Aire fresco para Guatemala
Bernardo Ar¨¦valo se impone en la segunda vuelta electoral con un mensaje de renovaci¨®n y de lucha contra la corrupci¨®n

El rotundo triunfo de Bernardo Ar¨¦valo en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales celebradas el domingo en Guatemala supone un importante giro pol¨ªtico y un soplo de aire fresco para el pa¨ªs centroamericano. En primer lugar, el candidato, de posiciones progresistas, gan¨® por sorpresa planteando un desaf¨ªo a las ¨¦lites tradicionales que emprendieron un camino de corte autoritario durante el mandato del presidente saliente, Alejandro Giammattei. Y, en segundo lugar, la victoria, que ha llenado de esperanzas a la mayor¨ªa de la sociedad guatemalteca, abre una ventana reformista que resulta necesaria frente a la corrupci¨®n y a la decadencia de las instituciones.
Ar¨¦valo, de 64 a?os, soci¨®logo y diplom¨¢tico especialista en resoluci¨®n de conflictos, no estaba ni siquiera en el radar de las encuestas hace dos meses. Sin embargo, gracias a un discurso de ruptura con las din¨¢micas viciadas de la pol¨ªtica local, se asegur¨® en junio un lugar en la segunda vuelta junto con la ex primera dama Sandra Torres, representante del establishment. Hijo del exmandatario Juan Jos¨¦ Ar¨¦valo, quien en 1945 puso fin a un ciclo de dictaduras militares, hace una d¨¦cada impuls¨® el Movimiento Semilla, una iniciativa de un grupo de acad¨¦micos, intelectuales y profesionales j¨®venes que se convirti¨® en partido tras la llamada ¡°primavera democr¨¢tica¡± de 2015.
El esp¨ªritu de aquella oleada de movilizaciones contra la corrupci¨®n, truncada entonces por el mandato de Jimmy Morales, es el que volvi¨® a inundar las calles de Ciudad de Guatemala tras conocerse los resultados, que otorgaron a Ar¨¦valo la victoria por m¨¢s de 20 puntos de ventaja sobre su contrincante. Pero el trabajo del presidente electo no va a ser sencillo. Entre la primera y la segunda vuelta un sector de la Fiscal¨ªa y del poder judicial intent¨® impugnar, sin ¨¦xito, la candidatura del Movimiento Semilla. No lo logr¨®, aunque el ganador recibir¨¢ una herencia especialmente complicada de impunidad, altos ¨ªndices de pobreza y una creciente inseguridad. Durante la ¨²ltima etapa del mandato de Giammattei se intensific¨® la persecuci¨®n de fiscales, activistas y periodistas, principalmente los que investigaron al actual Gobierno, como el fundador de elPeri¨®dico, Jos¨¦ Rub¨¦n Zamora, hoy en la c¨¢rcel.
La capacidad de resistencia de las ¨¦lites vinculadas a un sistema carcomido por los privilegios y el oligopolio, el llamado ¡°pacto de corruptos¡±, ser¨¢ tambi¨¦n el principal obst¨¢culo de Ar¨¦valo. Con esta premisa, el futuro mandatario, que asumir¨¢ el cargo en enero de 2024, tiene ante s¨ª el reto de encauzar el pa¨ªs por la senda democr¨¢tica. Los pr¨®ximos meses ser¨¢n delicados. La prioridad debe ser no solo mantenerse vigilante en el largo proceso de traspaso de poderes, sino tambi¨¦n la de tejer con inteligencia los apoyos necesarios para impulsar su proyecto y mantener la gobernabilidad.
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