci¨®n, y sin duda ser¨¢ un tipo de votaci¨®n diferente. Las campa?as van a ser de dos meses, de manera muy especial en los tiempos oficiales del Estado mexicano; los candidatos podr¨¢n usar sus redes sociales sin pautar, sin poner dinero, y podr¨¢n aceptar entrevistas siempre y cuando en los medios haya un m¨ªnimo de equidad. As¨ª se va construyendo el paisaje de lo que ser¨¢ el nuevo Poder Judicial mexicano.
P. Habl¨® de un escalonamiento en dos momentos. ?C¨®mo ser¨¢?
R. Yo estoy siendo muy cuidadoso, yo solamente me refiero a lo que los legisladores han dicho ya, porque a ellos les toca hacer el dictamen. Habr¨ªa una primera elecci¨®n en junio del pr¨®ximo a?o, donde ser¨ªan todos los ministros, los integrantes del Tribunal de Disciplina, y la mitad, digamos, de jueces y magistrados. Y la otra mitad ser¨ªa en 2027, esperarse hasta la elecci¨®n intermedia [de diputados], por el costo que implicar¨ªa una elecci¨®n en 2026.
P. ?Qu¨¦ criterios est¨¢n pensando requerir a los aspirantes para ser id¨®neos?
R. Se ver¨¢ la trayectoria profesional, la trayectoria de vida, a lo mejor algunos ensayos, entrevistas que quiz¨¢s haya con el comit¨¦ evaluador. Se trata de que lleguen los perfiles m¨¢s adecuados, entendiendo una nueva l¨®gica de perfil adecuado, no una l¨®gica tecnocr¨¢tica, como ser¨ªa a trav¨¦s de ex¨¢menes de oposici¨®n, sino en un sentido m¨¢s amplio, que haya candidatos m¨¢s representativos de la pluralidad del pueblo de M¨¦xico. Se ha dicho que se va a acabar con la carrera judicial y no es as¨ª. Todos los cargos en el Poder Judicial ser¨¢n a trav¨¦s de concursos de oposici¨®n, salvo el cargo de juez y magistrado; ah¨ª empieza la elecci¨®n. Las posibilidades de que la mayor¨ªa de los funcionarios en ¨¢reas jurisdiccionales lleguen a ser jueces o magistrados son mucho m¨¢s altas con la reforma que como es ahora. Hoy sigue siendo un sistema muy cerrado, de mucho compadrazgo y amiguismo. Yo creo que esta reforma, una vez que se empiece a aquilatar por quienes integran el Poder Judicial, se dar¨¢n cuenta que se les abren muchas posibilidades de ascender que antes no ten¨ªan.
P. ?Qu¨¦ leyes secundarias se prev¨¦n?
R. Primero tenemos que sacar la reforma constitucional. Luego, de entrada vas a requerir una nueva ley org¨¢nica del Poder Judicial Federal, porque cambia la organizaci¨®n de la Corte, hay un nuevo Tribunal de Disciplina, hay un nuevo ?rgano Administrador, hay una nueva forma como acceden a los cargos todos los integrantes del Poder Judicial. Habr¨¢ que reflexionar si se requiere conservar una ley de carrera judicial o si se integra a la ley org¨¢nica. En materia de acciones y controversias [constitucionales], hoy se piden ocho votos [del pleno de la Corte], muy probablemente vamos a pasar a seis votos, porque la Corte tendr¨¢ nueve integrantes. Habr¨¢ que regular en las leyes electorales todo lo que tiene que ver con la elecci¨®n de personas juzgadoras del Poder Judicial Federal. Todo eso se tendr¨¢ que analizar una vez que tengamos ya la reforma.
P. En el Senado, Morena y sus aliados no tienen la mayor¨ªa calificada. ?Ser¨¢ un obst¨¢culo para aprobar la enmienda?
R. Yo creo que con el trabajo pol¨ªtico, con el convencimiento, se va a lograr tener los votos necesarios.
P. El factor de la sobrerrepresentaci¨®n se ha metido a la ecuaci¨®n. ?Hay alguna posibilidad perder la mayor¨ªa calificada por esa v¨ªa?
R. Ser¨ªa un golpe de Estado t¨¦cnico. La Constituci¨®n es muy clara; los criterios del Tribunal Electoral han sido muy claros; en la Corte, siendo yo parte del pleno, declaramos por unanimidad de votos la constitucionalidad de la fracci¨®n 12 del art¨ªculo 87 de la Ley General de Partidos, donde se especifica c¨®mo se asignan a las coaliciones sus diputados. As¨ª que la interpretaci¨®n de la Constituci¨®n, su sentido, su letra y los precedentes, convalidan lo que nosotros estamos sosteniendo: el l¨ªmite del 8% de la sobrerrepresentaci¨®n califica a partidos, no a coaliciones. Adem¨¢s, las coaliciones son alianzas electorales, no alianzas legislativas; los partidos compiten en coalici¨®n, pero, una vez que se gana y toman sus curules, tienen sus grupos parlamentarios y no est¨¢n obligados a votar juntos; la coalici¨®n no es una unidad parlamentaria. Entonces, ser¨ªa un contrasentido y un absurdo pretender que se ponga un l¨ªmite a la sobrerrepresentaci¨®n de una coalici¨®n que desaparece en el momento en que se asignan las curules.
Entiendo la desesperaci¨®n de la oposici¨®n y de los acad¨¦micos interesados para tratar de ganar en la mesa lo que perdieron en las urnas; las reglas del juego estaban muy claras. Si el INE y el Tribunal Electoral cumplen con su responsabilidad, aplican la Constituci¨®n y se ci?en a los precedentes, no hay duda de que vamos a tener la mayor¨ªa calificada, y no hay manera de que le den la vuelta, salvo en un golpe de Estado t¨¦cnico. Ser¨ªa verdaderamente un esc¨¢ndalo y una aberraci¨®n jur¨ªdica, pol¨ªtica y democr¨¢tica, porque la democracia es que se respeten las reglas del juego; no se vale, una vez que se termin¨® el partido, cambiarlas.
P. La mayor¨ªa calificada es un poder que exige mesura y responsabilidad. ?Cu¨¢les ser¨¢n los l¨ªmites para Morena?
R. La presidenta Sheinbaum actuar¨¢ con enorme responsabilidad para impulsar las reformas necesarias para consolidar la transformaci¨®n del pa¨ªs. No habr¨¢ ni arbitrariedad, ni prepotencia, ni abuso de poder. La presidenta har¨¢ un uso responsable y prudente de esa enorme fuerza, que le otorgar¨¢ pr¨¢cticamente el poder constituyente para modificar la Constituci¨®n.
P. ?No les preocupa que esa mayor¨ªa calificada se vuelva un grillete para la propia presidenta? Es decir, que el partido vaya por un camino distinto al marcado por ella, e incluso la someta.
R. No, porque somos parte de un movimiento y todos vamos al mismo lado. Cuando yo digo que [la mayor¨ªa] se ejercer¨¢ con responsabilidad, no quiere decir que se va a ejercer con tibieza; hay un mandato popular, un programa de gobierno, un movimiento, hay principios, valores y objetivos que son muy claros y por ellos vot¨® el pueblo de M¨¦xico. Yo no veo posible que el partido vaya por un lado y la presidenta por el otro. Ella es la l¨ªder de este movimiento y es la que marcar¨¢ los ritmos.
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