Urbes como imanes de talento

OWO es una start-up con sede en el Polo de Contenidos Digitales de M¨¢laga, creadora de un chaleco h¨¢ptico que a?ade el sentido del tacto a la realidad virtual; el producto ha sido reconocido en la mayor feria tecnol¨®gica del mundo, en Las Vegas. Su CEO y fundador, Jos¨¦ Fuertes, dice durante el evento de Retina que se queda en la ciudad andaluza porque, b¨¢sicamente, los trata bien y se lo pone f¨¢cil. A cambio, OWO enriquece el ecosistema empresarial, atrae talento y genera empleo. Quid pro quo, simbiosis o como se le quiera llamar. ¡°No hay mejor sitio para alojarse¡±, insiste. El Polo es un gran im¨¢n para la innovaci¨®n, seg¨²n lo concibe su coordinador, Antonio Quir¨®s. Naci¨® para tratar de cambiar la manera de apoyar la creaci¨®n de start-ups, pasando de un modelo horizontal (incubadora de empresas de todo tipo) a uno vertical, centrado en contenidos digitales y gaming.

En su ecosistema de cu¨¢druple h¨¦lice trabajan coordinadamente Universidad, mundo empresarial, administraci¨®n y j¨®venes creadores, desarrolladores y prosumers. Un caldo rico y nutritivo que tambi¨¦n se da en los parques cient¨ªficos y tecnol¨®gicos, destaca Soledad D¨ªaz, directora gerente de la Asociaci¨®n de Parques Cient¨ªficos y Tecnol¨®gicos de Espa?a. ¡°Su fuerza radica en las sinergias que se establecen entre sus distintos actores. Aportan oportunidades y demandan talento cercano, lo que hace que universidades y centros de formaci¨®n ampl¨ªen su oferta¡±, acota. La llegada del M¨¢laga TechPark ¡ªparque tecnol¨®gico especializado en el sector TIC¡ª a Campanillas fue una bendici¨®n para el distrito malague?o. D¨ªaz subraya el beneficio de un parque tecnol¨®gico al PIB y al empleo del territorio que lo acoge. ¡°Han ayudado a transformaciones importantes en ciudades como Valencia o Granada, que no est¨¢n entre las tops de siempre¡±, recuerda.

¡°El Polo no es un centro para M¨¢laga sino un centro nacional que est¨¢ en M¨¢laga¡±, aclara Quir¨®s, que conecta la apuesta, directamente, con la formaci¨®n y el talento. ¡°Por aqu¨ª han pasado m¨¢s de 7.000 de los mal llamados ninis, que son nuestra arcilla, nuestra plastilina¡±, precisa. El Polo les procura un acercamiento diferente a una industria con un enorme recorrido. ¡°No es lo mismo proponerles 400 horas de formaci¨®n en [lenguaje de programaci¨®n] c sharp que 400 horas para aprender a crear su propio videojuego¡±, diferencia. Elena Ib¨¢?ez, fundadora y CEO de Singularity Experts, coincide en que ¡°hay que explicar los ¡®para qu¨¦¡±, y conocerse muy bien para saber qu¨¦ formato, entre ¡°la locura de la oferta actual¡±, es el que mejor se ajusta a cada cual. M¨¢s o menos l¨ªquido, m¨¢s o menos extenso. ¡°Es una oportunidad¡±, enfatiza.

Orientaci¨®n profesional

Ib¨¢?ez aconseja a las personas sobre trabajos de futuro, pues teme que no se est¨¦ ofreciendo formaci¨®n en puestos que ser¨¢n muy necesarios, como los relacionados con la seguridad y los gemelos digitales, o los experiencialistas (se disculpa por el palabro), que procuran experiencias de usuario en las urbes, para mejorar la vida de sus ciudadanos. Lo achaca a un problema de orientaci¨®n. ¡°Hay trabajos del futuro que no se est¨¢n recomendando y, por lo tanto, no se est¨¢n eligiendo, porque no se les da visibilidad¡±, critica. Opina que la vocaci¨®n, entendida como una llamada muy potente, irrenunciable, la sienten muy pocas personas. Lo que tiene todo el mundo son intereses profesionales, ¡°que es una llamada en voz m¨¢s bajita¡±, compara, y, al contrario que la vocaci¨®n, pueden ser varias. ¡°Has de dedicarte siempre a algo relacionado con tus intereses¡±, aconseja.

Mirada de g¨¦nero

¡°Falta talento en ciberseguridad, y el que hay es poco diverso¡±, denuncia Soledad Antelada, security program manager en Google y fundadora de la organizaci¨®n GirlsCanHack, que aporta la mirada de g¨¦nero a esta jornada. ¡°Hay m¨¢s mujeres, pero no est¨¢n haciendo trabajos t¨¦cnicos, que es donde se toman las decisiones importantes; no se ven ingenieras¡±. No cree que sea porque a las ni?as no les atraiga esa carrera, sino, m¨¢s bien, por la falta de un modelo a seguir. ¡°Si les gusta, que vayan a por ello¡±, les pide. Tambi¨¦n lanza un mensaje a las empresas que no intentan crear diversidad y ¡°echan balones fueras¡± diciendo que la falta de talento STEM femenino es un problema general, y que no tienen la culpa: ¡°Es m¨¢s f¨¢cil de lo que parece. Simplemente, crea un entorno seguro, en el que las mujeres se sientan bienvenidas, y no como peces fuera del agua, y tendr¨¢s un 70% del trabajo hecho¡±.

¡°Hace 12 a?os, en Silicon Valley no exist¨ªa movimiento sobre diversidad, pero ahora hay mucho ruido, se ha tomado m¨¢s conciencia. M¨¢laga est¨¢ empezando, pasar¨¢ lo mismo¡±, vaticina Antelada. ¡°La principal diferencia que observo, en mi experiencia, es la apertura de mente. En el ¨¢rea de la Bah¨ªa de San Francisco se le da la bienvenida a lo nuevo; si eres v¨¢lido, no importa el aspecto que tengas, c¨®mo te vistas, el color de tu piel o con qui¨¦n te acuestas. Es uno de los motivos por los que me he quedado tanto tiempo. Para que te juzguen, tienes que haber hecho algo gordo¡±, sonr¨ªe.