La ley antitabaco no da m¨¢s de s¨ª: sube el consumo y cambian los h¨¢bitos
Los expertos creen que la norma no sirve para los nuevos productos y piden que se aumente el precio de la cajetilla, entre otras medidas
La ley antitabaco no da m¨¢s de s¨ª. El efecto disuasorio de la norma que entr¨® en vigor en 2011 ha empezado a flaquear y los fumadores en Espa?a est¨¢n repuntando. La encuesta Edades del Ministerio de Sanidad se?ala que, en 2017, ¨²ltimo a?o del que se tienen cifras, los consumidores diarios de tabaco eran un 34%, cuatro puntos porcentuales m¨¢s que en 2010. La Sociedad Espa?ola de Medicina Familiar y Comunitaria (Semfyc) public¨® ayer otra encuesta que constata el aumento de fumadores y la percepci¨®n de que la ley antitabaco no se cumple. Los expertos se?alan que, efectivamente, la norma precisa una actualizaci¨®n con medidas m¨¢s restrictivas y de ayuda para dejar el h¨¢bito.
La encuesta de la Semfyc que hacen cada a?o los profesionales de atenci¨®n primaria a usuarios de los servicios de salud se?ala que el 23,3% de la poblaci¨®n fuma, 2,3 puntos porcentuales m¨¢s que en 2017. Aunque los datos no son comparables con los de la encuesta Edades ¡ªesta es bienal y m¨¢s amplia (21.000 cuestionarios frente a los casi 9.000 de la Semfyc)¡ª, ¡°s¨ª se puede sacar una tendencia¡±, matiza la portavoz del Grupo de Abordaje al Tabaquismo de la Semfyc, Luc¨ªa Gorreto. ¡°Se est¨¢ viendo un repunte de gente que fuma y que la edad de inicio ha bajado¡±, agrega. A su vez, la cifra de exfumadores ha pasado del 37% al 33,7% en tres a?os.
La encuesta tambi¨¦n se?ala datos ¡°preocupantes¡± sobre el cumplimiento de la ley antitabaco: casi dos de cada tres personas perciben que no se cumple la prohibici¨®n de fumar en terrazas de bares con m¨¢s de dos paredes. ¡°Se ve. La ley no se est¨¢ cumpliendo porque nadie obliga a cumplirla y la gente se relaja¡±, dice Gorreto.
CONSUMIDORES DIARIOS DE TABACO
En los ¨²ltimos 30 d¨ªas entre personas de 15 a 64 a?os, en %
Los expertos coinciden en que, si bien la norma de 2011 fue ¡°un avance importante¡± y ampli¨® la ¡°concienciaci¨®n social¡±, casi una d¨¦cada despu¨¦s se ha quedado peque?a. ¡°Estamos estancados y no ha habido voluntad pol¨ªtica para hacer m¨¢s. La ley se ha cumplido bastante bien, excepto en lo que respecta a las terrazas. Las autoridades deben vigilar que se cumpla y, adem¨¢s, hay que ir m¨¢s all¨¢¡±, apunta Francisco Camarelles, m¨¦dico de la Semfyc y exvicepresidente del Comit¨¦ Nacional de Prevenci¨®n del Tabaquismo.
La legislaci¨®n ha avanzado para adaptarse a las directrices europeas sobre el empaquetado (m¨¢s restrictivo) o para regular nuevos productos, como el cigarrillo electr¨®nico (en 2014 se prohibi¨® su uso en hospitales y escuelas y se limit¨® su publicidad). Sin embargo, los expertos consideran estos cambios insuficientes. ¡°La ley no est¨¢ regulando como es debido estas nuevas formas de consumo de tabaco. El cigarrillo electr¨®nico o el IQOS [un dispositivo de tabaco calentado pero sin combusti¨®n] se venden como poco perjudiciales y que ayudan a dejar de fumar y hay estudios que prueban que no es as¨ª¡±, apunta Carlos Jim¨¦nez, presidente de la Sociedad Espa?ola de Neumolog¨ªa (Separ). El especialista sostiene, adem¨¢s, que la ley es ¡°muy prohibicionista y no asistencial, porque no da salida a las personas que quieren dejar de fumar¡±. ¡°La ley para regular el tabaco ha funcionado y mucha gente lo dej¨®, pero los fumadores que quedan son m¨¢s dif¨ªciles, m¨¢s dependientes, y ya no les llega con las medidas de esta ley para deshabituarse¡±, agrega.
Los profesionales proponen reforzar medidas asistenciales, como ampliar las unidades de tabaquismo, incrementar la formaci¨®n de los sanitarios y financiar los f¨¢rmacos para dejar de fumar (el tratamiento cuesta unos 200 euros). En Navarra, donde s¨ª se financian los medicamentos (en 2018 esta comunidad invirti¨® 734.000 euros y se beneficiaron 6.139 personas), la prevalencia del consumo es del 24,2%, seg¨²n Edades, 10 puntos menos que la media espa?ola.
DEBE ESTAR PROHIBIDO FUMAR....
M¨¢s vigilancia
Los profesionales proponen, adem¨¢s de incrementar la vigilancia para que se cumpla la norma, impulsar el empaquetado gen¨¦rico (sin logotipos, mismo color y homogeneidad entre las marcas) y ampliar la prohibici¨®n a otros espacios al aire libre. Esta medida, adem¨¢s, cuenta con el favor del p¨²blico, seg¨²n la encuesta de la Semfyc: el 86% es favorable a prohibir fumar en veh¨ªculos privados cuando haya ni?os ¡ªbaja al 54% si no hay menores en el coche¡ª y tres de cada cuatro avalan vetar el tabaco en espacios al aire libre donde se concentre gente.
PERCEPCI?N DEL CUMPLIMIENTO DE LA LEY
Subir el precio de los cigarrillos, que en Espa?a es uno de los m¨¢s bajos de Europa, ser¨ªa la otra gran medida de disuasi¨®n. ¡°Hay estudios que indican que subir un 1% el precio supone una reducci¨®n del inicio al consumo entre los j¨®venes del 10%¡±, apunta Jim¨¦nez.
El Ministerio de Sanidad admite que est¨¢ estudiando algunas de estas medidas, como la de la financiaci¨®n de los f¨¢rmacos.
"La gente prueba el tabaco por la presi¨®n de la industria tabaquera"
La Organizaci¨®n Mundial de la Salud ha vuelto a acreditar al Instituto Catal¨¢n de Oncolog¨ªa (ICO) como uno de sus centros colaboradores para el control del tabaco. Esteve Fern¨¢ndez, que es el director de Epidemiolog¨ªa y Prevenci¨®n del C¨¢ncer del ICO, confirma que hay ¡°datos consistentes de un peque?o repunte¡± de fumadores, pero rechaza que sea por una falta de eficacia de la ley antitabaco. Hay m¨¢s pol¨ªticas que influyen.
Pregunta. ?Por qu¨¦ repunta el consumo?
Respuesta. En Espa?a tenemos abandonadas las campa?as medi¨¢ticas preventivas y dirigidas a los fumadores. El precio est¨¢ muy lejos de los de otros pa¨ªses europeos y los j¨®venes tienen m¨¢s accesibilidad. Hay una epidemia de fumadores de tabaco de liar porque es m¨¢s barato.
P. ?Qu¨¦ est¨¢ fallando?
R. La ley que tenemos es buena pero hay que hacerla cumplir. Habr¨ªa que declarar las terrazas sin humo y mejorar otros espacios, como zonas deportivas al aire libre y coches particulares.
P. ?Se ha perdido el miedo al tabaco?
R. No, en ese sentido hemos avanzado bien. El problema es la percepci¨®n de riesgo, sobre todo en los j¨®venes. Le dices que lo que hagas hoy te puede matar dentro de 25 a?os y les queda lejos. Piensan que su riesgo es muy bajo.
P. Con toda la informaci¨®n que hay sobre los riesgos, ?por qu¨¦ se empieza a fumar ahora?
R. La gente prueba el tabaco por la presi¨®n de la industria tabaquera. La l¨¢stima es que las tabaqueras venden un producto que mata a sus usuarios y tienen que buscar otros productos y nuevos consumidores. Dicen que no se dirigen a la poblaci¨®n joven pero lo hacen
P. ?El mercado va m¨¢s r¨¢pido que las leyes de protecci¨®n de la salud?
R. El mercado es muy salvaje. Hace unos a?os salieron los cigarrillos electr¨®nicos y tardaron un a?o y medio en regularlo. La capacidad de reacci¨®n de la Administraci¨®n podr¨ªa ser mayor.
P. ?Faltan recursos para atajar la epidemia del tabaco?
R. Hay recursos pero son insuficientes. Algunas soluciones vienen por los tratamientos, la prevenci¨®n, la educaci¨®n y la investigaci¨®n de qu¨¦ puede ser m¨¢s eficaz. No existe una l¨ªnea de deshabituaci¨®n tab¨¢quica nacional. Se tendr¨ªan que dedicar m¨¢s recursos a formaci¨®n de profesionales y a intervenciones en escuelas.
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