El juez absuelve al m¨¦dico del CIE acusado de la muerte de Samba Martine pero critica el tratamiento que recibi¨®
El magistrado constata una serie de deficiencias en el tratamiento dado a la inmigrante, pero considera ¡°injusto¡± cargar ¨²nicamente en el doctor toda la culpa
El Juzgado de lo Penal 21 de Madrid ha absuelto al m¨¦dico acusado de la muerte de la congole?a Samba Martine, que falleci¨® en 2011 tras pasar 38 d¨ªas en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Aluche. El juez considera que ¡°la actividad del acusado fue uno de los factores que provoc¨® el deceso¡±, pero mantiene que las omisiones de otras personas y las deficiencias burocr¨¢ticas ¡°tuvieron un peso muy relevante¡± en que la interna no recibiera el tratamiento debido.
El magistrado constata una serie de deficiencias en el tratamiento dado a Martine, pero considera ¡°injusto¡± cargar ¨²nicamente en el acusado, Fernando Hern¨¢ndez, que la atendi¨® el 15 y 30 de noviembre, la responsabilidad de su muerte.
Martine falleci¨® el 19 de diciembre de 2011 de una infecci¨®n que afecta principalmente a pacientes con VIH. El servicio m¨¦dico del Centro de Estancia Temporal para Inmigrantes (CETI) de Melilla, por donde Martine pas¨® tras entrar irregularmente en Espa?a, sab¨ªa que la mujer ten¨ªa el virus, pero su expediente nunca lleg¨® a Madrid. La mujer acudi¨® 11 veces a la enfermer¨ªa del CIE con s¨ªntomas que no remit¨ªan, pero los doctores solo vieron un cuadro gripal. No descartaron enfermedades graves ni prescribieron pruebas.
Indagar en su estado de salud habr¨ªa permitido, al menos, que Martine tuviese un tratamiento. El diagn¨®stico del VIH, coincidieron los tres peritos que declararon en el juicio, habr¨ªa facilitado el descubrimiento de una infecci¨®n que, con el tratamiento adecuado, deja de ser letal en un 70% de los casos.
¡°Est¨¢ claro que la actividad del acusado fue uno de los factores que provoc¨® el deceso, pero ni fue el ¨²nico y exclusivo ni mucho menos, y tampoco el m¨¢s relevante¡±, recoge la sentencia. Otro m¨¦dico y una enfermera del CIE tambi¨¦n estaban acusados, pero est¨¢n en busca y captura.
El juez ve una infracci¨®n en la actuaci¨®n del doctor, pero no lo suficientemente grave como para atribuirle un delito de homicidio imprudente, como ped¨ªa la acusaci¨®n popular y particular. ¡°No se tiene duda de que el acusado infringi¨® la lex artis [reglas de la buena praxis m¨¦dica] pues la existencia de un paciente con dolor de cabeza, con tos, con roncus y sibilancias durante 15 d¨ªas [...] merec¨ªa la realizaci¨®n de una radiograf¨ªa [...] para descartar una afecci¨®n pulmonar¡±, mantiene.
La sentencia refleja la estupefacci¨®n del magistrado ante la descoordinaci¨®n entre los dos centros por los que pas¨® Martine ¡°Es evidente que si se hubiese recibido el informe del CETI de Melilla donde se hac¨ªa constar que era portadora del VIH, hubiera estado clara la importancia de la enfermedad y la necesidad de ingreso inmediato¡±, mantiene el magistrado, que insiste: ¡°No es entendible que no hubiese coordinaci¨®n de datos entre los distintos centros¡±.
El juez mantiene que la conducta del procesado podr¨ªa considerarse grave, si hubiese "motivos suficientes y claros" para pensar que Martine ten¨ªa VIH, porque en ese caso la remisi¨®n al hospital "hubiese debido ser inmediata". La acusaci¨®n defendi¨® que, a pesar de que el expediente m¨¦dico no se comparti¨®, hab¨ªa elementos que pod¨ªan llevar a pensar que la mujer era seropositiva. Uno de ellos era el origen de Martine, la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo, un pa¨ªs con alta prevalencia del virus y que el juez no ha tenido en cuenta. El otro era la picaz¨®n que la mujer sent¨ªa en la zona perianal y que era compatible con una candidiasis. La infecci¨®n por este hongo es frecuente en algunas regiones, pero en esa zona es, seg¨²n una de las expertas que declar¨®, un indicativo del virus. El magistrado, sin embargo, considera que no ha quedado probado que Martine sufriera esa infecci¨®n y que, por tanto, no hab¨ªa ¡°signos evidentes¡± que llevasen al acusado a inferir que Martine ten¨ªa el VIH.
Al final de su decisi¨®n, el magistrado destaca un hecho que no tiene relaci¨®n con la muerte ni con la conducta del acusado: "No puede dejar de hacerse constar lo penoso y lamentable que resulta que el traslado al hospital el 19 de diciembre, se efectuase en un coche policial y no en una ambulancia, a la vista del estado tan grave de la interna".
¡°Pueden producirse m¨¢s muertes¡±
La acusaci¨®n popular y la particular, que representa a la madre y a la hija de Martine, que ten¨ªa 10 a?os cuando su madre muri¨®, se plantean recurrir la sentencia. Los letrados, junto a una serie de entidades sociales que trabajan en los CIE, destacan, sin embargo, algunos pronunciamientos del juez sobre el tratamiento que recibi¨® la congole?a en su paso por Espa?a. ¡°[El auto] certifica la confluencia de negligencias individuales y de un p¨¦simo funcionamiento de la Administraci¨®n¡±, sostienen en un comunicado. ¡°La muerte de Samba se pudo haber evitado. Fue consecuencia de la negligencia y de la indiferencia de quienes ten¨ªan la obligaci¨®n de atenderla y de velar por su salud. Dado que los CIE no han mejorado, es de temer que se puedan seguir produciendo m¨¢s muertes¡±, denuncian en su escrito, en el que exigen el cierre definitivo de los centros de internamiento.
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