Impuestos al poder econ¨®mico
Los grav¨¢menes a los beneficios de la banca y a las grandes fortunas tendr¨¢n sentido mientras no se afronte una reforma del sistema fiscal
Los beneficios obtenidos por los cinco grandes bancos espa?oles alcanzaron en 2023 los 26.088 millones de euros, el 26% m¨¢s que en el ejercicio anterior. Es una cosecha extraordinaria, favorable para el sector. Y para Espa?a si su desglose se somete a una distribuci¨®n sensata y no extractiva: dividendos, remuneraciones, impuestos, innovaci¨®n, reservas. La citada cuant¨ªa ha reiniciado el debate sobre el impuesto especial a la banca, pero conviene ampliar el foco. Es toda la carga fiscal sobre las personas f¨ªsicas y jur¨ªdicas que tienen mayor poder econ¨®mico lo que requiere una visi¨®n de conjunto, o sea, el gravamen especial a financieras y el¨¦ctricas, la fiscalidad sobre el patrimonio y el impuesto de sociedades. Sobre esas figuras y sobre todo el sistema impositivo est¨¢ pendiente una reforma con detenimiento que se intent¨® en la anterior legislatura sin ¨¦xito. Lo mismo cabe decir del sistema de financiaci¨®n auton¨®mica, cuya revisi¨®n est¨¢ pendiente desde 2014.
Para evitar la improvisaci¨®n y los arreglos de urgencia, convendr¨ªa convocar unos Estados Generales de la situaci¨®n fiscal, sus insuficiencias y sus soluciones, patrocinados no por el Gobierno ni por la oposici¨®n, sino por el Parlamento. De lo contrario, Espa?a seguir¨¢ abocada a la dial¨¦ctica de brocha gorda. Por un lado, la propuesta populista ¡ªde cuya inoperancia hay evidencias cient¨ªficas¡ª de rebaja de impuestos generalizada para crecer m¨¢s. Por otro, una exacci¨®n recaudatoria justificada por la necesidad de gasto y la escasa presi¨®n fiscal en relaci¨®n con la UE, pero que no traza cu¨¢l es el deseable horizonte de estabilidad.
Mientras, hay que reclamar planteamientos que no contradigan la realidad. Pese a que Espa?a va reduciendo la brecha fiscal con sus vecinos europeos, la recaudaci¨®n por el impuesto de sociedades es la ¨²nica que sigue desplomada de su m¨¢ximo de 44.800 millones en 2007, mientras que las de los otros dos grandes impuestos, el IRPF y el IVA, han aumentado sensiblemente. La tributaci¨®n por patrimonio tambi¨¦n es tormentosa. Ante la carrera desfiscalizadora de la Comunidad de Madrid y de otras autonom¨ªas conservadoras ¡ªque redirigen as¨ª la presi¨®n recaudatoria bien hacia otras comunidades, bien hacia Hacienda¡ª, el Gobierno impuls¨® un tributo sobre grandes fortunas. Quienes reivindican el principio de igualdad ¡ªpor ejemplo, en la discusi¨®n sobre la ley de amnist¨ªa¡ª deber¨ªan tener en cuenta que este es indivisible, y que un instrumento b¨¢sico para reducir la desigualdad social que corroe a nuestras sociedades es la tributaci¨®n sobre la riqueza, m¨¢s todav¨ªa que sobre la renta, como acaba de subrayar la propuesta del Observatorio Fiscal de la UE de establecer una nueva tasa del 2% a los milmillonarios.
En cuanto al gravamen especial a la banca por los beneficios a?adidos a causa de los aumentos de tipos de inter¨¦s del BCE, que ampl¨ªan sus m¨¢rgenes, todo indica que esos tipos continuar¨¢n altos durante un cierto plazo. No conviene, adem¨¢s, olvidar que los bancos centrales subvencionan a la banca privada con un tipo espec¨ªfico, ahora del 4%, en favor de los dep¨®sitos que esta les encomienda: les brinda unos 140.000 millones de beneficios garantizados en toda la eurozona, de los cuales, hasta agosto de 2023, m¨¢s de 9.000 recayeron en las entidades espa?olas. La expectativa es que este tipo espec¨ªfico detraiga liquidez al sistema productivo y reduzca la inflaci¨®n, pero todo indica que esta ya est¨¢ controlada. As¨ª pues, las razones espec¨ªficas para ese impuesto, mejorable en aspectos que podr¨ªan afinarse en una revisi¨®n general del sistema fiscal, siguen pareciendo s¨®lidas.
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