Europa busca fortalecerse

La Uni¨®n Europea fue en su embri¨®n una uni¨®n puramente econ¨®mica. Y sabe que buena parte de su futuro y estabilidad sigue dependiendo del cierre de acuerdos comerciales con regiones allende los l¨ªmites de un viejo continente rico quiz¨¢s en valores pol¨ªticos, pero pobre en materias primas y otros productos esenciales para seguir siendo un jugador clave del tablero mundial. Esta realidad se ha hecho m¨¢s acuciante despu¨¦s de que la pandemia pusiera de relieve su excesiva dependencia de algunos mercados (China) para una parte esencial de su cadena de producci¨®n. Y de que la guerra de Rusia en Ucrania mostrara otras vulnerabilidades econ¨®micas m¨¢s graves de un club que confi¨® demasiado tiempo en alianzas con pa¨ªses rivales en lo econ¨®mico y alejados de sus valores democr¨¢ticos. La posibilidad de que en poco m¨¢s de a?o y medio Donald Trump pueda volver a ocupar la presidencia de Estados Unidos no hace m¨¢s que exacerbar la necesidad de que Europa se apresure a estrechar lazos con potenciales nuevos socios. As¨ª lo reconoce la propia UE en su Estrategia Europea de Seguridad Econ¨®mica, presentada en junio, donde se establece que uno de los objetivos clave es fortalecer ¡°la seguridad econ¨®mica, entre otras cosas, impulsando y ultimando los acuerdos comerciales¡±.

Que Bruselas es m¨¢s que consciente de la urgencia del momento lo muestra el fuerte impulso que las principales autoridades europeas le han dado en los ¨²ltimos meses a cerrar los tratados que lleva a?os negociando: la presidenta de la Comisi¨®n, Ursula von der Leyen, estuvo en julio en Filipinas para darle un nuevo impulso a las negociaciones estancadas desde hace seis a?os. Este verano, la UE tambi¨¦n anunci¨® el cierre de acuerdos con Kenia y Nueva Zelanda, y espera hacer lo mismo, antes de que acabe el a?o ¡ªy la presidencia espa?ola de turno de la UE, que impulsa esta reapertura europea a Latinoam¨¦rica¡ª, con Chile y M¨¦xico. Lo mismo busca lograr con Australia y con Mercosur ¡ªdel que ahora ha salido el populista brasile?o Jair Bolsonaro¡ª.

Este ¨ªmpetu choca con obst¨¢culos internos, por los vetos a¨²n vigentes de pa¨ªses como Francia o Austria por motivos proteccionistas. Pero tambi¨¦n con retos externos: Europa ya no es uno de los pocos socios econ¨®micamente ventajosos y geopol¨ªticamente decisivos y los pa¨ªses con los que negocia creen que ahora pueden plantearse otras alianzas, a menudo, con menos condicionantes medioambientales o exigencias democr¨¢ticas. Son valores, sin embargo, que la UE no deber¨ªa abandonar solo por ocupar mejores posiciones en un mundo cada vez m¨¢s competitivo.