La invisibilidad de los superdotados
Expertos y asociaciones reclaman la necesidad de formar al profesorado para detectar y atender a estos alumnos tras la queja de una madre de C¨®rdoba
Ana Esther Gal¨¢n recuerda cuando su hija Carla le coment¨® que quer¨ªa dise?ar una l¨ªnea de moda unisex. ¡°El maestro le dijo que no se juntara tanto con los ni?os y ella dedujo que si creaba ropa que sirviera para ambos sexos el profesor no sabr¨ªa con qui¨¦n estaba. Desde peque?a sab¨ªamos que ten¨ªa altas capacidades¡±, afirma. Esta madre de C¨®rdoba ha denunciado las supuestas trabas que sufre para que los servicios educativos de la Junta de Andaluc¨ªa reconozcan el nivel de inteligencia de su hija de seis a?os. Expertos y asociaciones critican la invisibilidad de este colectivo, pese a las leyes de algunas Administraciones. ¡°Son medidas de apariencia. El problema es la falta de formaci¨®n del profesorado para detectar a estos ni?os¡±, asegura Margarita Colondr¨®n,?presidenta de la Confederaci¨®n Espa?ola de Altas Capacidades Intelectuales (Confines).
El periplo de Gal¨¢n comenz¨® en marzo de 2017, cuando pidi¨® al centro que tomara medidas preventivas. "No quer¨ªa que a ella le pasara como a su hermano mayor, Pedro es superdotado y sufri¨® depresi¨®n por no ser atendido a tiempo¡±, afirma. Seg¨²n su relato, su insistencia hizo que el colegio accediera a valorarla el pasado abril, pero determin¨® que no presentaba caracter¨ªsticas diferenciadoras. ¡°El informe est¨¢ eminentemente falseado¡±, denuncia la madre. Tras esto, los padres acudieron al pediatra y este les deriv¨® a Salud Mental. ¡°Esta especialista s¨ª determin¨® que Carla tiene altas capacidades¡±, apunta la madre, quien se?ala que la ni?a ha comenzado primaria en un colegio privado hasta que se encuentre una soluci¨®n.?Este peri¨®dico no ha logrado conocer la versi¨®n de Educaci¨®n.
Entre las consecuencias por no ser diagnosticados, Colondr¨®n hace hincapi¨¦ en el fracaso escolar: ¡°Son ni?os desmotivados, que se aburren en clase al no recibir la atenci¨®n necesaria y que pueden desarrollar un sentimiento de frustraci¨®n grande. Tambi¨¦n pueden sufrir depresi¨®n, ansiedad¡ Tener m¨¢s inseguridad y una autoestima baja¡±. Esta situaci¨®n los puede conducir a ser personas m¨¢s agresivas o que se a¨ªslen del mundo. Colondr¨®n asegura que uno de cada dos de estos ni?os sufre acoso en clase.
"Esto es una lucha contra Goliat"
Ana Esther Gal¨¢n asegura que su lucha por lograr que valoren a su hija Carla es solo un ejemplo de muchos m¨¢s. "Esto es una lucha contra Goliat", asegura. "La mayor¨ªa de las familias tiene miedo institucional y opta por tirar la toalla", expone Margarita Colondr¨®n, de Confines. Es el caso de la zaragozana Beatriz Urries, quien tras pegar en todas las puertas se ha resignado a que su hijo Alejandro termine este a?o la Primaria para cambiarlo a un centro concertado que pueda atender sus necesidades. "Entr¨® al colegio con tres a?os sabiendo leer, escribir, sumar, multiplicar,...", dice esta madre. Tras su insistencia, el centro valor¨® que Alejandro "no destacaba". "Casos como estos son generalizados por mucho que las Administraciones digan que son aislados", remarca la presidenta de la asociaci¨®n aragonesa Sin L¨ªmites, Teresa Mill¨¢n.
En Espa?a hay detectados 27.000 estudiantes con altas capacidades y faltar¨ªan otros 135.000 por diagnosticar, seg¨²n la presidenta de la fundaci¨®n El mundo del superdotado, Carmen Sanz. La situaci¨®n para identificar a estos ni?os es diferente en cada comunidad. "Las hay como Andaluc¨ªa, Murcia, Madrid y Arag¨®n que cuentan con protocolos espec¨ªficos [con legislaci¨®n o a nivel interno] para identificarlos; algunas como Valencia o Castilla y Le¨®n que est¨¢n trabajando en ello; y otras como Catalu?a o Extremadura que no tienen nada¡±, expone Colondr¨®n.?"Es primordial que se unifiquen criterios, un ni?o no puede ser superdotado en Andaluc¨ªa y en Catalu?a, no. Hay que unificar c¨®mo identificarlos, c¨®mo evaluarlos, cu¨¢les son sus caracter¨ªsticas,...",?afirma el pediatra y neur¨®logo Javier Berch¨¦.
De los protocolos existentes, Colondr¨®n?califica el andaluz como ¡°el menos malo¡±. "En Andaluc¨ªa, la normativa marca que los centros deben realizar dos cuestionarios a padres y profesores sobre el alumno. Uno al finalizar Infantil y otro cuando se termina primaria. Si se sospecha que el ni?o puede tener altas capacidades, entonces se le hace las pruebas de nivel de inteligencia. Tambi¨¦n se puede iniciar el protocolo en cualquier momento de Infantil¡±, explica la presidenta de la Federaci¨®n Andaluza de Altas Capacidades Intelectuales (FASI), Carmen Trillo. En Baleares, sin embargo, la aplicaci¨®n del protocolo no es obligatoria. "Se deja a la voluntad de cada centro, pero ya est¨¢ en casi todos", se?ala?Rosabel Rodr¨ªguez.,?responsable del grupo de investigaci¨®n de altas capacidades de la Universitat de les Illes Balears.?
El ¡°principal obst¨¢culo¡± para detectar a estos ni?os es la falta de formaci¨®n del profesorado. ¡°Piensan que son ni?os brillantes,...¡±, apunta Trillo. "A¨²n hoy escucho a profesores que dudan de que su alumno sea superdotado porque no saca 10 en todo", a?ade Berch¨¦. "Tanto los docentes como los orientadores se quejan de la falta de preparaci¨®n", apunta el secretario estatal de acci¨®n sindical de ANPE, Ram¨®n Izquierdo. "Es muy f¨¢cil cuestionar la capacidad de los profesores, pero creemos que el 99% est¨¢ preparado para identificar a estos ni?os. Lo que existe es un aluvi¨®n de padres que piden estas valoraciones mientras que la Administraci¨®n intenta ocultar sus verg¨¹enzas con estos casos", denuncia Javier Herrera, miembro de la Asociaci¨®n de Profesores de Instituto de Andaluc¨ªa. La formaci¨®n de los docentes es "fundamental" si se tiene en cuenta que, en la mayor¨ªa de los protocolos, son los que tienen la llave para que los eval¨²en. "A esto se suma que el equipo que realiza estas pruebas est¨¢ formado para detectar casos de trastorno por d¨¦ficit de atenci¨®n e hiperactividad, pero no a estos alumnos", dice Colondr¨®n.?
Sin embargo, las Administraciones sacan pecho de su labor en este aspecto. Andaluc¨ªa asegura que cuenta con profesorado de pedagog¨ªa terap¨¦utica y que otorga subvenciones a los docentes para la elaboraci¨®n de materiales curriculares; Murcia habla de 30 cursos y 10 jornadas sobre esta materia en la ¨²ltima d¨¦cada y Arag¨®n defiende la "formaci¨®n integral" de sus profesores con m¨¢s de 3.000 actividades al a?o. "En Baleares, el primer punto del protocolo es la formaci¨®n del profesorado a trav¨¦s de cursos y talleres", explica Rodr¨ªguez.
Pero los expertos y las asociaciones lo tienen claro. ¡°No hay inter¨¦s ni en la Administraci¨®n ni en la comunidad educativa¡±, critica Carmen Sanz. Como ejemplo, Jos¨¦ Luis S¨¢nchez, padre de dos alumnos con altas capacidades, se?ala la ¨²ltima medida tomada por el Gobierno de Murcia. "Han subido las puntuaciones que deben alcanzar estos ni?os para que sean valorados como de altas capacidades. En Madrid ya se hizo y lo ¨²nico que se buscaba era ahorrarse plazas en las extraescolares", denuncia S¨¢nchez. La consejer¨ªa murciana asegura que la revisi¨®n del protocolo solo busca "mejorar, con las ¨²ltimas aportaciones de varios autores", la detecci¨®n de estos escolares.?
Las extraescolares no son la soluci¨®n
La falta de formaci¨®n del profesorado para detectar a alumnos con altas capacidades tambi¨¦n provoca que cojee la atenci¨®n que reciben, seg¨²n los expertos. Eso provoca que las adaptaciones curriculares o las actividades de refuerzo que se les deber¨ªan ofrecer, y que se contemplan en algunos protocolos, queden en papel mojado. ¡°La adaptaci¨®n curricular brilla por su ausencia, se comenten errores como poner a ayudar a otros compa?eros, m¨¢s trabajo en casa,¡¡±, dice Margarita Colondr¨®n, de Confines, quien se?ala que en la mayor¨ªa de las comunidades la medida que se toma es ofrecer a los ni?os clases extraescolares. ¡°Estas no son la soluci¨®n¡±, dice Colondr¨®n.
Los expertos se?alan que lo ideal para el alumno es seguir en su centro. ¡°Una de las medidas es hacerles pasar de curso completo o en algunas asignaturas, pero hay que preparar al alumno con la compactaci¨®n curricular y al aula, para que sus compa?eros lo acojan como uno m¨¢s¡±, se?ala Colondr¨®n. Los especialistas tambi¨¦n defienden la existencia de aulas especiales como las hay en Murcia y Arag¨®n, pero descartan la creaci¨®n de centros especiales. "Hay que saber gestionar y desarrollar el talento de estos ni?os", dice Javier Berch¨¦.
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