La reforma de la ¡®ley del solo s¨ª es s¨ª¡¯ abre una nueva brecha en el movimiento feminista
Decenas de colectivos se alinean con la propuesta del PSOE para enmendar la ley mientras otros tantos critican el cambio, que ven como una vuelta al pasado
Lo que dio pie a la mayor revoluci¨®n feminista de la historia de Espa?a amenaza ahora con desgajar al movimiento m¨¢s de lo que ya lo han hecho las posiciones encontradas sobre la llamada ley trans. La ley del solo s¨ª es s¨ª tuvo su origen en el tsunami social que provocaron las primeras resoluciones judiciales en el caso de La Manada, con la petici¨®n de cientos de miles de mujeres de una reforma que impidiera castigar como abuso lo que en la calle se entiende como violaci¨®n. Pero ahora est¨¢ ahondando en la divisi¨®n que ya provocaron las primeras rebajas de penas y excarcelaciones de delincuentes sexuales en noviembre, tras entrar en vigor la norma, ya que los reos tienen derecho a que se les aplique la ley penal m¨¢s favorable.
Entonces hubo cruce de acusaciones y posicionamientos relacionados con cuestiones t¨¦cnicas de la ley, pero tambi¨¦n pol¨ªticas que coincid¨ªan, en parte, con la divisi¨®n creada alrededor de la ley trans. Ahora, el choque es entre quienes consideran que la propuesta socialista de volver a introducir la violencia o la intimidaci¨®n en cada art¨ªculo de la norma supone desplazar el foco del consentimiento ¡ªel coraz¨®n de la ley, y la raz¨®n por la que se puso en marcha¡ª, y las que creen que el modelo no cambia con esta proposici¨®n registrada el lunes en el Congreso, puesto que se mantiene intacto el art¨ªculo referido a ¨¦l.
Esos dos bloques ¡ªlos visibles, porque no todo el movimiento feminista tiene posiciones igual de r¨ªgidas¡ª, son bastante similares a los que ya se atisbaron en oto?o: la parte del movimiento en contra de la ley trans est¨¢ a favor de la propuesta del PSOE, y la que est¨¢ a favor de la norma para las personas trans y el colectivo LGTBIQ+ se posicionan contra esa propuesta y se alinean con el Ministerio de Igualdad, dirigido por Irene Montero (Unidas Podemos), que insiste en que lo que proponen los socialistas es volver al modelo anterior, puesto que se vuelve a introducir ¡°un subtipo agravado¡± de agresi¨®n si concurren violencia o intimidaci¨®n.
En las ¨²ltimas 24 horas, la fragmentaci¨®n ha vuelto a hacerse manifiesta. Por un lado, organizaciones como Contra el Borrado de las Mujeres ¡ªque naci¨® a ra¨ªz de la ley trans y que se posiciona contraria a ella¡ª, han publicado un hilo de Twitter la noche del lunes en el que repasaban los cambios penales que supone la reforma que propone el PSOE y que cerraban con una alusi¨®n a que si esta ley ¡°conten¨ªa errores¡±, la ley trans ¡°no es nada comparado¡± con ella. Y en declaraciones a Europa Press, Sonia G¨®mez, portavoz de Confluencia Movimiento Feminista ¡ªque integra a 70 organizaciones feministas¡ª, se ha posicionado tambi¨¦n a favor de la subida de penas. A su juicio, ¡°a la vista est¨¢ que esa ley est¨¢ mal hecha¡± porque ¡°han salido a la calle violadores¡± y ¡°debe ser modificada, diga lo que diga la ministra Montero¡±, ha a?adido.
Por otro lado, diversos colectivos feministas han salido en defensa de la ley de libertad sexual y decenas de asociaciones han firmado un manifiesto en el que expresan que la norma ¡°es el reflejo de a?os de reivindicaciones del movimiento feminista para alcanzar la libertad sexual de las mujeres y enfrentar las violencias sexuales¡±, y que no permitir¨¢n ¡°ni un paso atr¨¢s en esta ley¡±.
En el comunicado, alrededor de medio centenar de organizaciones ¡ªcomisiones y asambleas del 8-M, entre ellas la de Granada o Madrid y a las que se ha adherido Amnist¨ªa Internacional¡ª han achacado la ofensiva hacia la ley del solo s¨ª es s¨ª al ¡°cambio de mirada¡± que supone colocar el foco principal en el consentimiento de las mujeres, que constituye el eje principal de la norma. ¡°El consentimiento es una expresi¨®n afirmativa, consciente, voluntaria y reversible, cuya inexistencia implica un delito de agresi¨®n sexual¡±, han declarado las asociaciones.
Alrededor de la figura del consentimiento se han estancado precisamente las negociaciones entre el PSOE y Unidas Podemos. Ambos grupos, de acuerdo en subir las penas, no han logrado consensuar c¨®mo argumentar jur¨ªdicamente esa subida. Para las 47 asociaciones y asambleas firmantes, el punitivismo que supone ese aumento de penas no es la respuesta ¨²nica y adecuada para la violencia machista: ¡°Aumentar las penas no nos protege, ni nos ha protegido nunca. La protecci¨®n efectiva de las mujeres se procura, por el contrario, con las medidas que establece esta ley¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
M¨¢s informaci¨®n
Archivado En
- Sociedad
- Irene Montero
- PSOE
- Podemos
- Gobierno de Espa?a
- Feminismo
- Agresiones sexuales
- Reformas penales
- Violaciones
- Agresiones f¨ªsicas
- Errores judiciales
- Ministerio de Igualdad
- Pilar Llop
- Justicia
- C¨®digo penal
- Machismo
- Patriarcado
- Legislaci¨®n
- Leyes Org¨¢nicas
- Tribunales
- Jueces
- Violencia sexual
- Violencia machista
- Violencia g¨¦nero
- Gobierno