Odebrecht, Santos y Zuluaga: la historia m¨¢s conocida de la financiaci¨®n ilegal de campa?as en Colombia
El esc¨¢ndalo de corrupci¨®n que involucra a la constructora brasile?a es un fantasma que persigue constantemente al expresidente y al exministro
El paso de los a?os no disminuye el ruido alrededor de la financiaci¨®n de las campa?as del expresidente Juan Manuel Santos y de ?scar Iv¨¢n Zuluaga. Si bien no se trata de hechos desconocidos, en esta ocasi¨®n volvieron a la palestra p¨²blica por cuenta del acuerdo entre el conglomerado empresarial Grupo Aval y la justicia de Estados Unidos. En un acuerdo de acusaci¨®n diferida qued¨® evidencia de que Aval admiti¨® haber sobornado a funcionarios p¨²blicos colombianos, entre 2012 y 2015, para que le fuera adjudicada la Ruta del Sol II, una de las principales obras de infraestructura del pa¨ªs. El desarrollo de dicho proyecto deb¨ªa llevarlo a cabo con Odebrecht, que tambi¨¦n actu¨® fraudulentamente y pag¨® coimas. Y es aqu¨ª cuando entran Santos y Zuluaga en la ecuaci¨®n: est¨¢ probado que Odebrecht financi¨® sus respectivas aspiraciones electorales.
Desde 2017 existe certeza de que la constructora brasile?a colabor¨® con las campa?as de Santos, en 2010 y 2014. Respecto a la primera, en una entrevista con Blu Radio, el gerente de ambas postulaciones, Roberto Prieto, admiti¨® p¨²blicamente haber burlado la ley colombiana, que proh¨ªbe que sociedades extranjeras contribuyan financieramente a aspiraciones electorales. ¡°Yo orden¨¦ los afiches operativamente con plata de Odebrecht. Es una realidad. Eso fue una operaci¨®n irregular¡±, asever¨®. Por ello fue condenado a 5 a?os de prisi¨®n. Santos ha dicho que no sab¨ªa de esos recursos, versi¨®n que coincide con la de Prieto.
Frente a la reelecci¨®n en 2014, la Fiscal¨ªa verific¨® que Odebrecht celebr¨® un contrato por 1 mill¨®n de d¨®lares con la firma paname?a Paddington para realizar una encuesta en las principales ciudades del pa¨ªs y cuyo beneficiario era la campa?a de Santos. Otto Bula y Bernardo El¨ªas, excongresistas que fueron condenados por este esc¨¢ndalo, declararon ante la justicia en ese mismo sentido. Los dos recibieron coimas de Odebrecht a cambio de asegurarle contratos con el Estado, y afirmaron que una porci¨®n de estos dineros fue a parar en la reelecci¨®n de Santos. ¡°Mi inter¨¦s en ese contrato era ayudarle a los de Odebrecht que sacaran r¨¢pido el otros¨ª Oca?a¨CGamarra, para que ellos entregaran recursos econ¨®micos con destino a la campa?a presidencial del se?or Juan Manuel Santos Calder¨®n, periodo 2014¨C2018 reelecci¨®n, primera y segunda vuelta¡±, se lee en una de las declaraciones que El¨ªas dio a la Fiscal¨ªa.
El revuelo que surgi¨® tras lo pactado por el Grupo Aval en territorio norteamericano volvi¨® a poner el tema sobre la mesa. Uno de los documentos que hacen parte del acuerdo, como lo revel¨® el periodista Daniel Coronell en W Radio, reafirma la intromisi¨®n de Odebrecht en la campa?a de 2014 y lo dicho por El¨ªas. Ese a?o, a pocas semanas de la primera vuelta electoral, se llev¨® a cabo un soborno a trav¨¦s de aportes a la candidatura de Santos. ¡°En mayo de 2014, antes de que funcionarios del Gobierno colombiano aprobaran las nuevas obligaciones financieras para la ampliaci¨®n Oca?a-Gamarra, el Ejecutivo brasile?o acord¨® pagar sobornos adicionales a funcionarios del Gobierno colombiano en forma de contribuciones il¨ªcitas a la campa?a¡±, se lee en el acuerdo.
En este caso la verdad judicial ha sido m¨¢s esquiva. La justicia no ha aclarado c¨®mo habr¨ªa llegado el dinero a la campa?a, en qu¨¦ se habr¨ªa gastado ni qu¨¦ directivos habr¨ªan sido responsables de ello. Del lado de los funcionarios, justamente la Fiscal¨ªa imput¨® a 33 personas que trabajaron durante esos a?os en la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI), entidad encargada de definir el destino de la v¨ªa Oca?a - Gamarra.
Por su parte, el episodio de la financiaci¨®n a la campa?a de ?scar Iv¨¢n Zuluaga, rival de Santos en 2014, empez¨® a destaparse a finales de 2016. El publicista brasile?o Jos¨¦ Eduardo Cavalcanti de Mendon?a, m¨¢s conocido como Duda, prest¨® asesor¨ªa a la campa?a del exministro de Hacienda y sus honorarios ¡ªcon un valor cercano a los 1,6 millones de d¨®lares¡ª fueron pagados por la constructora brasile?a. As¨ª se lo cont¨® al Ministerio P¨²blico de ese pa¨ªs, con el que colabor¨® desde 2016. Seg¨²n narr¨®, fue contactado por un emisario de Odebrecht, quien lo relacion¨® con Zuluaga y con su hijo David, que era el gerente de la campa?a. Los tres participaron de una reuni¨®n que tuvo lugar en S?o Paulo, en febrero de 2014.
Zuluaga neg¨® las acusaciones y alcanz¨® a librarse de la investigaci¨®n que adelant¨® en su contra el Consejo Nacional Electoral. Sin embargo, una traici¨®n de uno de sus asesores termin¨® hundi¨¦ndolo. Daniel Garc¨ªa Arizabaleta, su mano derecha y quien estaba siendo procesado por enriquecimiento il¨ªcito, entreg¨® unos audios a la Fiscal¨ªa en los que se escucha al exministro confesar que s¨ª sab¨ªa del ingreso del dinero ilegal a las cuentas de su campa?a; all¨ª tambi¨¦n habla de armar una estrategia para refutar cualquier v¨ªnculo que le pudieran endilgar con Odebrecht. ¡°Creo que, para protecci¨®n de todos nosotros, aqu¨ª no podemos entregar nada y tenemos que tener una actitud de pelea¡±, se le escucha decir a Zuluaga. Con esa informaci¨®n, la Fiscal¨ªa imput¨® cargos al excandidato y a su hijo.
La grabaci¨®n puede ser la estocada final para Zuluaga, quien fue aislado por los miembros de su partido, el Centro Democr¨¢tico. Santos ha pedido excusas varias veces por lo sucedido y se mantiene en su posici¨®n: no ten¨ªa conocimiento. Diga la verdad o no, el fantasma de Odebrecht lo seguir¨¢ persiguiendo. Siempre que se conozcan nuevos elementos del esc¨¢ndalo, as¨ª no lo involucren directamente, terminar¨¢ salpicado.
Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S sobre Colombia y reciba todas las claves informativas de la actualidad del pa¨ªs.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.